Kerry barre a sus rivales dem¨®cratas en otros dos Estados
El senador califica de extremista al Gobierno de Bush y promete el cambio
El senador John Kerry avanza de victoria en victoria -el s¨¢bado gan¨® de forma aplastante en los Estados norte?os de Michigan y Washington- en su carrera hacia la designaci¨®n como candidato del Partido Dem¨®crata. Aunque sus tres rivales a¨²n no arrojan la toalla, los electores empiezan a estar convencidos de que es el mejor candidato posible para derrotar el 2 de noviembre al presidente republicano George W. Bush.
Kerry, que ha ganado 9 de las 11 primarias y caucus celebradas, se llev¨® tambi¨¦n Michigan (128 delegados) con el 52% de los votos y el Estado de Washington (76 delegados) con el 49%. Acumula 412 delegados de los 2.162 necesarios para obtener la nominaci¨®n de su partido y por eso ha dejado de preocuparse por las cr¨ªticas de los que van quedando atr¨¢s: Howard Dean, John Edwards y Wesley Clark. Habla pensando en el futuro enfrentamiento con Bush y por eso en la noche del s¨¢bado repiti¨® el mensaje que se escucha en todas las primarias: "?Los d¨ªas de Bush est¨¢n contados; el cambio se acerca".
Kerry, que se prepara para rebatir un posible ataque desde la Administraci¨®n sobre su presunto radicalismo, lanz¨® el suyo al tratar de situar el marco del debate: "?Vamos a respaldar los valores que han definido a EE UU o vamos a seguir por la v¨ªa extrema del Gobierno de Bush, una v¨ªa que contradice nuestra historia y nuestras esperanzas?".
Howard Dean sigue peleando contra la corriente. Lo mejor que consigui¨® el s¨¢bado fue quedar segundo, pero a una distancia sideral de Kerry: logr¨® el 17% en Michigan y el 30% en Washington. Algo es algo, pero muy poco para quien encabezaba los sondeos en ambos Estados hace tres semanas. Dean se aferra al 30% conseguido en Washington para decir: "El mensaje es que esta carrera y este debate est¨¢n abiertos y que somos la aut¨¦ntica alternativa a John Kerry".
Pero ni en los caucus de Maine de ayer ni en las primarias de Virginia y Tennessee de ma?ana hay perspectivas optimistas para Dean, que se ha impuesto un desaf¨ªo: si el jueves en Wisconsin -otro de sus Estados indiscutibles hace semanas- no gana, estudiar¨¢ el abandono.
Dean ha recibido un duro golpe con la retirada del apoyo que le hab¨ªa dado el sindicato de funcionarios federales y locales, uno de los principales bastiones con que contaba. En un ataque de realismo, contagiado sin duda por el esp¨ªritu pragm¨¢tico que se ha apoderado de los electores dem¨®cratas, Dean ha declarado algo impensable hace d¨ªas: [estoy dispuesto] "a hacer cualquier cosa con tal de que nos libremos de Bush; lo que sea mejor para el partido". En otras palabras, que se ofrece como candidato de Kerry a la vicepresidencia.
Los otros dos aspirantes en liza, adem¨¢s de Dean, no tuvieron buenas noticias el s¨¢bado. John Edwards fue tercero en Michigan y Washington, con el 14% y el 7%, y el ex general Wesley Clark fue cuarto con un 7% y 3%, respectivamente. Las primarias viajan ahora a territorios del sur, m¨¢s c¨¢lidos pol¨ªticamente para ambos. Clark, que asegura tener "un gran apoyo" nacional, afirma que continuar¨¢ al menos hasta el supermartes del 2 de marzo, cuando 10 Estados celebran primarias.
En cuanto a Edwards, que se perfila como el mejor candidato a vicepresidente, tiene mejores perspectivas en Virginia y Tennessee. Su esperanza es "quedar arriba" -considerar¨ªa un ¨¦xito ser segundo-, llegar el jueves a Wisconsin con empuje y confiar en el reparto del supermartes.
Est¨¢ claro que todos van detr¨¢s de Kerry y que su ¨²nico objetivo es ser alternativa por lo que pueda pasar. El favorito est¨¢ siendo sometido al escrutinio de los medios de comunicaci¨®n y a los ataques republicanos. En una carrera tan dilatada como la suya -hace 20 a?os ya estaba en campa?a para lograr un esca?o en el Senado- hay ejemplos para ser utilizados en cualquier sentido.
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