'Silenci interior'
A finales de los a?os veinte, la vanguardia art¨ªstica espa?ola tuvo en Alberto S¨¢nchez y la Escuela de Vallecas todo un modelo de coherencia y singularidad. Tanto el escultor toledano como sus compa?eros de viaje (Palencia, Laso, Caneja, Luis Castellanos, Segarra) tomaron como fuente y campo de acci¨®n, no el Madrid aristocr¨¢tico y acad¨¦mico, monumental, con el Guadarrama de fondo, sino los ¨¢ridos parajes de Vallecas, las llanuras desoladas, geol¨®gicas, el cerro Almod¨®var, la naturaleza sublimada y ¨¦pica del sudeste madrile?o. Esa b¨²squeda del hombre, de su huella, en la arqueolog¨ªa del paisaje, en la materia rural, agreste y dura de los campos, en la sencilla narraci¨®n de la piedra, de los lentos horizontes cargados de silencio, la he vuelto a encontrar, siete d¨¦cadas despu¨¦s, en una exposici¨®n fotogr¨¢fica que estos d¨ªas se exhibe en la Seu Universitaria de Benissa. All¨ª, en los bajos de la rehabilitada Casa-palau dels Andr¨¦s, en pleno centro hist¨®rico, cualquiera puede contemplar el fruto de una mirada desnuda y aut¨¦ntica, la vida exacta y detenida en las im¨¢genes que ?ngel G. Catal¨¢ ha robado al paisaje de la Marina Alta y Baixa, penetrando con asombrosa sensibilidad en las guaridas del silencio, en los lugares donde emerge la espiga, cabalga el agua, exuda la tormenta, se derrama la nieve, habita el olvido y un ¨¢ngel de m¨¢rmol o ceniza llora por todos los bosques calcinados. Rincones, detalles, fragmentos de X¨¤bia, Vall d'Ebo, Serra la Venta, Sella, Quatretondeta, Polop, Puig Campana, Benissa, Pego, Moraira, el Maigm¨®, Aitana, Ll¨ªber, D¨¦nia, Famorca, Castell de Castells, Bolulla, Bernia, Pug Campana, Calp o Altea nos invitan a detenernos para creer un poco m¨¢s en la vida. Y junto a ellos, junto al mutismo esencial de las im¨¢genes de Catal¨¢, los textos de Ismael Belda, un convicto Cavanilles del siglo XXI que ha sabido destripar, con una po¨¦tica sabia, limpia, libre de alm¨ªbar, la magia del paisaje, el secreto de esa geograf¨ªa rescatada e ¨ªntima. Les sugiero hacerlo. Benissa est¨¢ ah¨ª, en pleno coraz¨®n de la Marina Alta. En su hermoso casco antiguo les espera el silencio.
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