Todo en manos de Putin
Todo est¨¢ en tus manos era el t¨ªtulo de una canci¨®n que le cantaron a Vlad¨ªmir Putin sus seguidores en v¨ªsperas de estas elecciones. Ahora el t¨ªtulo es una realidad: todo est¨¢ en manos de Putin, porque el presidente ha conseguido la mayor¨ªa que necesita para cambiar la Constituci¨®n, si ¨¦se es su deseo. El l¨ªder ruso podr¨¢ utilizar esta mayor¨ªa para encauzar constructivamente los ¨¢nimos nacionalistas y extremistas que existen a lo largo y ancho del pa¨ªs o podr¨¢ incentivarlos con el peligro de que el proceso se torne incontrolable y las repercusiones internacionales que ello podr¨ªa tener. Putin dijo ayer tener "totalmente claro" que los resultados de las elecciones "reflejan las simpat¨ªas reales del pueblo" y las "realidades de la vida pol¨ªtica" de Rusia.
Vlad¨ªmir Rizhkov, secretario del comit¨¦ Rusia en Europa, dijo que los resultados indican una actitud hostil hacia el continente y record¨® tambi¨¦n la iniciativa legislativa de ¨²ltima hora presentada en el Consejo de la Duma saliente por los ultranacionalistas de Zhirinovski para anexionarse los territorios georgianos. Dimitri Rogozin, que dirig¨ªa el comit¨¦ de Relaciones Internacionales de la C¨¢mara saliente y que es uno de los principales l¨ªderes de R¨®dina (Patria), presiona para que Rusia acoja en su seno a Abjazia, Osetia del Sur e incluso Adzharia.
M¨¢s a¨²n, Rogozin dijo que hab¨ªa que aprovechar los precedentes de la pr¨¢ctica internacional para lanzar ataques preventivos contra las guaridas de los terroristas. El pol¨ªtico se refer¨ªa a Georgia, ese pa¨ªs vecino a Rusia donde acaban de llegar al poder fuerzas que los nacionalistas como ¨¦l califican de antirrusas. Rogozin, que obtuvo un aplastante triunfo en la circunscripci¨®n nominal donde se present¨® (78%), siempre ha apoyado al presidente, incluso en lo peor, como es la pol¨ªtica represiva en Chechenia. Hasta ahora, tanto Rogozin como su compa?ero de partido Sergu¨¦i Gl¨¢ziev parecen estar bajo control y no toman iniciativas arriesgadas por su cuenta. Algunos polit¨®logos especulaban con la posibilidad de que Gl¨¢ziev, con un ¨¦xito como el conseguido, se presentar¨ªa a las elecciones presidenciales de marzo, lo que no est¨¢ evidentemente en los planes del Kremlin. Pero, una vez conocido su triunfo, dijo que no pensaba competir y que se concentrar¨ªa en cumplir el programa electoral. ?ste tiene un car¨¢cter expropiatorio, porque de otra manera es muy dif¨ªcil ver c¨®mo van a lograr los 15.000 millones de d¨®lares extras que prometen sacar de la llamada renta de la
naturaleza, el beneficio de la explotaci¨®n de los recursos naturales.
Pero la docilidad de ambos l¨ªderes de R¨®dina podr¨ªa evolucionar si el presidente pierde popularidad, los precios del petr¨®leo bajan y la sociedad se radicaliza. Por sus or¨ªgenes en los ¨®rganos de Seguridad, Putin ha impulsado una restauraci¨®n nacionalista, al jugar con los ¨¢nimos de los uniformados rusos. As¨ª, el presidente rescat¨® el himno sovi¨¦tico y la bandera roja, entre otras cosas, adem¨¢s de recuperar la ret¨®rica de gran potencia. A medida que sub¨ªan los precios del petr¨®leo tambi¨¦n ha ido aumentando la prepotencia de los dirigentes rusos, que no cumplen sus obligaciones internacionales y ponen condiciones para ingresar en organismos como la Organizaci¨®n Mundial de Comercio (OMC). En las libertades c¨ªvicas ha habido un evidente retroceso con las limitaciones a la libertad de expresi¨®n, la arbitrariedad policial y de los ¨®rganos de justicia, cosas ¨¦stas que, a juzgar por las manifestaciones de los ganadores de estas elecciones, tender¨¢n a empeorar.
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