Un almirante ruso desata la alarma al advertir de una explosi¨®n nuclear

Vlad¨ªmir Kuroy¨¦dov, jefe de la Armada, cre¨® un clima de profunda preocupaci¨®n en Rusia y en otros pa¨ªses vecinos cuando confes¨® ayer que el buque insignia de la Flota del Norte, el crucero nuclear Pedro el Grande, pod¨ªa estallar en cualquier momento. Por la tarde, y a la vista de la gran alarma provocada por las palabras del almirante, Kuroy¨¦dov se desdijo y asegur¨® que la situaci¨®n del buque insignia no amenaza la seguridad nuclear.

Las inusitadas declaraciones matutinas de Kuroy¨¦dov llegaban al d¨ªa siguiente de que el Pedro el Grande hubiera sido amarrado en Severomorsk, la principal base naval rusa en el mar de B¨¢rents y sede de la Flota del Norte, sin que se dieran explicaciones de lo que suced¨ªa con esa moderna nave nuclear. "El buque se encuentra en tan mal estado que puede volar por los aires en cualquier momento, algo especialmente peligroso si se tiene en cuenta que posee un sistema de propulsi¨®n at¨®mica", declar¨® Kuroy¨¦dov a un grupo de periodistas.

El sistema de propulsi¨®n del Pedro el Grande, el m¨¢s moderno de los buques de la Armada rusa, que entr¨® en servicio en 1998, est¨¢ compuesto por dos reactores nucleares con una potencia conjunta de 150.000 caballos de fuerza. El buque, que puede desarrollar una velocidad m¨¢xima de unos 32 nudos por hora (60 kil¨®metros por hora), tiene 253 metros de eslora y 28 de manga. Su desplazamiento es de 26.396 toneladas, su autonom¨ªa de navegaci¨®n de dos meses y est¨¢ pertrechado con 20 misiles de crucero nucleares Granit con un alcance de m¨¢s de 500 kil¨®metros.

Ruina de la Armada

Kuroy¨¦dov denunci¨® que "por donde andan los almirantes todo est¨¢ en orden en los buques, pero por donde ¨¦stos no pasan, todo se encuentra en tal estado que en cualquier momento puede estallar". El comandante en jefe de la Armada especific¨® que se refer¨ªa tambi¨¦n al "mantenimiento del reactor nuclear". "Semejante actitud del mando hacia el estado de sus buques conduce a la ruina de la Armada", agreg¨® molesto Kuroy¨¦dov, que ha dado dos semanas de plazo al contraalmirante Vasili Kasat¨®nov, capit¨¢n del Pedro el Grande, para "subsanar todos los fallos".

Las declaraciones de Kuroy¨¦dov eran tanto m¨¢s preocupantes por cuanto se enmarcaban en la serie de fracasos nucleares que ha sufrido la Armada rusa ¨²ltimamente. As¨ª, durante las primeras maniobras de armas nucleares estr¨¢tegicas realizadas desde hace 30 a?os, que se desarrollaron a mediados de febrero pasado, dos misiles intercontinentales no lograron ser lanzados desde submarinos at¨®micos y un tercero tuvo que ser destruido despu¨¦s de que se desviara de su trayectoria. Adem¨¢s, nadie ha olvidado en Rusia el hundimiento del submarino nuclear Kursk, que cost¨® la vida a sus 118 tripulantes en agosto del a?o 2000.

El comandante en jefe de la Armada se vio obligado a desdecirse ayer por la tarde de las alarmantes declaraciones hechas en la ma?ana. "El servicio de seguridad nuclear a bordo del buque Pedro el Grande responde a todas las exigencias necesarias, pero el estado de los espacios comunes y camarotes es insatisfactorio", precis¨®. "Las informaciones seg¨²n las cuales el buque constituir¨ªa una amenaza nuclear no corresponden de ninguna manera a la realidad", asegur¨® Kuray¨¦dov.