El sector hotelero afronta la crisis del modelo tur¨ªstico sin tener claro el futuro

Los turistas aumentan, hace buen tiempo, y nadie pronuncia la palabra crisis. Y, sin embargo, algo parecido a un escalofr¨ªo recorre estos d¨ªas las espaldas de muchos empresarios tur¨ªsticos valencianos. Desde Alicante a Castell¨®n se habla de cambios de talla mundial en el negocio, de necesidad de an¨¢lisis, y, por primera vez, de miedo a la "mortalidad empresarial". Todo eso en un sector fragmentado en sus destinos pero acostumbrado a una rentabilidad fiable, y que al final del verano, seg¨²n datos oficiales, habr¨¢ recibido la nada despreciable cifra de 20 millones de visitantes.

Internet ha hecho que el sector no sepa qu¨¦ ocupaci¨®n tendr¨¢ dentro de diez d¨ªas

"Valencia es una ciudad muerta, tremendamente aburrida"

"Es un problema que est¨¢ en boca de todos porque es muy l¨®gico. Nosotros acabamos julio con una bajada de ocho puntos en la ocupaci¨®n", dice Vicente Marhuenda, presidente de la Asociaci¨®n Provincial de Hoteleros de Alicante (APHA). 78 hoteles y 14.000 camas. "Y m¨¢s turistas es dif¨ªcil que vengan. Si el n¨²mero de establecimientos sigue creciendo, los desequilibrios se har¨¢n mayores y esto es una ley del mercado: Habr¨¢ descensos de ocupaci¨®n; descenso en los m¨¢rgenes de beneficios, y esa tendencia puede conducir evidentemente a mortalidades empresariales. No es ni bueno ni malo, sino producto de la ley del mercado, que pondr¨¢ a cada uno en su lugar".

La creciente distancia entre oferta y demanda preocupa pr¨¢cticamente en todo el territorio. Al margen de la auto regulaci¨®n, hay voces, como la de David Devesa, presidente de los J¨®venes Empresarios Tur¨ªsticos de Benidorm, que hablan de que la Administraci¨®n congele el n¨²mero de plazas mediante actuaci¨®n urban¨ªstica. A pesar de ello, la Diputaci¨®n de Alicante repart¨ªa esta semana una nota de prensa titulada Hoteles: espectacular aumento, en la que pod¨ªa leerse: "La oferta hotelera ha registrado una notable mejora, tanto cuantitativa como cualitativa en los ¨²ltimos a?os. La infraestructura hotelera" ha pasado "de 243 establecimientos en 1995, a 295 en 2003".

La sobre oferta no es un problema que afecte ¨²nicamente al litoral valenciano. La mundializaci¨®n, v¨ªa ofertas de Internet y compa?¨ªas de vuelo de bajo coste, hace que los hoteles compitan ahora en una arena global. "La competencia no es ya, por ejemplo, Costa Blanca contra Costa del Sol, o las Baleares. La Costa Blanca compite ahora con Dubai, Australia, el Caribe o Singapur", opina David Devesa.

Mientras la mayor¨ªa de empresarios hablan de retroceso y subrayan la necesidad de adecuar el negocio al cambio de las reglas de juego, la voz con m¨¢s peso de la industria hotelera de Benidorm, la de Pere Joan Devesa, que dirige la Asociaci¨®n Hotelera de Benidorm y Costa Blanca (Hosbec), rebaja el dramatismo: "A pesar de lo que dicen por ah¨ª, yo creo que es una buena temporada. Una buena temporada. No la mejor que hemos tenido, pero una buena temporada".

La ocupaci¨®n en Benidorm, seg¨²n su opini¨®n personal, bajar¨¢ en agosto ocho puntos. Pero nada de eso preocupa a un hombre convencido de que "el ¨¦xito de la ciudad es clamoroso, y est¨¢ por encima de cualquier opini¨®n". Una de esas opiniones la dio hace poco, considera, el Ministro de Industria y Turismo, Jos¨¦ Montilla, que declar¨® obsoleto el modelo de turismo de sol y playa. "Yo creo que el se?or Montilla, cuando ha dicho que nuestro modelo est¨¢ obsoleto, se refiere fundamentalmente a su propia ignorancia". "Si fuera ministro de Turqu¨ªa o de Egipto", a?ade, "lo entender¨ªa y dir¨ªa que est¨¢ muy bien, pero s¨ª es nuestro ministro me parece un desastre. No entiendo que nuestra Administraci¨®n hable mal de nuestro producto".

Al presidente de Hosbec tampoco le quita el sue?o el supuesto exceso de oferta tur¨ªstica. Respecto a las afirmaciones de Sim¨®n Pedro Barcel¨® -vicepresidente del grupo Barcel¨® y de la asociaci¨®n empresarial Exceltur- que aplaud¨ªa hace poco la idea de cerrar hoteles viejos para descongestionar el sector, opina: "Yo le dir¨ªa al se?or Barcel¨® que por qu¨¦ no empieza por cerrar sus propias camas. Claro que a todos nos gustar¨ªa quedarnos solos en este negocio, pero ¨¦se es un razonamiento perverso".

Pere Joan Devesa, que felicita el trabajo de la Administraci¨®n auton¨®mica, que considera necesaria la promoci¨®n para vender mejor el producto valenciano, entiende que a Benidorm le hace falta un aumento de la capacidad del aeropuerto de L'Altet, en Alicante, y mejores conexiones con ¨¦l, en concreto una l¨ªnea que los conectara en 40 minutos.

Sus peticiones prueban que no existe un destino tur¨ªstico valenciano, sino muchos. Y las necesidades de la provincia de Castell¨®n, con el negocio centrado en el turista nacional, y con parte de las esperanzas puestas en zonas rurales, tienen poco o nada que ver con la implacable maquinaria de Benidorm, o con las dificultades de Valencia, una ciudad a la que Juan Carlos Gelabert, presidente de la principal asociaci¨®n de la provincia, define como una "ciudad muerta".

Tambi¨¦n hay aspectos comunes, como el efecto que est¨¢ teniendo Internet. Jos¨¦ Miguel Iribas, soci¨®logo y experto en hosteler¨ªa opina que la red ha roto "el esquema convencional que ten¨ªa la hosteler¨ªa" con los operadores tur¨ªsticos. Un sistema que permit¨ªa conocer las reservas con mucha antelaci¨®n y reaccionar ante situaciones adversas. "Dec¨ªas, bueno, este a?o el turismo ingl¨¦s no va a venir por el precio de la libra, o porque est¨¢n pasando un mal momento econ¨®mico. Y te ibas a buscar al turista italiano, franc¨¦s o nacional. Ahora, 10 d¨ªas antes no sabes qu¨¦ va a pasar. Un 15% de las reservas de Benidorm ya se hacen por Internet. Suficiente para desbaratarlo todo. Y es una tendencia enloquecida, que pr¨¢cticamente se ha doblado a?o tras a?o. Los hoteleros tienen que volver a estudiar, ponerse al d¨ªa tecnol¨®gicamente".

Los presidentes de las asociaciones provinciales de Valencia y Castell¨®n destacan igualmente el impacto negativo que la compra y alquiler de apartamentos est¨¢ teniendo en el negocio. Y consideran imprescindible aumentar la oferta complementaria. Pero para Gelabert, el aut¨¦ntico da?o lo produce la normativa sobre el horario de las terrazas. "Si un extranjero viene a Valencia y a la una de la ma?ana se le levanta de una terraza, imagina qu¨¦ imagen estamos dando. Estamos haciendo una ciudad tremendamente aburrida. Nos hace falta aprovechar zonas como la playa, tener m¨¢s salas de fiesta, y compatibilizar el ocio y el descanso. Sobre todo pensando en la Copa del Am¨¦rica".