Panorama desde el puente

En uno de mis ¨²ltimos vuelos a Bruselas me encontr¨¦ con un buen amigo m¨ªo, ex ministro de Gonz¨¢lez por m¨¢s se?as. "?C¨®mo ves las elecciones?", le pregunt¨¦. "A vosotros os soportan mal, pero en nosotros no ven alternativa", me contest¨®. Comprendo muy bien que el PSOE actual no sea una alternativa de gobierno, pero no creo que los espa?oles puedan haberse cansado del Partido Popular. Porque las cosas van bien: en Espa?a hoy trabaja m¨¢s gente que nunca; las pensiones, siempre escasas, son hoy m¨¢s generosas que cuando llegamos al gobierno; dedicamos actualmente bastantes m¨¢s recursos a educaci¨®n y sanidad que en la ¨¦poca del califato felipista; las infraestructuras han crecido tanto que hoy tenemos m¨¢s kil¨®metros de autopista que Alemania. En s¨ªntesis, los espa?oles vivimos hoy mucho mejor que en 1995 y todo parece indicar que estamos en muy buenas condiciones para seguir creciendo. Es probable que Aznar sea un sequer¨®n pero no se elige a un presidente para que nos divierta en una tertulia, sino para que nos saque las casta?as del fuego. Y adem¨¢s el que se presenta se llama Rajoy. Aviso a los navegantes: cuando los americanos se cansaron de Clinton, un campe¨®n del equilibrio presupuestario como nosotros, cayeron en Bush, tan manirroto como nuestros socialistas en la gesti¨®n del dinero p¨²blico. El resultado est¨¢ a la vista: Bush ser¨¢ el primer presidente despu¨¦s de Hoover que terminar¨¢ su mandato con menos empleos disponibles que cuando empez¨®, igualito que Felipe Gonz¨¢lez. Y es que cuando las cosas van bien, no es sensato cambiar de caballo a mitad de carrera.

Jos¨¦ Manuel Garc¨ªa-Margallo es eurodiputado del PP.