El regalito
Ha querido el destino que la esperada visita del Ministro de Administraciones P¨²blicas, Jordi Sevilla a Andaluc¨ªa coincida en el tiempo con la finalizaci¨®n, esta semana, de las reuniones t¨¦cnicas entre administraci¨®n central y auton¨®mica para el pago de los algo m¨¢s de 2.500 millones de euros correspondientes a la liquidaci¨®n pendiente del anterior sistema de financiaci¨®n auton¨®mica (1997-2001). Pura coincidencia u oportunismo como piensa la oposici¨®n que teme el uso electoral y partidista que pueda hacer el PSOE de este asunto al coincidir su resoluci¨®n con la campa?a de las elecciones europeas. Y esa lluvia de millones, ese regalito, que no es otra cosa que recuperar algo que Madrid hab¨ªa hurtado a Andaluc¨ªa, se va a oficializar, adem¨¢s, con la presencia en Sevilla del presidente del Gobierno, Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero. Viene a participar en un mitin junto con el candidato, Jos¨¦ Borrell y Luis Y¨¢?ez y qu¨¦ mejor ocasi¨®n que ¨¦sta, pensar¨¢n los socialistas, para que Zapatero anuncie el pago definitivo de esta deuda, meses despu¨¦s tan s¨®lo, de que en otro acto pol¨ªtico, esta vez en la localidad sevillana de Dos Hermanas, se comprometiera ante los andaluces a liquidar este contencioso nada m¨¢s llegar a La Moncloa.
Est¨¢ claro que la ocasi¨®n se presenta m¨¢s que id¨®nea para el lucimiento dado que, incluso, en esa cita con el ministro se dar¨¢ luz verde a un paquete importante de transferencias. A pesar de ello, no todo va a ser un camino de rosas. Hay, tambi¨¦n, espinas y bien punzantes, tal y como sucede con el futuro de la construcci¨®n naval. Ser¨¢ ¨¦sta la semana de los contactos del presidente de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI), Enr¨ªquez Mart¨ªnez Robles, con las comunidades afectadas por el futuro que aguarda a los astilleros p¨²blicos Izar, siendo Andaluc¨ªa una de las m¨¢s implicadas con factor¨ªas en la Bah¨ªa de C¨¢diz y Sevilla. El objetivo de estos encuentros es analizar el impacto que tendr¨¢ en los astilleros la obligaci¨®n de devolver las ayudas p¨²blicas recibidas por importe de 308 millones de euros y que la Comisi¨®n Europea considera ilegales. Y lo peor es que en el horizonte aguardan otros expedientes sancionadores similares.
Desde Andaluc¨ªa el criterio a seguir pasa por apostar por la continuidad de esta actividad industrial pero por todos es conocida la dificultad que entra?a mantener este planteamiento sin que haya reducci¨®n de puestos de trabajo. Se avecinan, por tanto, tiempos duros y les tocar¨¢ a los socialistas apechugar con el mal trago que supone siempre afrontar una reconversi¨®n que otros no fueron capaces de acometer. Pero en medio de tanta adversidad se destaca, en cambio, lo que se espera se confirme de manera inmediata en estos d¨ªas, como es la adjudicaci¨®n a la empresa Santana Motor, de Linares, del contrato para dotar a las Fuerzas Armadas del veh¨ªculo todo terreno que demandan. Constituir¨ªa el definitivo respaldo para la consolidaci¨®n de esta industria y para el lanzamiento de su modelo An¨ªbal en el que est¨¢n depositadas todas las esperanzas de supervivencia de la factor¨ªa linarense. El mismo ministro de Defensa, Jos¨¦ Bono, no disimula ya que la decisi¨®n est¨¢ tomada a favor de Andaluc¨ªa en una medida que f¨¢cilmente podr¨ªa interpretarse como todo un gesto del Gobierno para compensar en parte la servidumbre militar que soporta Andaluc¨ªa.
Con todo, lo que ocurra con los astilleros ser¨¢ el banco de prueba para determinar el grado de domesticaci¨®n que puedan tener los sindicatos hacia el poder instituido. Durante a?os estas organizaciones fueron conscientes del riesgo que entra?aba la inyecci¨®n de dinero p¨²blico en Izar, tal y como lo hizo el anterior gobierno del PP, pero no hicieron nada para denunciarlo. S¨®lo al final, con una cartera de pedidos a cero y, fundamentalmente, y porque no ten¨ªan su convenio colectivo actualizado, se echaron a la calle. Y dentro de muy poco lo har¨¢n, de nuevo, una vez comience el baile de la supresi¨®n de empleos. Eso seguro. Su apaciguamiento no llega, de ning¨²n modo, a lo que hizo otra entidad, en este caso agraria, que hasta encabez¨® un homenaje a la bestia negra del campo andaluz, Franz Fishler, y a la entonces ministra del ramo, Loyola de Palacio con la que celebraban alegres comidas camperas. Eso s¨ª que eran tiempos felices y no los de ahora.
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