Maljkovic ficha por el Madrid y pide "legionarios"

Gustar¨¢ m¨¢s o menos, pero Bozidar Maljkovic (Otacec, Serbia, 1952), es uno de los entrenadores m¨¢s victoriosos, locuaces y exigentes del baloncesto europeo. Hastiado por los a?os de vacas flacas -una Liga, la de 2000 con Sergio Scariolo, en los ¨²ltimos diez a?os- y del desfile de t¨¦cnicos (Scariolo, Imbroda, Lamas) incapaces de impregnar a sus jugadores del esplendor y la ambici¨®n de ¨¦pocas ya pret¨¦ritas, el Madrid apost¨® fuerte ayer con la contrataci¨®n de Maljkovic. La seriedad de Boza aumenta la sensaci¨®n de entrenador duro que desprende. Le encanta marcar la l¨ªnea, infundir respeto y hasta sembrar pavor entre jugadores, directivos o periodistas. En su primera comparecencia como entrenador del Madrid ofreci¨® el titular en bandeja. "Quiero poner en orden este club", sentenci¨®. "S¨¦ lo que necesita, s¨¦ donde he venido y la historia y riqueza de este club. Quiero gente implicada y un equipo de legionarios".

Le gusta a Maljkovic exagerar su estereotipo. Disc¨ªpulo de los maestros de la escuela de magn¨ªficos entrenadores yugoslavos, Aza Nikolic y Ranko Zeravica, Maljkovic fue el art¨ªfice del mejor equipo de baloncesto europeo de los ¨²ltimos 20 a?os, el Jugosplastika de Split. Con magn¨ªficos jugadores como Kukoc, Radja, Ivanovic, Perasovic o Savic organiz¨® un equipo imparable, con un juego de ataque como pocas veces se ha visto. Con ¨¦l conquist¨® dos Copas de Europa, tres Ligas y tres Copas de Yugoslavia. Fich¨® por el Barcelona en 1990. Gan¨® una Copa pero fue una etapa traum¨¢tica para ¨¦l. Acab¨® siendo despedido a causa de sus diferencias con el entonces director general A¨ªto Garc¨ªa Reneses. Pero demostr¨® su categor¨ªa en las filas del Limoges. Con el modesto equipo franc¨¦s concibi¨® un juego defensivo de tal calibre que le permiti¨® alcanzar la Copa de Europa. No fue la ¨²ltima. Fich¨® por el Panathinaikos y pas¨® una nueva prueba: superar la presi¨®n del entonces multimillonario equipo ateniense y ganar otro cetro continental en una final de infausto recuerdo para el Bar?a. Tras un fugaz paso por Par¨ªs, aterriz¨® en M¨¢laga. Con el Unicaja conquist¨® la Copa Korac en 2001. Sus detractores le reprochan que, despu¨¦s de cuatro a?os y de haber fichado a m¨¢s de 30 jugadores, dejara una herencia de dif¨ªcil administraci¨®n. Ahora, en el Madrid, deber¨¢ responder a las exigencias del responsable de la secci¨®n, Lolo Sainz. "No tengo miedo", afirm¨® Boza. "No lo ten¨ªa cuando el Bar?a me pidi¨® que ganara la Copa de Europa, ni cuando en Limoges tuve que organizar el club. Sabemos c¨®mo se trabaja y por d¨®nde va el baloncesto moderno. Poca gente ha ganado tanto como Lolo y yo".