Medicamentos que no ayudan

Donar a los pa¨ªses en v¨ªas de desarrollo lo que nos sobra en el llamado primer mundo no siempre tiene consecuencias positivas. Un ejemplo de ello es el env¨ªo de los restos de medicamentos. La Organizaci¨®n Mundial de la Salud (OMS) elabor¨® unas directrices en 1996 -que fueron revisadas tres a?os m¨¢s tarde- en las que fija las pautas de las donaciones de f¨¢rmacos "correctas" y desaconseja el env¨ªo de medicamentos sobrantes. La organizaci¨®n comprob¨® que la mayor¨ªa de estos env¨ªos no hab¨ªan servido para nada y que, en muchos casos, incluso hab¨ªan supuesto un alto coste para el pa¨ªs receptor. A pesar de ello, las donaciones de f¨¢rmacos sobrantes se han seguido realizando; por ello, un conjunto de ONG y asociaciones espa?olas lanzaron la campa?a Saber donar en 1999 para informar tanto a los profesionales como a la poblaci¨®n de los procedimientos adecuados para realizar las donaciones de medicamentos.

En plena crisis, Argentina tuvo que devolver contenedores llenos de medicinas

Aunque la campa?a provoc¨® ciertos cambios en las pr¨¢cticas de las donaciones, en realidad no termin¨® de calar. Muchos ciudadanos siguen pensando que es bueno enviar medicamentos que sobran en los botiquines espa?oles a pa¨ªses con necesidades. Por ello, varias ONG han organizado campa?as complementarias para concienciar a m¨¢s gente. En Catalu?a, en diciembre del a?o pasado, se inici¨® la campa?a Medicamentos que no curan, organizada por las ONG Farmac¨¦uticos Mundi, Medicus Mundi y Cruz Roja, y que cuenta con el apoyo del Gobierno catal¨¢n. "Hay mucha gente, incluso los farmac¨¦uticos, que desconoce el tema y que sigue pensando que lo que sobra aqu¨ª puede tener alg¨²n tipo de utilidad en alg¨²n otro sitio", explica Susanna Blanch, coordinadora de la campa?a. "Y esto es falso", a?ade.

Pero, ?por qu¨¦ no es bueno enviar los f¨¢rmacos que nos sobran? Principalmente, porque las enfermedades son distintas y porque los profesionales sanitarios de los pa¨ªses en v¨ªas de desarrollo muchas veces no conocen los f¨¢rmacos que reciben. "Las donaciones deben basarse en las necesidades que expresa el pa¨ªs receptor y no en lo que sobra en el donante", precisa Blanch. Tambi¨¦n ocurre que los f¨¢rmacos sobrantes no suelen figurar en la "lista de medicamentos esenciales" de la OMS para estos pa¨ªses. Estos medicamentos suelen ser analg¨¦sicos, antibi¨®ticos de primera l¨ªnea, antimal¨¢ricos y antipar¨¢sitos, f¨¢rmacos que no suelen sobrar en nuestros botiquines. Seg¨²n diversas ONG, entre el 75% y el 95% de los medicamentos que se devuelven a las farmacias para ser donados deben ser eliminados porque no son v¨¢lidos. Adem¨¢s, cerca del 70% son f¨¢rmacos para tratar las enfermedades cr¨®nicas de los ancianos, y en los pa¨ªses del Tercer Mundo la poblaci¨®n juvenil es mucho m¨¢s alta y suele ser la que m¨¢s ayuda necesita.

Javier Zulueta, coordinador de emergencias de Farmac¨¦uticos Mundi, estuvo el pasado febrero en Alhucemas (Marruecos) supervisando un env¨ªo de medicamentos en la zona donde ocurri¨® el terremoto. Zulueta ha vivido el cambio que han experimentado las ONG, ya que hasta hace unos cuatro o cinco a?os todav¨ªa cre¨ªan que las donaciones eran correctas. "Nosotros recog¨ªamos medicamentos en las farmacias y, tras un proceso de separaci¨®n, hac¨ªamos env¨ªos siempre previa petici¨®n", explica. Con el tiempo, sin embargo, la organizaci¨®n se fue dando cuenta de que era mucho m¨¢s seguro, e incluso m¨¢s rentable, acudir a una de las llamadas "centrales de compras" para adquirir los gen¨¦ricos necesarios. "La gente tiene que entender que, si de verdad quiere ayudar, es mejor que d¨¦ dinero y luego nosotros acudimos a esta central", dice Zulueta.

Ejemplos de donaciones incorrectas hay muchas, pero cabe destacar una muy reciente. En el a?o 2002, en plena crisis argentina, el pa¨ªs latinoamericano tuvo que devolver decenas de contenedores llenos de medicamentos porque no estaban en condiciones de entrar en el pa¨ªs. Hab¨ªa muchos f¨¢rmacos caducados de los a?os ochenta y noventa. Zulueta explica que en este caso muchos laboratorios farmac¨¦uticos norteamericanos realizaron env¨ªos masivos con productos que no eran aprovechables.

"Para ellos est¨¢ muy bien, porque as¨ª no tienen que almacenar ni destruir estos productos, e incluso tienen ventajas fiscales si realizan donaciones", explica el coordinador de emergencias de la ONG. En Mozambique se calcula que el 67% de las donaciones recibidas tras las graves inundaciones de 2000 fueron inadecuadas.

Detr¨¢s del debate sobre las donaciones se esconden unas cifras espeluznantes: el 14% de la poblaci¨®n mundial consume el 80% de los medicamentos. Adem¨¢s, los medicamentos que existen para tratar las enfermedades m¨¢s presentes en los pa¨ªses pobres se retiran del mercado porque no resultan rentables para los laboratorios. Un ejemplo: cada a?o mueren dos millones de personas de tuberculosis en el mundo y el ¨²ltimo medicamento para combatir la enfermedad se desarroll¨® hace 30 a?os. Un dato m¨¢s: del total de f¨¢rmacos desarrollados y comercializados por la industria farmac¨¦utica entre 1979 y 1999, s¨®lo el 1% se destin¨® a las enfermedades tropicales.

Por todo ello, los medicamentos que se recogen en las farmacias no tienen como destino el Tercer Mundo. Se destruyen todos. Aunque su implantaci¨®n fue paulatina y empez¨® en 2002, desde diciembre del a?o pasado todas las farmacias espa?olas cuentan con un punto de recogida SIGRE (Sistema Integrado de Gesti¨®n y Recogida de Envases). Estos puntos recogen envases de medicamentos tanto vac¨ªos como con restos, as¨ª como medicamentos caducados. Los envases se reciclan y los medicamentos se destruyen. La iniciativa, impulsada y financiada por la industria farmac¨¦utica, responde a las exigencias de una directiva europea para ofrecer una soluci¨®n medioambiental a los envases y a los restos de medicamentos.