La Audiencia de Pamplona juzgar¨¢ el 8 de junio por cohecho a Urralburu y Otano

Ocho a?os despu¨¦s de su apertura, el denominado caso Otano tiene ya fecha de juicio. La Secci¨®n Segunda de la Audiencia de Pamplona iniciar¨¢ el pr¨®ximo 8 de junio las sesiones del juicio oral contra los ex presidentes navarros Gabriel Urralburu y Javier Otano, ambos socialistas, sus esposas, Olivia Balda y Mar¨ªa Teresa Arcos, respectivamente; el ex consejero de Industria Antonio Arag¨®n y su esposa, Isabel Romeo; Jorge Esparza y el abogado madrile?o Agust¨ªn Guardia Palau. Todos ellos est¨¢n acusados de cohecho en diferentes grados de autor¨ªa.

La ¨²nica acusaci¨®n en el proceso la ejercer¨¢n 129 ciudadanos navarros. La Fiscal¨ªa no acusa al considerar que no existen pruebas suficientes de la comisi¨®n de ning¨²n delito, mientras que la acusaci¨®n particular que promovi¨® Batasuna ha quedado finalmente excluida por la ilegalizaci¨®n de esta formaci¨®n.

El tribunal deber¨¢ determinar el grado de responsabilidad de los ocho imputados en el presunto cobro en 1989 de una comisi¨®n de algo m¨¢s de un mill¨®n de euros por la venta de la factor¨ªa Safel (antigua Super Ser) a la multinacional alemana Bosch Siemens, una operaci¨®n cifrada globalmente en 30 millones de euros.

Urralburu, entonces presidente del Gobierno navarro, y su consejero de Industria, Arag¨®n, se enfrentan a sendas peticiones de cuatro a?os y dos meses de c¨¢rcel como autores de un presunto delito de cohecho. Para el resto de los acusados se solicitan multas de 6.000 euros en calidad de encubridores del mismo delito.

Es m¨¢s que probable que en el banquillo de los acusados s¨®lo se sienten Urralburu y Arag¨®n, dado que, en funci¨®n de las penas solicitadas por la acci¨®n popular, el resto de los imputados no est¨¢n obligados a comparecer f¨ªsicamente en la vistas oral.

La investigaci¨®n del caso comenz¨® en junio de 1996. El rotativo Diario de Navarra revel¨® la existencia de una cuenta bancaria en Suiza cuyo titular era el entonces presidente foral, el socialista Javier Otano, sustituto de Urralburu, quien hab¨ªa tenido que dimitir por su implicaci¨®n en el esc¨¢ndalo de Luis Rold¨¢n. Por esa cuenta, abierta en el banco suizo CBI-TDB a nombre de Otano y de su esposa, hab¨ªa pasado parte del dinero presuntamente pagado por Bosch Siemens. El consorcio germano ingres¨® entre los a?os 1989 y 1990 un total de 1,9 millones de euros en tres cuentas bancarias.

Otano dimiti¨® y el tripartito que presid¨ªa, formado por los socialistas, CDN y EA, salt¨® por los aires, abri¨¦ndose una profunda crisis pol¨ªtica en la comunidad foral que finaliz¨® meses despu¨¦s con la llegada a la presidencia del regionalista Miguel Sanz.

Los abogados defensores lucharon por impedir que se celebrase el juicio y han pedido la absoluci¨®n de todos los implicados. Algunos letrados consideran que, en todo caso, el delito habr¨ªa prescrito y estiman que el tribunal se enfrenta a un ejemplo de cosa juzgada, al entender que el presunto pago de esta comisi¨®n correspondi¨® al juicio del caso Urralburu. En 2001, el Tribunal Supremo confirm¨® la condena de Urralburu a cuatro a?os de prisi¨®n por un presunto delito continuado de cohecho por cobrar comisiones en la adjudicaci¨®n de diversas obras p¨²blicas. Antonio Arag¨®n fue condenado entonces a tres a?os y ocho meses de c¨¢rcel y sus respectivas esposas, a tres a?os cada una. En esa misma causa fueron condenados a tres a?os de c¨¢rcel Esparza y el ex director general de la Guardia Civil. Todos ellos han cumplido ya sus penas.

Los jueces entienden que estos aspectos procesales deber¨¢n ser abordados al inicio de la vista oral, que est¨¢ previsto que se prolongue entre los d¨ªas 8 y 11 de junio.

Los sucesivos titulares del Juzgado de Instrucci¨®n n¨²mero 1 de Pamplona han sido los encargados de investigar los hechos. La juez concluy¨® la instrucci¨®n en junio de 2002. La personaci¨®n de la entonces Herri Batasuna en la causa se remontaba al a?o 1998.

Excepto el abogado Guardia Palau, los dem¨¢s imputados fueron titulares de cuentas suizas por las que pas¨® un dinero al que se le perdi¨® la pista entre 1994 y 1995, cuando la cuenta, ya entonces a nombre exclusivamente de la esposa de Otano, fue vaciada.

La banquera suiza Briggitte de Senarclens Aubert declar¨® en comisi¨®n rogatoria que el dinero viaj¨® en varios maletines desde Suiza hasta el despacho madrile?o de Guardia Palau, quien niega esa imputaci¨®n.