Estrategias contra el terrorismo

Ante los atentados del 11 de marzo, cabe preguntarse si la Estrategia de Seguridad Nacional que tenemos es adecuada para este tipo de terrorismo y qu¨¦ estrategias est¨¢n aplicando otros pa¨ªses contra estas organizaciones terroristas.

La primera ense?anza de todo lo ocurrido es que la Estrategia de Seguridad en vigor hasta el 11 de marzo debe ser revisada, puesto que no ha resultado eficaz.

La segunda ense?anza es que, nos guste o no, estamos en medio de un conflicto con dos bandos, en uno est¨¢n las democracias occidentales y en el otro est¨¢n los grupos terroristas de ideolog¨ªa islamista radical. Los terroristas se sienten en guerra y eso les hace adoptar una posici¨®n de alerta permanente y de b¨²squeda de la sorpresa. Estamos frente a un adversario din¨¢mico, de cultura diferente, lo que le hace m¨¢s imprevisible.

"No nos enfrentamos a un peligro coyuntural, sino a una amenaza permanente"

La tercera ense?anza es que los atentados del 11-M difuminan la l¨ªnea divisoria entre terrorismo interior y terrorismo exterior. Tal vez la mayor diferencia es que el terrorismo exterior se fundamenta en otras culturas y eso lo hace m¨¢s complejo y m¨¢s brutal en sus atentados, pero no hay terrorismos suaves y terrorismos duros, el objetivo de los dos es el mismo: implantar el miedo en la poblaci¨®n y condicionar su pensamiento y sus acciones. Por otro lado, no olvidemos que ETA lleva m¨¢s de 800 asesinados y miles de heridos con graves secuelas.

Las caracter¨ªsticas del terrorismo isl¨¢mico nos lleva a la conclusi¨®n de que contra ¨¦l hay que utilizar todos los medios disponibles del Estado, actuando dentro de nuestra legislaci¨®n y de nuestra cultura. La Estrategia de Seguridad Nacional es ¨²nica, si bien es necesario actuar en diversos campos, como son: el policial, los servicios de inteligencia, el militar, el econ¨®mico, el pol¨ªtico, el legislativo, etc. Todas estas actuaciones implican el dise?o, deben ser coordinadas y orientadas a alcanzar el mismo objetivo, acabar con el terrorismo.

Hasta la finalizaci¨®n de la guerra fr¨ªa, pr¨¢cticamente todos los Estados dispon¨ªan de una Estrategia de Defensa Nacional. La principal caracter¨ªstica de toda estrategia de defensa es que se dise?a para oponerse a una amenaza o incluso a un peligro para los intereses nacionales, pero no se dise?a para actuar sobre un riesgo.

?Cu¨¢l es la diferencia entre riesgo, peligro o amenaza? El riesgo es la mera posibilidad de que un agente hostil, en un futuro m¨¢s o menos pr¨®ximo, pueda atentar contra los intereses nacionales. Cuando ese agente hostil se dota de los medios para poder llevar a cabo su ataque, el riesgo se transforma en un peligro. Al hacer ostentaci¨®n de su fuerza como forma para resolver un conflicto, el peligro se convierte en amenaza, que cuando se lleva a t¨¦rmino produce el da?o. La cadena descrita tiene cuatro eslabones: riesgo, peligro, amenaza y da?o. En los conflictos entre Estados, la escalada que recorre los eslabones es f¨¢cilmente observable. La defensa s¨®lo se establece cuando hay peligro o amenaza.

El terrorismo puede recorrer todos los eslabones de la cadena sin que la escalada sea perceptible. Las estrategias aplicables deben tener en cuenta esta circunstancia. Un buen sistema de informaci¨®n es la clave para detectar a tiempo las acciones terroristas.

La estrategia m¨¢s frecuente es la de disuasi¨®n. Hay dos tipos de disuasi¨®n: basada en la represalia o en la negaci¨®n. La disuasi¨®n por represalia pierde gran parte de su eficacia cuando enfrente hay terroristas dispuestos a suicidarse para llevar a cabo su atentado. ?C¨®mo disuadir a un suicida? Israel lo ha intentado llevando la disuasi¨®n m¨¢s all¨¢ de las leyes internacionales, adoptando represalias contra los bienes y las personas del entorno familiar inmediato del terrorista e incluso lanzando ataques contra dirigentes que implicaban su condena a muerte sin juicio. Esta estrategia no ha dado resultados y ha generado m¨¢s odio entre la poblaci¨®n palestina. ?ltimamente intenta aplicar una estrategia de disuasi¨®n por negaci¨®n. Se trata de convencer a Ham¨¢s de que no puede llevar a cabo sus ataques. Para ello est¨¢ construyendo el muro-verja que, dejando al margen la legalidad de su trazado, trata de impedir las incursiones de terroristas. El modelo seguramente est¨¢ inspirado en Marruecos, que construy¨® tres muros en el desierto del S¨¢hara para impedir las incursiones del Frente Polisario desde Argelia. Esto acab¨® con los ataques del Polisario. En nuestro caso, la estrategia de la disuasi¨®n no podr¨¢ tener esta caracter¨ªstica, sino tal vez la contraria, la de integrar lo m¨¢s posible a la inmigraci¨®n musulmana evitando la creaci¨®n de guetos, que pudieran servir de vivero de nuevos terroristas.

?Cu¨¢l es la estrategia de Estados Unidos? Como consecuencia de los atentados contra las Torres Gemelas, EE UU revis¨® su pol¨ªtica de seguridad y la Casa Blanca dise?¨® una nueva Estrategia de Seguridad Nacional firmada por George Bush el 17 de septiembre de 2002. La podr¨ªamos definir como una estrategia de control de riesgos de ¨¢mbito mundial, que establece una estrategia ¨²nica que implica la creaci¨®n de un superministerio de Seguridad Nacional para coordinar todas sus acciones.

Una consecuencia de la Estrategia de Seguridad Nacional es la aprobaci¨®n en febrero de 2003 de la Estrategia Nacional para Combatir el Terrorismo, donde el Gobierno de EE UU manifiesta la forma de hacer frente a los ataques terroristas contra sus ciudadanos y contra sus aliados, creando un ambiente inhabitable para los terroristas y los que los apoyan en todo el mundo. Para ello han dise?ado la estrategia denominada 4D: Defeat (Derrotar), Deny (Denegar), Diminish (Debilitar) y Defend (Defender), que se basa en los siguientes puntos:

-Los EE UU "derrotar¨¢n" a las organizaciones terroristas de proyecci¨®n global atacando sus santuarios, sus l¨ªderes, sus apoyos y sus finanzas. Esto implica el desencadenamiento de ataques preventivos si fuera necesario. Con ello buscan la dispersi¨®n de los terroristas, su debilitamiento y su aislamiento. -

-Los EE UU "denegar¨¢n", es decir, evitar¨¢n que otros pa¨ªses apoyen o patrocinen a grupos terroristas, para ello ayudar¨¢n a los Estados que tengan buena voluntad contra el terrorismo, tratar¨¢n de convencer a los renuentes y, llegado el caso, actuar¨¢n contra los Estados que, olvidando la Resoluci¨®n de Naciones Unidas n¨²mero 1.373, presten su apoyo al terrorismo.

-Los EE UU "disminuir¨¢n" los problemas internacionales que los terroristas pueden utilizar como pretexto para captar colaboradores y para justificar sus acciones. Sin duda, el mayor problema es el conflicto palestino-israel¨ª.

-Los EE UU "defender¨¢n" a sus ciudadanos y a sus intereses tanto en territorio nacional como en el extranjero, en palabras de Bush: "Am¨¦rica ya no est¨¢ protegida por un vasto oc¨¦ano; s¨®lo estaremos protegidos de un ataque terrorista mediante una vigorosa acci¨®n en el exterior e incrementando la vigilancia en el interior".

Lejos de esta estrategia est¨¢ la de Francia. No tiene un ministerio o servicio ¨²nico encargado de la lucha contra el terrorismo. La estrategia se basa en la movilizaci¨®n de todos los servicios que pueden prevenir y reprimir los actos terroristas. Su principal exponente es el Plan Vigipirate, dise?ado en 1978, siendo presidente Giscard d'Estaing, para prevenir las amenazas o rechazar las acciones terroristas. Este plan activa todos los medios del Estado, incluidos los militares, cuando es necesario. El pasado d¨ªa 11 de marzo, pocas horas despu¨¦s del atentado en Madrid, el primer ministro franc¨¦s, Jean-Pierre Raffarin, decret¨® el nivel naranja del Plan Vigipirate, que implicaba el refuerzo de las fuerzas de seguridad con patrullas militares en estaciones de ferrocarril, trenes de cercan¨ªas, aeropuertos, etc. A ning¨²n franc¨¦s le extra?¨® ver patrullas de dos soldados armados con fusil y acompa?ados por un gendarme, que vigilaban las dependencias del aeropuerto de Orly. En las estaciones de trenes SNCF las medidas de seguridad con los equipajes eran las del nivel rojo, que pr¨¢cticamente obligaban a cada pasajero a tener a mano su equipaje.

El viernes 12 de marzo, Jacques Chirac presidi¨® un consejo restringido en el El¨ªseo con los ministros de Interior, Exteriores, Justicia, Defensa, Infraestructuras y Transporte para asegurar la aplicaci¨®n del Plan Vigipirate.

En Espa?a, la lucha contra el terrorismo est¨¢ b¨¢sicamente encomendada a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, si bien con ocasi¨®n de grandes acontecimientos, como las Olimpiadas de Barcelona o la Expo de Sevilla, tambi¨¦n colaboraron las Fuerzas Armadas.

En febrero de 2003 se aprob¨®, con el consenso de la mayor¨ªa de las fuerzas pol¨ªticas, la Revisi¨®n Estrat¨¦gica de la Defensa, en la que se contempla como riesgo "el terrorismo exterior dirigido contra Occidente" y asigna a nuestras Fuerzas Armadas el cometido de la lucha contra el terrorismo en el ¨¢mbito de la OTAN, de la UE, en las Operaciones de Paz y de Ayuda Humanitaria y por ¨²ltimo contribuir a preservar la seguridad y el bienestar de los ciudadanos mediante el apoyo a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado. Aunque ya se han puesto en funcionamiento algunas de las facetas de esta contribuci¨®n, como es un sistema de toma de decisiones para evaluar la posibilidad de derribo de un avi¨®n que sea un peligro potencial, por ejemplo, por haber sido secuestrado, todav¨ªa quedan muchos aspectos por planificar y desarrollar, especialmente a la luz de las ¨²ltimas experiencias.

Para ganar al terrorismo hay que adelantarse a sus atentados, hay que tomar la iniciativa, que sea el terrorista el que tenga que reaccionar ante nuestras acciones. La lucha contra el terrorismo de ETA llevada a cabo por las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y los servicios de informaci¨®n est¨¢ dando buenos resultados, gracias tambi¨¦n a la colaboraci¨®n internacional y en especial de Francia. Si para combatir el terrorismo de ETA la colaboraci¨®n internacional es esencial, mucho m¨¢s importante es esa colaboraci¨®n para erradicar el terrorismo internacional islamista.

La OTAN y la UE son dos buenos foros donde llevar a cabo esta colaboraci¨®n. La Alianza aprob¨® un documento, el MC-472, en el que se refleja c¨®mo luchar contra el terrorismo. La Uni¨®n Europea, por su estructura pol¨ªtica, econ¨®mica, judicial y de seguridad, es una organizaci¨®n muy adecuada para la colaboraci¨®n internacional en la lucha contra el terrorismo.

No nos enfrentamos a un peligro coyuntural. Estamos ante una amenaza permanente, que requiere un plan integral que contemple la utilizaci¨®n de todos los medios del Estado de derecho.

Miguel ?ngel Ballesteros es coronel jefe del Departamento de Estrategia de la Escuela Superior de las FAS.