Miss Morgan
Ante un estreno de Lina Morgan, el comentarista tiene dos opciones. La primera: sacar la sierra mec¨¢nica y, cual protagonista de La matanza de Texas, proceder a una escabechina y titular su art¨ªculo Yo que t¨² no lo har¨ªa, Morgan. La segunda: incluir a Morgan en el firmamento de lo freak, con el paternalismo esnob de quienes reconvierten los traumas en nostalgia y el Telefunken y el gustirrin¨ªn de Filomatic en iconos de un culto chiripitifl¨¢utico.
Por eso procurar¨¦ hablar del estreno de ?Se puede? (TVE-1, s¨¢bados) como si, reci¨¦n llegado al planeta televisivo, no supiera que se trata de la misma persona que, en los ¨²ltimos a?os, ha protagonizado un enorme ¨¦xito, Hotel Royal Manzanares, y un relativo fiasco, Academia de baile Gloria. ?Se puede? es distinto a sus precedentes, y en lugar de recurrir a un tono coral de vodevil ib¨¦rico se decanta por una sucesi¨®n de gags, cuatro por cap¨ªtulo, sin relaci¨®n entre s¨ª. Los apellidos de algunos guionistas suenan: Ozores y De Armi?¨¢n.
Si nos ce?imos a lo que sale en pantalla, no existen motivos para el entusiasmo pero tampoco para la depresi¨®n. La misma Morgan ha definido su serie como "digna", el eufemismo que suele usarse cuando no se tienen ganas ni de elogiar ni de destruir y que, en este caso, responde a una realidad objetiva. En la introducci¨®n, la actriz dijo que apostaba por la risa sana y un estilo sencillo, limpio y divertido, y algunos echamos de menos la posibilidad de ver una serie de humor de risa malsana, sucia, compleja y aburrida escrita por, pongamos, Grace Morales.
?El argumento? No lo hay: se suceden escenas de humor populista, la exhibici¨®n de verborrea coloquial, una situaci¨®n absurda con una Morgan miope recibiendo la visita de un extraterrestre interpretado por el sin par Pepe Carabias y, finalmente, un mon¨®logo escrito por Jaime de Armi?¨¢n, Miss Wilma, que parece la cr¨®nica de la situaci¨®n que est¨¢ viviendo Lina Morgan. En su mon¨®logo, una domadora de loros amenazada por la reconversi¨®n del circo en el que trabaja lamenta que, tras veinticinco a?os de ¨¦xitos y dedicaci¨®n, la echen a la calle con modales s¨®lo comparables a los que Antena 3 utiliz¨® con Rosa Mar¨ªa Mateos.
Parece una carta de la domadora Morgan al circo TVE, y al interpretarla la actriz demostr¨® saber hacer bastantes m¨¢s cosas que muecas de ni?o repelente y aquel ya m¨ªtico movimiento de piernas estr¨¢bicas. Ya s¨¦ que, buscando la simpat¨ªa del sector destroyer, deber¨ªa echar mano del concepto casposo, pero me temo que se trata de un adjetivo m¨¢s casposo que cualquier cosa casposa que pretenda describir. Mientras dur¨® la serie tuve la sensaci¨®n de que en algo hab¨ªamos salido ganando: ?Se puede? es infinitamente mejor que Noche de fiesta.
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