"Las bienales ya no tienen sentido: son parques tem¨¢ticos"
Sus cuadros ganan presencia en los selectos restaurantes de Valencia, en los despachos de poder, los consejos de administraci¨®n y los vest¨ªbulos de las entidades financieras.
Tras pasar una temporada buscando inspiraci¨®n en el alma de Venecia, est¨¢ haciendo de nuevo las maletas para marchar a Brasil a instancias de la Pinacoteca de Sao Paulo, donde producir¨¢ un ciclo de exposiciones para sus salas y para el Museo de Arte Moderno de Recife y el Museo do Estado de Salvador de Bah¨ªa. Recientemente ha realizado varios trabajos para AENA y ha transformado el obsoleto ordenador de la central de c¨¢lculo de Bancaixa en dos singulares esculturas para la entidad, una de las cuales ha sido cedida a la Universidad Polit¨¦cnica de Valencia.
"El IVAM ha entrado en una din¨¢mica de p¨¦rdida de nivel. Ha perdido altura"
"Sin debate p¨²blico, los especuladores de turno van a llenar las arcas con la Copa del Am¨¦rica"
Pregunta. Usted se exili¨® en 1958 a Alemania porque Valencia era cultural y pol¨ªticamente irrespirable. Todo ha cambiado.
Respuesta. Las diferencias hoy son abismales, pero no en todos los aspectos. Hay una gran falta de decisi¨®n respecto al modelo de ciudad. Al ciudadano le ven¨ªa todo impuesto durante el franquismo, pero ahora, en democracia, el modelo de ciudad no se consens¨²a. No hay cabezas pensantes que puedan aportar algo respecto a qu¨¦ tipo de ciudad se quiere. En otras ciudades s¨ª se ha dado. Pero en Valencia no ha habido jam¨¢s un debate. Nunca se pregunt¨® a los profesionales al respecto.
P. ?La ciudad ha crecido sin rumbo?
R. Ha habido una eclosi¨®n muy grande pero muy nefasta. La Ciudad de las Artes y las Ciencias se hizo con precipitaci¨®n, sin voluntad de hacer una ciudad habitable, bella y racional. Santiago Calatrava amonton¨® una serie de maquetas y jam¨¢s se plante¨® si aquello pod¨ªa estar en funci¨®n del individuo que pasea, ve y tiene perspectiva. Ha empotrado el Palacio de las Artes junto al puente y no ha dejado espacio. Me parece una ineptitud crasa. Va a quedar ah¨ª hasta que alg¨²n atrevido haga algo serio por esta ciudad y lo bombardee. No he visto arquitectura m¨¢s fea en mi vida. Por el mismo precio se podr¨ªa hacer un concurso para que los grandes arquitectos en el mundo dieran ideas, pero aqu¨ª siempre estamos en lo provisional.
P. Expl¨ªquese.
R. Los pol¨ªticos van de provisionales por el mundo. Todo es provisional: son cuatro a?os. Eso se ha visto muy claramente en el IVAM. Es lacerantemente conocido que ¨¦ste es el ¨²ltimo escal¨®n para acceder al olimpo. No me refiero a quienes lo hicieron e impulsaron. Entonces el IVAM fue el primero en Espa?a y uno de los primeros de Europa. Luego el IVAM s¨®lo ha sido trampol¨ªn hacia un olimpo incierto.
P. ?Cu¨¢ndo se da el punto de inflexi¨®n? ?Con el PP?
R. S¨ª. La cultura no deb¨ªa de estar tan condicionada a los cambios pol¨ªticos, pero el IVAM cambia porque viene impuesto alguien desde Madrid. Todo nos viene impuesto. El director, los comisarios de exposiciones... Por lo visto aqu¨ª nos tienen que gobernar vascos y madrile?os, genoveses y cartagineses.
P. Ser¨¢ porque aqu¨ª no hay gente capaz.
R. La incapacidad de la persona es creerse incapaz. Valencia se cree incapaz, y cuando se cree capaz le da un proyecto tan importante como la Ciudad de las Ciencias a un valenciano que no tiene ni idea de arquitectura y me parece que copia. Con el mismo coste podr¨ªamos tener arquitectos envidiables que est¨¢n hablando del siglo XXI.
P. Tenemos a Norman Foster.
R. Le dir¨ªa que el Palacio de Congresos es una de sus peores obras. Esa boina es culpa suya absolutamente. Luego se han masacrado otros proyectos que iban a su alrededor porque pod¨ªan ser m¨¢s interesantes que el suyo y solaparlo. Le dir¨¦ algo muy fuerte: los arquitectos de la avenida de las Cortes Valencianas son la cosa m¨¢s inepta que he visto nunca. No est¨¢n en ninguna corriente. Esos edificios son propios del desarrollismo de los sesenta. Deber¨ªan estar en la c¨¢rcel porque est¨¢n malogrando la ciudad. No tienen verg¨¹enza.
P. Es lo que est¨¢n haciendo en todas partes, ?no?
R. Hay ciudades que tienen sentido de la modernidad y de la arquitectura. Se me ocurren muchas en Europa. Aqu¨ª se han hecho cositas m¨¢s altas sin ning¨²n respeto por la arquitectura del siglo XXI. La ciudad del futuro que se est¨¢ haciendo en Valencia son viviendas subvencionadas. Lamentable.
P. Valencia tiene una gran oportunidad con la Copa del Am¨¦rica para replantearse a s¨ª misma.
R. Un pre¨¢mbulo: el ciudadano tiene miedo a ejercer la cr¨ªtica. S¨®lo lo hace en el bar con sus amigos. Los poderes p¨²blicos no quieren que lo haga: les duele. Pero lo grave es que el ciudadano renuncie a ejercer la cr¨ªtica. La Copa del Am¨¦rica deber¨ªa ser un debate p¨²blico. ?Qu¨¦ va a pasar con la Copa del Am¨¦rica? Los especuladores de turno van a llenar las arcas. Constructores, promotores, urbanistas, prevaricadores del staff p¨²blico se van a poner las botas. Si no hay un debate de c¨®mo queremos esta ciudad, Valencia va a ser cada vez m¨¢s horrible. Habr¨¢ millones de adosados conformando una fachada de hormig¨®n desde Sagunto a Gandia en los terrenos que hasta ahora han quedado libres. Si eso es la Copa del Am¨¦rica, me cago en la Copa del Am¨¦rica. En el epitafio de Rita Barber¨¢ pondremos: "Ustedes la cagaron".
P. ?Valencia tiene contenedores culturales suficientes?
R. Desde hace bastantes a?os el poder valenciano ha sido inexistente. Los museos Gonz¨¢lez Mart¨ª y San P¨ªo V todav¨ªa no son valencianos, y para llorar diez pesetas de las antiguas a Madrid para sus ampliaciones estrechas llevamos una eternidad. Poco hace el Gobierno central por esto. Nos queda el IVAM, con todos sus inconvenientes. Por no hablar de lo que ofrece la Diputaci¨®n de Valencia, que es la risa. No hay proyecto, no hay nada. Tienen un museo que no saben qu¨¦ hacer con ¨¦l. El Muvim es un contenedor de hormig¨®n que alg¨²n d¨ªa nos servir¨¢ para refugiarnos de una cat¨¢strofe nuclear.
P. ?Qu¨¦ no est¨¢ haciendo el IVAM que deber¨ªa hacer?
R. Antes el IVAM ten¨ªa un presupuesto y era ¨¦se. Como espectador me llama la atenci¨®n que desde que lleg¨® el actual director le est¨¢n insuflando aire comprimido por un tubo desde entidades financieras. Sin embargo, el IVAM ha entrado en una din¨¢mica de p¨¦rdida de nivel. Ha perdido altura.
P. La partida de inversiones reales del IVAM se ha reducido en un 59,9%, pasando de siete millones de euros en 2003 a 2,8 en 2004.
R. Pero si tienes un t¨ªo rico que no pare de darte...
P. ?Su cr¨ªtica no se inserta en la pataleta de los artistas valencianos que no han entrado al IVAM por la puerta grande?
R. Por supuesto que no. Mire, como casi todos los que hacemos tonter¨ªas, yo tengo un ego exacerbado. Somos narcisistas hasta el aburrimiento, pero de vez en cuando uno se mira al espejo y reconoce que es bajito. No tengo ninguna pataleta sino contra m¨ª. S¨®lo quiero denunciar lo mediocre, la sinraz¨®n, el nepotismo, el despotismo, el direccionismo pol¨ªtico... Estoy a favor de la inteligencia y el savoir faire. Esta ciudad tuvo grandes arquitectos, quiz¨¢s alg¨²n pol¨ªtico, escasos escritores, pocos pensadores... Pero en cambio es productora de m¨²sicos y de artistas pl¨¢sticos. Somos muy provincianos y deber¨ªamos darnos una vuelta por el mundo para darnos cuenta de que Valencia tiene m¨²sicos y artistas pl¨¢sticos de una cuota superior a entornos de m¨¢s capacidad cultural y poblaci¨®n, como Bruselas, Lyon... Bueno, aqu¨ª hay artistas que dan un nivel superior, pero el provincianismo de la cr¨ªtica los minusvalora. Deber¨ªan darse una vuelta por las galer¨ªas de Nueva York o Par¨ªs y mirar cu¨¢l es el nivel. En los siglos XIV, XV y XVI no fuimos tan provincianos y nuestros artistas estuvieron en punta de lanza en el mundo.
P. Usted ha sido uno de los pintores mimados por la secretaria auton¨®mica de Cultura, Consuelo Ciscar.
R. Yo he sido mimado no m¨¢s que otros. Es una aseveraci¨®n y un agradecimiento. De la secretaria auton¨®mica tendr¨ªa que decirle que es la persona que hizo posible que el PP tuviera una pol¨ªtica cultural, porque el PP, lo mismo que Goebbels, nunca ha querido hablar de cultura y sacaba la pistola. Unos pensar¨¢n que lo ha hecho bien y otros que lo ha hecho mal, porque al que saca la cabeza le tiran el pato, pero esta se?ora ha propiciado cientos de carteles. El PP ha recibido eso como agua de mayo. Estos carcas se metieron en la modernidad gracias a ella. Yo he sido uno de tantos a los que ha utilizado para su pol¨ªtica con mayor o menor acierto, pero si me he dejado ha sido por ella y no por el PP. Ella, por lo menos, ha movido el tapete.
P. Usted tambi¨¦n particip¨® en la criticada Bienal de Valencia.
R. Las bienales se han convertido en una especie de parque tem¨¢tico, de circo ambulante. Son una asunto de manejo pol¨ªtico. Los pol¨ªticos utilizan el arte para sus espect¨¢culos e intereses. Hoy hay dos mil bienales que s¨®lo sirven para publicitar la ciudad en la que se hacen. Ya no tienen sentido: son parques tem¨¢ticos. La de Valencia tiene la misma voluntad de todas, es muy joven, pero tan floja como todas.
P. Los nuevos presupuestos de la Generalitat han dejado el ¨¢rea de Cultura temblando.
R. No quiero pensar que la cultura tenga que ser la que pague los platos rotos del gasto excesivo de la Generalitat, pero me parece bien que tambi¨¦n se le recorte. A la cultura no hay que bombardearla, pero tampoco hay que darle abrevadero para que viva de rentas. La cultura tiene que buscarse la vida.
P. ?Por eso se va a Brasil?
R. Bueno, voy a hacer un ciclo de exposiciones en el extranjero absolutamente independiente: sencillamente porque lo que hago parece ser que interesa a los museos.
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