El Sevilla disfruta de la madurez
El equipo de Caparr¨®s remonta un 0-2 con un renacido Podest¨¢ como protagonista
Una de las caracter¨ªsticas m¨¢s envidiadas de los tipos aguerridos es la capacidad de no mover un m¨²sculo cuando llegan los revolcones, explosiones o cataclismos en general. El Sevilla que se reinvent¨® en la goleada de Santander es as¨ª. Ayer, el Zaragoza, que jug¨® con uno menos toda la segunda mitad, le meti¨® dos goles sin querer y a los sevillistas les dio de lado. Remontaron con una naturalidad que tienta a pensar que si este equipo tuviera m¨¢s inventiva en la medular ser¨ªa temible.
Precisamente, un medio centro del Sevilla, el uruguayo Podest¨¢, fue el protagonista absoluto del partido. Aprovech¨® dos fallos de marcaje escandalosos y remont¨® de sendos cabezazos los dos goles de ventaja con los que se hab¨ªa encontrado el Zaragoza. En el minuto 22, una internada inocua por la banda derecha, rebot¨® en David y se col¨® a gol. Dos minutos despu¨¦s, el ¨¢rbitro pit¨® uno de esos miles de penaltis que hay en todos los partidos -Navarro agarr¨® a Villa cuando esperaba un centro- pero de los que apenas se pitan uno o dos por temporada.
SEVILLA 3 - ZARAGOZA 2
Sevilla: Esteban, Redondo, Javi Navarro, Pablo Alfaro, David; Mart¨ª (Ocio, m. 84), Podest¨¢; Navas (Anto?ito, m. 46) Baptista, Reyes (Mara?¨®n, m. 79); y Dar¨ªo Silva.
Zaragoza: Lainez (Valbuena, m. 5); Rebosio (Cuartero, m. 35), ?lvaro, Milito, David Pirri; Ponzio, Generelo; Galleti (Jes¨²s Mu?oz, m. 60), Cani, Savio; y Villa.
Goles: 0-1. M. 22, David, en propia puerta. 0-2. M. 29, Villa, de penalti. 1-2. M. 33, Podest¨¢. 2-2. M. 47. Podest¨¢. 3-2. M. 71. Anto?ito.
?rbitro: Meg¨ªa. Amonest¨® a Rebosio, Cuartero, ?lvaro, Mart¨ª, Alfaro, Ponzio, Redondo y Mara?¨®n. Expuls¨® a Generelo (m. 47) y a Podest¨¢ (m. 83).
Unos 30.000 espectadores en el S¨¢nchez Pizju¨¢n.
Pero el trabajo de Podest¨¢ fue espectacular. Se entreg¨® hasta tal punto que, renqueante, llegando ya tarde a todos los lances, acab¨® expulsado. El correcaminos uruguayo libera a Mart¨ª para la creaci¨®n y de eso se beneficia el equipo y sus resultados. El beneficio, sin embargo, est¨¢ condicionado por las limitaciones del mallorqu¨ªn. Con otro carburador, las explosiones de Reyes, Baptista y Dar¨ªo Silva s¨ª que podr¨ªan llevar al salto de calidad que se ha autoexigido la directiva del club.
En el Zaragoza destac¨® en lo negativo el brasile?o Savio. Ha pasado de ser el jugador de la mirada triste y el hablar quejoso del Madrid a ser un jugador triste a secas. Su equipo bascula hacia la derecha, en busca de Galletti y del brasile?o mete m¨¢s miedo el nombre estampado en la camiseta que su juego. El Zaragoza no crey¨® en s¨ª y dilapid¨® su ventaja. El Sevilla, sin embargo, se adora.
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