La crisis fuerza a Alstom a poner en venta su f¨¢brica de trenes de Valencia

El grupo franc¨¦s Alstom cuenta desde ayer con la seguridad de una importante ayuda directa del Estado franc¨¦s, que podr¨¢ tomar hasta el 31,5% de su capital durante cuatro a?os. El propio ministro de Econom¨ªa, Nicolas Sarkozy, negociaba anoche con representantes de un consorcio bancario para que cubran el resto de una ampliaci¨®n de fondos propios, prevista entre 1.800 y 2.500 millones de euros. La salvaci¨®n de Alstom se ha pactado con la Comisi¨®n Europea a costa de suprimir 8.500 empleos y vender activos que representan cerca del 10% de su per¨ªmetro, entre ellos la f¨¢brica de locomotoras de Albuixec (Valencia), de la que dependen 400 empleos directos.

Se trata de una de las condiciones incluidas en un paquete de desinversi¨®n valorado entre 1.500 y 1.600 millones exigido por Bruselas como contrapartida para aceptar el plan de reflotamiento de la firma de ingenier¨ªa patrocinado por Par¨ªs. "Estoy muy satisfecho del acuerdo a que hemos llegado", se?al¨® el comisario europeo de la Competencia, Mario Monti, informa Ricardo M. de Rituerto. Alstom ha preferido sacrificar actividades de transporte en Australia y Nueva Zelanda, las calderas industriales producidas por Power Environnement y la f¨¢brica de Valencia.

Esta ¨²ltima es una empresa rentable, con una cifra de negocio de 100 millones. Sin embargo, Alstom se ha quedado fuera de los ¨²ltimos grandes contratos del plan espa?ol de alta velocidad, en que Siemens y Talgo se han llevado la parte del le¨®n.

Otro aspecto del proyecto pactado con Bruselas es el compromiso de llegar a acuerdos con "uno o dos socios industriales". Patrick Kron, presidente de Alstom, se limita a descartar al alem¨¢n Siemens, su rival hist¨®rico en la fabricaci¨®n de material ferroviario y de centrales de energ¨ªa. "Siemens no interesa a nuestros clientes, ni a nuestros empleados, ni a nuestros accionistas", martille¨® ayer el principal ejecutivo de Alstom, negando toda posibilidad de "desmantelamiento o boda forzada" de su grupo.

Lo fundamental consiste en la ayuda masiva del Estado franc¨¦s, que se convertir¨¢ en el principal accionista de Alstom durante un m¨¢ximo de cuatro a?os. Culmina as¨ª una negociaci¨®n en la que se ha implicado mucho el actual ministro franc¨¦s de Econom¨ªa, que por segunda vez interviene de forma decisiva en una operaci¨®n industrial: la anterior fue la fusi¨®n farmac¨¦utica entre Aventis y Sanofi-Synth¨¦labo, pactada hace un mes.

La negociaci¨®n con Bruselas permite a Francia convertir en acciones varios pr¨¦stamos o garant¨ªas bancarias avaladas a Alstom por el Estado, adem¨¢s de inyectar capital p¨²blico directo, todo ello en el l¨ªmite del 31,5% de capital p¨²blico total pactado con Bruselas. Tambi¨¦n se negocia una nueva l¨ªnea de cr¨¦dito de 8.000 millones destinada a financiar las necesidades de funcionamiento del grupo en dos a?os. Alstom se encuentra atrapado por un endeudamiento que duplica largamente el monto de sus fondos propios, aunque la deuda ha bajado a 3.000 millones (hace un a?o era de 4.900 millones) gracias, seg¨²n el grupo, a los activos ya cedidos o comprometidos.

Ca¨ªda del 8,4% en Bolsa

El plan de rescate fue anunciado al mismo tiempo que unos resultados catastr¨®ficos del ¨²ltimo ejercicio, cerrado al 31 de marzo: las p¨¦rdidas alcanzaron la cifra de 1.840 millones, un 28,2% peor que en el ejercicio precedente. La acci¨®n de Alstom cay¨® ayer un 8,47% en la Bolsa de Par¨ªs.

El comisario Mario Monti habl¨® despu¨¦s de que se hicieran p¨²blicos en Francia los t¨¦rminos del pacto alcanzado con la Comisi¨®n, que sigue muy de cerca las exigencias impuestas por Bruselas. El ¨²nico punto de aparente desacuerdo manifestado ayer se produjo ante la negativa de Alstom de establecer v¨ªnculos con Siemens.

A la pregunta de si la actuaci¨®n de Bruselas no era dirigismo puro, Monti respondi¨® que "la Comisi¨®n no puede ni debe incurrir en pol¨ªticas dirigistas, sino mantener la competencia en el mercado".