Eficacia y capacidad de adaptaci¨®n

La aprobaci¨®n por los ciudadanos y ciudadanas espa?oles de la Constituci¨®n de 1978, marc¨® un punto de inflexi¨®n en la historia de Espa?a. El reconocimiento expl¨ªcito del Estado de las Autonom¨ªas abr¨ªa nuevas v¨ªas pol¨ªticas e institucionales hacia una nueva vertebraci¨®n territorial, que en el caso de Andaluc¨ªa, se ver¨ªa respaldada con la aprobaci¨®n de su Estatuto de Autonom¨ªa.

En este naciente marco de libertades, la UGT, sensible al deseo de los trabajadores y trabajadoras, decide vertebrarse territorialmente siguiendo el modelo de la Espa?a de las Autonom¨ªas y es en la primera quincena del mes de enero de 1980, antes incluso, y quiz¨¢s como anticipo, de la fecha hist¨®rica del 28 de febrero, que nuestro sindicato celebra el Congreso Constituyente de la Uni¨®n General de Trabajadores de Andaluc¨ªa donde se reivindica, de manera clara y concluyente, la autonom¨ªa para Andaluc¨ªa. Una autonom¨ªa que, a juicio de UGT-Andaluc¨ªa, deb¨ªa iniciar una andadura llena de retos y esperanzas y que deber¨ªa traducirse en la elevaci¨®n de los niveles de vida y bienestar de la ciudadan¨ªa andaluza.

Hoy d¨ªa, tras m¨¢s de veinte a?os de desarrollo auton¨®mico, estamos convencidos que nuestro Estatuto y su desarrollo normativo han jugado un importante papel en el desarrollo econ¨®mico de nuestro territorio, en el crecimiento de los niveles de empleo, en las mejoras de las condiciones de vida y de trabajo y en la consecuci¨®n de mayores cotas de bienestar social.

Y es precisamente bajo esta consideraci¨®n de columna vertebral, sobre la que se sustenta el desarrollo social, econ¨®mico, pol¨ªtico o cultural de la sociedad andaluza, que se propone su reforma. Una reforma que, manteniendo los principios y la esencia del marco estatutario, permita adaptarnos a los cambios cualitativos que en este cuarto de siglo se han venido produciendo, tanto en Andaluc¨ªa como en el exterior.

Fen¨®menos como la globalizaci¨®n o la mundializaci¨®n de los mercados, la revoluci¨®n de las nuevas tecnolog¨ªas de la informaci¨®n y comunicaci¨®n, la importante incorporaci¨®n de la mujer al mercado de trabajo o la propia inmigraci¨®n son cuestiones que pueden y deben tener su reflejo en el nuevo texto estatutario, de manera que se garantice su eficacia y capacidad de adaptaci¨®n ante esta nueva realidad en que se circunscribe.

Por todo ello, desde UGT-Andaluc¨ªa creemos que la reforma del Estatuto de Autonom¨ªa debe situarse en el centro del debate pol¨ªtico y social de nuestra Comunidad Aut¨®noma en esta VII Legislatura, evitando la confrontaci¨®n y tratando de que el resultado final sea fruto del consenso y la defensa de los intereses generales de Andaluc¨ªa.

En este sentido, nuestro sindicato considera que para acometer la reforma es totalmente necesaria la participaci¨®n de todos los agentes implicados y, especialmente, de los trabajadores y trabajadoras como eje principal de nuestro sistema social y productivo. El mundo del trabajo y sus organizaciones representativas deben tener un protagonismo decidido y eficaz en esta reforma. Un protagonismo que debe traducirse en posicionamientos y propuestas y que, para la UGT de Andaluc¨ªa, debe incorporar, entre otras, las siguientes cuestiones:

"Desarrollo de mecanismos de participaci¨®n que garanticen y consoliden la intervenci¨®n de los sindicatos m¨¢s representativos en el dise?o de pol¨ªticas sociales y laborales".

"Incorporaci¨®n expresa de la protecci¨®n y garant¨ªas de los nuevos derechos sociales y pol¨ªticos, tambi¨¦n llamados derechos fundamentales de tercera generaci¨®n".

"Establecimiento de mecanismos que garanticen la plena integraci¨®n de la poblaci¨®n inmigrante existente en Andaluc¨ªa".

"Implementar los mecanismos de cohesi¨®n social intergeneracional e intraterritorial bajo los principios de igualdad, solidaridad y justicia social".

"Hacer de la convergencia real -en t¨¦rminos de empleo, nivel de vida, bienestar e igualdad- objetivo preferente sobre el que se sustente la acci¨®n de los poderes p¨²blicos en Andaluc¨ªa.

Para los trabajadores de Andaluc¨ªa, y para los ugetistas en particular, este nuevo proceso que se abre en nuestra Comunidad Aut¨®noma debe materializarse en la definici¨®n de un modelo estable y adaptado a los nuevos tiempos, con un eje de desarrollo fundamental: la mejora de la sociedad andaluza.

Se trata, en definitiva, de impulsar el desarrollo auton¨®mico andaluz y hacer del nuevo Estatuto el pilar sobre el que se sustente una Andaluc¨ªa cohesionada, equilibrada y capacitada para resolver eficazmente los retos futuros. Por eso estamos.

Manuel Pastrana Casado es secretario general de UGT Andaluc¨ªa