Fidel Castro condecora al "compa?ero Antonio Gades"

El "compa?ero" Antonio Gades fue distinguido el s¨¢bado por Fidel Castro con la m¨¢xima condecoraci¨®n que concede el Consejo de Estado de la Rep¨²blica de Cuba, la Orden Jos¨¦ Mart¨ª, en reconocimiento a los aportes del bailar¨ªn a la cultura universal y por su "amistad y fidelidad inquebrantables hacia el pueblo y la revoluci¨®n cubana". En una ceremonia solemne pero familiar, rodeado de sus amigos cubanos m¨¢s ¨ªntimos, entre ellos el ministro de las Fuerzas Armadas, Ra¨²l Castro, y el del Interior, Abelardo Colom¨¦, Gades se declar¨® emocionado por los honores recibidos y manifest¨® que siempre ha sido y ser¨¢ un soldado de la causa cubana. "Querido comandante en jefe y querido ministro, nunca me sent¨ª un artista sino un simple miliciano vestido de verde olivo, con un fusil en la mano, para siempre estar a sus ¨®rdenes", dijo el bailar¨ªn y core¨®grafo en el tono racial y directo que le caracteriza. Antes, el ministro cubano de Relaciones Exteriores, Felipe P¨¦rez Roque, elogi¨® su trayectoria art¨ªstica y sus aportes a la danza universal, y se?al¨® que la orden impuesta era sobre todo "el reconocimiento al irreductible comunista, al revolucionario que no ha perdido nunca la ilusi¨®n de un mundo mejor y no ha dejado de luchar por ¨¦l". En sus palabras introductorias, P¨¦rez Roque revel¨® algo que pocos sabr¨¢n: que Gades es desde hace a?os militante del Partido Comunista de Cuba, "uno de sus militantes de filas que prestigia a nuestro partido, como una vez lo hiciera el Che Guevara". Record¨® el canciller c¨®mo en los a?os duros de la crisis, cuando nadie apostaba un centavo por el socialismo cubano, el bailar¨ªn realiz¨® una gira solidaria por la isla llevando su espect¨¢culo Fuenteovejuna. "Nuestro respeto al hombre que cuando parec¨ªa que la revoluci¨®n cubana no pod¨ªa sortear los peligros enormes que se levantaban ante ella, estuvo dispuesto a poner junto a nosotros no s¨®lo sus ahorros, no s¨®lo su disposici¨®n de hablar y defender a Cuba en cada tribuna en que le fue posible, sino incluso su propia vida". El "compa?ero Antonio Gades", como es conocido en la isla, respondi¨® a Roque: "Soy yo el que tiene que dar las gracias a vuestra revoluci¨®n, que sab¨¦is que es la m¨ªa. La revoluci¨®n me ha confirmado que mis ideales revolucionarios no eran equivocados ni obedec¨ªan a una epidemia de juvenil romanticismo, como algunos pretend¨ªan hacerme creer". Gades, de 68 a?os y gravemente enfermo de c¨¢ncer, realiz¨® el invierno pasado su particular homenaje a la revoluci¨®n cubana viajando a la isla desde Altea en su velero Luar 040, en una traves¨ªa que dur¨® 50 d¨ªas y que termin¨® en el Castillo del Morro de La Habana. All¨ª, como el pasado s¨¢bado ante Fidel y Ra¨²l Castro, qued¨® claro que quien trate de comprender a Gades el bailar¨ªn sin entender al hombre comunista, habr¨¢ errado. "La vida para todos viene y va, lo que queda despu¨¦s es la obra, lo que queda es la satisfacci¨®n de no haber traicionado, de no haberse corrompido, de haber sido consecuente hasta el ¨²ltimo d¨ªa", dijo Roque al hacer el elogio de su amigo y compa?ero de partido.-