Bernat Soria encabeza con 50 Nobel un manifiesto por la clonaci¨®n terap¨¦utica

El cient¨ªfico espa?ol Bernat Soria y su colega estadounidense Jos¨¦ Cibelli, colaborador del equipo coreano que logr¨® las primeras clonaciones de embriones humanos, defendieron ayer ante Naciones Unidas el uso m¨¦dico de las c¨¦lulas madre embrionarias. Es la primera vez que la Comisi¨®n de Derechos Humanos de la ONU, con sede en Ginebra, trata el asunto de la libertad de investigaci¨®n. Soria y Cibelli encabezan un manifiesto en favor de esa l¨ªnea experimental, que cuenta ya con la firma de 50 premios Nobel y ser¨¢ enviado a todos los pa¨ªses de la ONU.

La intervenci¨®n de los dos cient¨ªficos ante la 60? Asamblea de la Comisi¨®n de Derechos Humanos de la ONU supone, junto con el lanzamiento del manifiesto que ellos mismos encabezan, el inicio de una campa?a mundial para formar un lobby de pa¨ªses favorables a la investigaci¨®n con embriones humanos. Ese lobby podr¨¢ impedir que prosperen iniciativas como la promovida hace un a?o por Costa Rica, Estados Unidos, Espa?a y otros estados miembros, que pretend¨ªa una prohibici¨®n mundial de todo tipo de clonaci¨®n, incluida la terap¨¦utica.

La Comisi¨®n de Derechos Humanos de la ONU est¨¢ compuesta por representantes de 53 Estados, y se re¨²ne todos los a?os por estas fechas en Ginebra. Fue precisamente esta comisi¨®n la que estudi¨® el a?o pasado la propuesta estadounidense de prohibir todo tipo de clonaci¨®n.

Aquella iniciativa estuvo a punto de prosperar, en lo que hubiera supuesto un grave impedimento para unas t¨¦cnicas que -seg¨²n la opini¨®n mayoritaria de la comunidad cient¨ªfica- constituyen la mejor esperanza de hallar tratamientos para la diabetes, el Parkinson, las lesiones medulares y muchas otras enfermedades hoy incurables. La comisi¨®n opt¨® finalmente por declarar una moratoria de dos a?os, gracias sobre todo a los pa¨ªses ¨¢rabes, que no ponen tantas trabas religiosas como los cat¨®licos a la investigaci¨®n con embriones.

"La campa?a mundial est¨¢ promovida por un grupo de europarlamentarios del Partido Radical italiano", explicaba ayer Bernat Soria desde Ginebra, "pero la iniciativa se est¨¢ construyendo desde abajo -sociedad civil, cient¨ªficos, asociaciones de pacientes- y pretende coordinar a una serie de grupos de presi¨®n que ya est¨¢n funcionando en cada pa¨ªs. Un ejemplo es la Juvenile Diabetes Foundation, con sede en Nueva York, que lleva a?os apoyando intelectual y financieramente las investigaciones con embriones humanos".

Presi¨®n en cada pa¨ªs

La idea es que estos grupos promuevan corrientes favorables a la investigaci¨®n embrionaria en cada uno de sus pa¨ªses y presionen a sus respectivos gobiernos. Si el manifiesto cala en el suficiente n¨²mero de pa¨ªses, las iniciativas prohibicionistas podr¨¢n ser bloqueadas en la ONU.

Entre los 50 premios Nobel firmantes del manifiesto figuran Paul Berg, Baruj Benacerraf, G¨¹nter Blobel, Stanley Cohen, Cristian de Duve, Jerome Friedman, Robert Furchgott, Paul Greengard, Antony Hewish, Aaron Klug, Harold Kroto, Jean-Marie Lehn, Mario Molina, Ilya Prigogine, John Walker y Jos¨¦ Saramago.

El manifiesto comienza: "Los abajo firmantes, ciudadanos de todo el mundo, l¨ªderes en los campos de la ciencia, las artes y la pol¨ªtica, se han unido para expresar su esperanza en la libertad de investigaci¨®n, y para rechazar a aquellos elementos de la sociedad que pretenden cegar, restringir o debilitar esa libertad".

"Como resultado del r¨¢pido avance de la investigaci¨®n cient¨ªfica, y en particular de los estimulantes resultados del trabajo reciente con c¨¦lulas madre de embriones humanos", prosigue el manifiesto, "existe hoy la genuina posibilidad de que esas investigaciones puedan resultar en curas para condiciones como la diabetes, enfermedades cardiovasculares, Parkinson, Alzheimer, esclerosis, distrofia muscular y otras enfermedades angustiosas que afligen a millones de personas en el mundo".

Control religioso

El texto propone llanamente "evitar la imposici¨®n de un control moral o religioso que puede destruir la capacidad de los cient¨ªficos para avanzar en la causa del bienestar humano".

Los firmantes urgen al secretario general de la ONU, Kofi Annan, y a los estados miembros a "rechazar todas las propuestas que pretendan prohibir la investigaci¨®n con c¨¦lulas madre embrionarias, ya sea obtenidas de embriones sobrantes de los tratamientos de fertilidad, condenados de lo contrario a la destrucci¨®n, o la t¨¦cnica de la transferencia nuclear [es decir, la clonaci¨®n terap¨¦utica].

En opini¨®n de los firmantes, si prosperan las iniciativas prohibicionistas -como la presentada por Estados Unidos, Espa?a y otros pa¨ªses hace un a?o-, "se condenar¨ªa a decenas de millones de personas que padecen enfermedades extenuantes a una vida privada de esperanza".

La moratoria decidida por la Comisi¨®n de Derechos Humanos de la ONU expira dentro de un a?o, y los firmantes esperan tener para entonces el suficiente apoyo para que la Asamblea General de Naciones Unidas se pronuncie a favor de la clonaci¨®n terap¨¦utica y en contra de la reproductiva (es decir, la clonaci¨®n de ni?os).

El manifiesto tambi¨¦n propone crear una comisi¨®n internacional dedicada al seguimiento de las investigaciones con embriones humanos, en la l¨ªnea de la actual Comisi¨®n Internacional de la Energ¨ªa At¨®mica.