Barcelona regular¨¢ el comercio en Ciutat Vella para evitar guetos y apoyar las tiendas de barrio

El Ayuntamiento de Barcelona planea aprobar una norma especial para el comercio en algunas zonas de Ciutat Vella. El objetivo de esta medida, que se quiere pactar con los comerciantes, es evitar que en algunas zonas acaben desapareciendo las tiendas de barrio, que se creen guetos comerciales en el distrito con m¨¢s inmigraci¨®n de la ciudad y que no falten comercios especializados. El Ayuntamiento descarta la v¨ªa de las prohibiciones y deber¨¢ hacer encaje de bolillos para respetar la iniciativa privada y lograr que en el distrito se mantenga el equilibrio comercial que persigue.

El concejal Carles Mart¨ª, responsable de Ciutat Vella, quiere sacar adelante un plan que regule el comercio en el distrito. Pero descarta hacerlo exigiendo unas distancias m¨ªnimas entre comercios, al estilo de lo que ocurr¨ªa anta?o con las normas para las farmacias y los estancos. Su objetivo es hacer primero una planificaci¨®n comercial de todo el distrito. Luego vendr¨¢n las medidas para lograr el equilibrio comercial perseguido. El distrito engloba los barrios de Raval, G¨°tic, la Ribera y la Barceloneta.

"Estamos a tiempo de actuar porque todav¨ªa no hay ning¨²n barrio entero donde haya un gueto comercial ni se haya perdido el equilibrio entre tiendas de barrio y de ciudad", se?ala Mart¨ª. La "ordenaci¨®n comercial" que estudia el Ayuntamiento "no se har¨¢ por calles, sino por barrios", agrega el concejal. Las medidas finales est¨¢n por decidir, aunque Mart¨ª avanza que no se quiere actuar por la v¨ªa de la prohibici¨®n directa, sino potenciando zonas para que se mantenga el equilibrio entre las grandes tiendas y los comercios de barrio.

Aunque el peque?o comercio ha perdido terreno en algunas zonas del distrito, el Ayuntamiento asegura que no har¨¢ una regulaci¨®n para defender s¨®lo a las peque?as tiendas. "Lo que pretendemos es que haya un equilibrio entre el comercio especializado de ciudad, al que acude gente de otras zonas de Barcelona y de fuera, y la cl¨¢sica tienda de proximidad o de barrio, que a veces est¨¢ desapareciendo", dice Mart¨ª.

Tiendas cl¨®nicas

Ciutat Vella es el n¨²cleo comercial m¨¢s din¨¢mico de Barcelona. Existen 4.137 licencias, el n¨²mero m¨¢s alto de la ciudad tras el Eixample. Y tambi¨¦n donde m¨¢s han crecido las licencias, con un alza del 3,7% en cinco a?os, seg¨²n el Ayuntamiento.

En Ciutat Vella, 31.000 de sus 100.00 habitantes son inmigrantes llegados en pocos a?os. En algunas calles del distrito, pocas a¨²n, se empieza a producir una situaci¨®n cercana al gueto comercial por la proliferaci¨®n de negocios que a menudo son copias unos de otros.

En las calles de Sant Pau, Rambla del Raval y Hospital los comercios de inmigrantes ya rondan entre el 60% y el 70% del total, seg¨²n la Fundaci¨®n Tot Raval, que agrupa a comerciantes y entidades c¨ªvicas del barrio. Hay lugares donde los locutorios, las tiendas de ultramarinos y las peluquer¨ªas se han instalado unas junto a otras. Y no pasa un mes sin que se abra un nuevo local de las mismas caracter¨ªsticas que los anteriores. "Los ciudadanos inmigrantes tienen todo el derecho a instalar sus negocios. Lo que puede llegar a preocupar no es eso, sino que todos sean iguales", sostiene Mart¨ª. El Ayuntamiento no dar¨¢ un paso sin el respaldo de los comerciantes y ha empezado a consultarles. El objetivo es tener aprobadas las medidas antes de final de a?o.

El Ayuntamiento considera que un ejemplo positivo de concentraci¨®n comercial se da en el eje inform¨¢tico de la ronda de Sant Antoni y sus aleda?os. "Aqu¨ª no hay problema porque en las calles interiores de la zona se mantiene el comercio cl¨¢sico del barrio", explica Mart¨ª.

Otro ejemplo, aunque distinto, es el Portal de l'?ngel, donde las tiendas de marca y las grandes cadenas hace tiempo que desplazaron al comercio tradicional. El cambio en esta calle no agrada demasiado a los responsables municipales, pero afirman que la situaci¨®n se equilibra en las calles adyacentes, como la calle de Comtal, donde proliferan las peque?as tiendas.

El segundo teniente de alcalde y concejal de Comercio, Jordi Portabella, tambi¨¦n defiende la intervenci¨®n municipal "sin aplicar prohibiciones ni exigir permisos espec¨ªficos. Ciutat Vella es un caso aparte en la ciudad porque hay una variedad comercial que permite encontrarlo todo. Hay que preservar que eso siga siendo as¨ª. Lo importante es que no se rompa el equilibrio entre las tiendas de proximidad que usan los vecinos y los comercios de ciudad que atraen a gente de otros lugares", dice Portabella.