Un mundo tolerante

Pretender un mundo m¨¢s tolerante y donde reine una mayor libertad multicultural, como destaca en su ¨²ltimo informe anual el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), quiz¨¢s suene a una obviedad llena de buenas intenciones. Pero se parte de una realidad: 900 millones de personas, la s¨¦ptima parte de la poblaci¨®n mundial, sufre discriminaci¨®n ¨¦tnica, racial o religiosa. Por ello es muy oportuno que la ONU haga un llamamiento a favor de la tolerancia y del multiculturalismo como instrumentos de paz y de igualdad social, ahora que abundan las voces fatalistas de quienes creen que el presente siglo ser¨¢ escenario de un brutal choque de civilizaciones. Se ensanchan las desigualdades econ¨®micas entre el Primer y Tercer Mundo, al tiempo que se agudizan la violencia y el fanatismo debido a la brecha entre ricos y pobres. No reconocer esas realidades y cruzarse de brazos es jugar con fuego, advierten los expertos de Naciones Unidas.

Seg¨²n la ONU, la libertad cultural es una "necesidad vital" para el desarrollo humano, tan importante como la democracia y las oportunidades econ¨®micas. La diversidad cultural no pone en peligro la unidad de un pa¨ªs, al contrario, la engrandece. Guste o no, el Primer Mundo debe acomodarse a escenarios radicalmente nuevos, sobre todo con el fen¨®meno de la inmigraci¨®n. En la UE el flujo de personas procedentes de Asia, ?frica y Am¨¦rica ha crecido un 75% en los ¨²ltimos 25 a?os y en EE UU un 145%. Propiciar la marginaci¨®n de esos nuevos ciudadanos s¨®lo conduce a fen¨®menos de extremismo. ?ste es uno de los grandes retos que tiene que afrontar la nueva Europa ampliada. Naciones Unidas recomienda la cohabitaci¨®n entre los diversos grupos sociales, as¨ª como la aceptaci¨®n y el respeto de h¨¢bitos religiosos diferentes. Pero confiesa no tener un juicio sobre el velo isl¨¢mico en las escuelas occidentales, lo cual es decepcionante.

El PNUD hace este a?o una menci¨®n elogiosa al r¨¦gimen auton¨®mico espa?ol como modelo de tratamiento de la libertad cultural. Sin embargo, Espa?a baja un puesto en el ¨ªndice de desarrollo humano, calculado en base a la esperanza de vida, salud, educaci¨®n y renta. Nuestro pa¨ªs figura en el puesto vig¨¦simo por delante de Italia, Grecia y Portugal. En cabeza sigue Noruega y en la cola Sierra Leona. Lo m¨¢s alarmante es que 46 naciones -casi la mitad se hallan en ?frica Subsahariana- son hoy m¨¢s pobres que hace 25 a?os y en ocho pa¨ªses subsaharianos la esperanza de vida ha retrocedido a 40 a?os o menos.