Panam¨¢ vota a la sombra del Canal

El socialdem¨®crata Mart¨ªn Torrijos, de 41 a?os, hijo del caudillo Omar Torrijos (1929-1981), encabeza, con el 40% en la intenci¨®n del voto, las encuestas previas a las generales de hoy en Panam¨¢: un pa¨ªs castigado por las dos seculares lacras latinoamericanas, la corrupci¨®n y la pobreza, y cuyo principal patrimonio es el canal interoce¨¢nico construido por Estados Unidos en el a?o 1914. El vencedor deber¨¢ decidir sobre la complicada ampliaci¨®n de la estrat¨¦gica v¨ªa de agua, devuelta por Estados Unidos hace cuatro a?os. El ex presidente Guillermo Endara, de 67 a?os, que gobern¨® entre 1989 y 1994, figura en segundo lugar, con el 27%. Los cuatro candidatos en liza derrocharon demagogia y populismo para seducir a los 1,9 millones de electores. No hay segunda vuelta.

La historia de Panam¨¢ es casi la historia de la v¨ªa de agua de 80 kil¨®metros que une el Pac¨ªfico y el Atl¨¢ntico, por la que transitan 14.000 buques anualmente, construida por Estados Unidos en el a?o 1914 y transferida el 31 de diciembre de 1999. El turismo reporta a las arcas p¨²blicas en torno a los 800 millones de d¨®lares y el canal, m¨¢s de 900 millones de d¨®lares en peajes, pero los nuevos barcos de gran calado apenas pueden navegarlo. La ampliaci¨®n costar¨¢ m¨¢s de 8.000 millones de d¨®lares, seg¨²n algunos estudios. Omar Torrijos y James Carter concluyeron en el a?o 1977 las negociaciones sobre la entrega del canal, y su hijo Mart¨ªn quiso recibirlo en 2000, pero no pudo: fue derrotado, en las generales de 1999, por la actual presidenta, Mireya Moscoso.

Tercera consulta

La modernizaci¨®n del canal ser¨¢ el punto fundamental de la agenda del gobernante elegido en la tercera consulta desde la invasi¨®n norteamericana del 20 de diciembre de 1989 para derrocar y capturar al dictador Manuel Antonio Noriega, encarcelado en EE UU por narcotr¨¢fico. Los paname?os elegir¨¢n a 78 legisladores, 75 alcaldes, 619 delegados de distrito o concejales y 20 diputados del Parlamento Centroamericanos. Sus principales preocupaciones son ¨¦stas: la pobreza, enquistada en aproximadamente los hogares del 40% de los tres millones de nacionales, el paro abierto o sumergido, superior al 30%, y la impune corrupci¨®n p¨²blica y privada, entre ella el lavado de dinero en el sistema financiero. Termina la Administraci¨®n de Moscoso, m¨¢s inepta que eficaz y pr¨®spera, seg¨²n la mayor¨ªa de los analistas, sobre sus cinco a?os de gesti¨®n.

El canal contin¨²a siendo el pulm¨®n de Panam¨¢, como el petr¨®leo lo es de Venezuela. Estados Unidos, que lleg¨® a tener 52.000 militares en esta naci¨®n, devolvi¨® 150.000 hect¨¢reas de territorio entre los a?os 1979 y 1999 en cumplimiento de los Tratados del Canal. Casi dos tercios de esa tierra est¨¢n destinados a la operaci¨®n de la ruta acu¨¢tica y a la preservaci¨®n del ecosistema que garantiza el abastecimiento de agua para su operaci¨®n. El resto, con m¨¢s de 10.000 edificaciones, fueron colocados en el mercado inmobiliario. El valor de las ¨¢reas revertidas en el a?o 2002 alcanz¨® los 1.473 millones de d¨®lares: el 9% del PIB paname?o. El monto de las inversiones en el canal, concretamente un nuevo juego de esclusas, depender¨¢ de la demanda.

Los oc¨¦anos Pac¨ªfico y Atl¨¢ntico est¨¢n a diferente altura. Aprovechando el canal, las naves se ahorran hasta 7.000 kil¨®metros de circunnavegaci¨®n. "No se har¨¢ una inversi¨®n que est¨¦ fuera de contexto", precis¨® Francisco Miguez, director del equipo del denominado Plan Maestro. La v¨ªa interoce¨¢nica, cruzada por 825.000 naves desde su apertura, trabaja a su m¨¢xima capacidad y la Administraci¨®n quiere sacarle el m¨¢ximo rendimiento econ¨®mico posible. La decisi¨®n no es f¨¢cil porque tendr¨¢ un importante impacto ambiental y social.

Refer¨¦ndum

La Autoridad del Canal de Panam¨¢ (ACP), el ente estatal aut¨®nomo que lo gestiona, entregar¨¢ en junio cerca de 150 estudios sobre previsi¨®n de obras. El Cuerpo de Ingenieros de Estados Unidos y varios consorcios europeos figuran entre los eventuales contratistas. La Constituci¨®n establece que la ampliaci¨®n debe aprobarse en refer¨¦ndum, cuya convocatoria corresponde a la nueva Administraci¨®n, que ser¨¢ investida el primero de septiembre de este a?o. Mart¨ªn Torrijos sostiene que "se atender¨¢n los posibles efectos que causara a los moradores de la cuenca hidrogr¨¢fica, de manera que sus derechos sean respetados". "El canal", agreg¨® "es el activo m¨¢s importante de la rep¨²blica y su expansi¨®n y modernizaci¨®n ser¨¢ una de las decisiones m¨¢s importantes que en este siglo tomaremos los paname?os". Endara la aprobar¨ªa, "siempre que sea rentable, siempre que no quedemos hipotecados para siempre". Reacia, la Coordinadora Campesina Contra los Embalses (CCCE), que representa a unos 100.000 campesinos de la cuenca, se moviliz¨® contra la necesaria inundaci¨®n de sus tierras. Probablemente deber¨¢ ceder, porque el tr¨¢fico de nav¨ªos extranjeros es vital para la econom¨ªa nacional, ya que representa el 12% del comercio mar¨ªtimo de Estados Unidos y el 2,3% del transporte mar¨ªtimo mundial. "Esto pone un poquito de estr¨¦s al equipo de operaciones", declar¨®. Saliendo al paso de algunos temores, el viceministro de Comercio, Rommel Adames, negociador de un tratado de libre comercio con Estados Unidos, neg¨® la progresiva privatizaci¨®n de la v¨ªa acu¨ªfera. "Abrir el canal ser¨ªa algo as¨ª como decirle a Estados Unidos que abran el departamento de Defensa o el programa espacial a la privatizaci¨®n", dijo.

Los ecologistas de Greenpeace han pedido al Gobierno paname?o que impida el paso de barcos con residuos nucleares como el Pacific Sandpiper, que recientemente cruz¨® el canal, sin incidentes, rumbo a Jap¨®n. Fue "un Chern¨®bil flotante" que pudo ser asaltado por grupos terroristas o causar una cat¨¢strofe en el caso de un accidente, seg¨²n alert¨® la citada organizaci¨®n internacional.