La red p¨²blica ofrece la mitad de los psiquiatras previstos en 2001
La demora para una consulta de salud mental llega a mes y medio
El Plan de Salud Mental aprobado por el Consell en 2001, que estimaba una inversi¨®n de 6.500 millones de pesetas (39 millones de euros), se hab¨ªa trazado como objetivo alcanzar el a?o 2004 nueve psiquiatras por cada 100.000 habitantes para atender a los enfermos mentales en la red p¨²blica. Hoy, la red p¨²blica ofrece 4,7 psiquiatras por cada 100.000 habitantes, una relaci¨®n que sit¨²a la red valenciana en el ¨²ltimo lugar de Espa?a.
Seraf¨ªn Castellano, consejero de Sanidad en mayo de 2001, y Rafael Blasco, entonces consejero de Bienestar Social, presentaron al alim¨®n un plan que pretend¨ªa poner "fin a la insuficiencia de recursos sociales y asistenciales, espec¨ªficos e integrados", en palabras de Castellano. El responsable de Sanidad subray¨®, adem¨¢s, que los enfermos mentales y sus familias se convertir¨ªan en el "eje central sobre el que gravitar¨¢ toda la planificaci¨®n en este campo".
La iniciativa cubr¨ªa el vac¨ªo administrativo en materia de salud mental desde 1998, cuando expir¨® el plan anterior, dise?ado por los socialistas en 1991. El Consell, entonces bajo presidencia de Eduardo Zaplana, abord¨® el asunto a lo grande: la red p¨²blica dispondr¨ªa en 2004 de nueve psiquiatras, siete psic¨®logos, siete enfermeros y tres trabajadores sociales por cada 100.000 habitantes; y los centros de atenci¨®n se multiplicar¨ªan.
En febrero pasado, una carta de Bartolom¨¦ P¨¦rez, director general de Atenci¨®n a la Dependencia, alertaba sobre la situaci¨®n real del plan de salud mental tres a?os despu¨¦s de su presentaci¨®n: 3,7 psiquiatras, 1,9 psic¨®logos, 1,5 enfermeros y 0,2 trabajadores sociales por cada 100.000 habitantes. "La carencia de medios humanos est¨¢ generando, junto al visible incumplimiento del plan director", rezaba la carta, "importantes demoras en la atenci¨®n a los enfermos psiqui¨¢tricos, as¨ª como un destacable deterioro de la calidad asistencial". El director general urg¨ªa la contrataci¨®n de personal para cubrir "cuando menos, el 50% de lo comprometido en el plan director".
Denuncia p¨²blica
Pero las contrataciones brillan por su ausencia. Mar¨ªa Jos¨¦ Mendoza, portavoz socialista de Sanidad en las Cortes Valencianas, destac¨® el escaso efecto de "la denuncia p¨²blica" redactada por el director general responsable de Salud Mental y record¨® que la mitad de las 20 ¨¢reas de salud de la Comunidad Valenciana carecen de trabajadores sociales; que la mitad ofrecen menos de dos psic¨®logos por cada 100.000 habitantes; y que la tercera parte disponen de menos de cuatro psiquiatras por 100.000 habitantes.
Mendoza tambi¨¦n record¨® que el plan ten¨ªa previsto concentrar en una ¨²nica red todos los recursos dirigidos a la atenci¨®n de la salud mental. Pero a d¨ªa de hoy, m¨¢s de la mitad de los profesionales dependen de las diputaciones provinciales. La red, adem¨¢s, carece del car¨¢cter abierto que establec¨ªa el plan. Seg¨²n Mendoza, la mitad de los profesionales trabajan en instituciones cerradas, "b¨¢sicamente antiguos hospitales psiqui¨¢tricos", que se consideran obsoletos.
La reforma de la atenci¨®n al p¨²blico, que preve¨ªa toda una red de centros espec¨ªficos para los enfermos mentales sigue pendiente. A¨²n se mantienen 11 consultas de psiquiatr¨ªa en centros de especialidades del Servicio Valenciano de Salud, donde un m¨¦dico ocupa un despacho durante dos horas al d¨ªa para pasar consulta sin ning¨²n asistente. La verdadera dimensi¨®n del problema reside en los plazos de espera que deben soportar los ciudadanos para acceder a una primera consulta por dolencias de car¨¢cter neuropsiqui¨¢trico, que alcanzan un mes y medio, por ejemplo, en el ambulatorio de Monteolivet, en Valencia.
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