Holanda escapa a su maldici¨®n

Negada hist¨®ricamente desde el punto de penalti, escenario en el que hab¨ªa perecido en los tres ¨²ltimos Europeos y el Mundial de Francia, Holanda se afirm¨® ayer en el Algarve desde la rueda de los 11 metros con un disparo de Robben, s¨ªmbolo de la nueva generaci¨®n. A la quinta, cambi¨® su suerte, para desdicha de Suecia, que mat¨® un partido que pintaba muy fecundo y acab¨® est¨¦ril. No hubo un solo gol y ni tres palos en la pr¨®rroga evitaron el mal trago de tener que afrontar la tanda de los penaltis.

Del resultado se desprende que cuando dos equipos con muy buenos delanteros se enfrentan, como ayer, no necesariamente los goles est¨¢n garantizados, y menos cuando el torneo entra en la fase final y los errores se penalizan con la eliminaci¨®n. Suecia es una experta en descarnar los encuentros y someter al contrario. Intenta gobernar la contienda a partir de la intimidaci¨®n y la resuelve por la pegada de sus delanteros. Holanda no escap¨® al yugo sueco. Le gusta seducir y vencer por convicci¨®n o, si no, es capaz de renunciar al marcador. Anoche, sin embargo, no se dio el caso. El equipo de Advocaat aguant¨® el pulso f¨ªsico del contrario y se dio una panzada de correr.

A Holanda se la ve¨ªa inc¨®moda. Le costaba airear el partido, encontrar la l¨ªnea de pase, imponer el ritmo que demanda su l¨ªnea de ataque. Pese a que el equipo de Advocaat se ha afinado con el transcurrir del torneo, le faltaba un punto de velocidad, m¨¢s din¨¢mica en el juego, para desbordar a Suecia, muy blindada en su cancha y dura en la ajena. Ibrahimovic es un roble cuando se trata de descargar la pelota en pugna con los centrales y Larsson se mueve con especial buen gusto por el ¨¢rea porque es tan capaz de tocar de primera como de rematar con sa?a.

Suecia se apoy¨® en sus dos delanteros para sacarse de encima a Holanda, y sobre la contundencia de ambos puede dar fe De Boer, que a la media hora ya estaba en la caseta lesionado. El partido se disputaba en las condiciones que quer¨ªan los suecos y a los holandeses no les quedaba otro remedio que rematar m¨¢s que llegar a la porter¨ªa. Holanda no encontraba un metro para combinar mientras Suecia respond¨ªa a la carrera: paraba en su campo y, a la que ten¨ªa la pelota, sal¨ªa r¨¢pida en busca de la porter¨ªa si el terreno estaba despejado o, en caso contrario, cargaban el juego largo para Ibrahimovic o Larsson.

A falta de f¨²tbol, se impon¨ªa la paciencia en Holanda y la perseverancia en Suecia. Presa de la monoton¨ªa, el partido quedaba a expensas de los detalles y, en especial, de la capacidad de los delanteros para resolver en las condiciones m¨¢s extremas. Van Nistelrooy tom¨® entonces ventaja respecto a Ibrahimovic y Larsson. El ariete del Manchester United se person¨® con un par de escorzos preciosos ante el portero sueco que animaron a la hinchada holandesa, atrapada por la somnolencia del encuentro. A Holanda le interesaba mover el partido, vitalista como es en su f¨²tbol, mientras que a Suecia le conven¨ªa lo contrario.

En respuesta seguramente a Van Nistelrooy, Ibrahimovic insist¨ªa en poner nervioso a Stam para garantizar la presencia sueca en cancha contraria. Tuvo suerte el central de que Cocu le corrigiera constantemente porque el delantero del Ajax pareci¨® dispuesto a decidir a su favor el duelo de goleadores. Los dos arietes, uno en cada ¨¢rea, agitaron el partido despu¨¦s de que se aflojaran las l¨ªneas de contenci¨®n de uno y otro equipo. Pesan los partidos y no hay futbolista que aguante el desgaste que generan encuentros tensos como el de anoche en el Algarve.

Ocurri¨®, sin embargo, que las defensas espabilaron y el partido volvi¨® a quedar anudado hasta la pr¨®rroga. Ninguno de los remates encontr¨® porter¨ªa y no hubo futbolista capaz de meter un pase interior en el ¨¢rea. Para nada cambi¨® el signo del encuentro en el tiempo a?adido, pese a tres remates al palo, uno de Robben, otro de Larsson y un tercero de Ljunberg. Aguardaba la irremediable tanda de penaltis, un escenario que ni pintado para la frialdad sueca. Anoche, sin embargo, cambiaron las tornas: a Suecia se le escap¨® la clasificaci¨®n en la pr¨®rroga y Holanda salio por fin vencedora del punto de penalti.