Buen cine en las secciones paralelas

Cuando esta 52? edici¨®n aborda la recta final de su programaci¨®n, el buen cine se abri¨® ayer paso en algunas de las secciones paralelas del festival donostiarra. Un delicioso filme uruguayo, Whisky, de Juan Pablo Rebella y Pablo Stoll, presentado en Zabaltegi / Perlas de Otros Festivales; un s¨®lido drama colombiano incluido en la misma secci¨®n, Mar¨ªa, llena eres de gracia, de Joshua Marston, una rigurosa historia de la iniciaci¨®n en el mundo de la droga de una muchacha obrera colombiana, que ha cosechado premios en varios festivales, Berl¨ªn incluido, y un recio drama gal¨¦s, de ambientes proletarios, A way of life, de Amma Asante, en Nuevos Directores, constituyeron una m¨¢s que estimable cuota de calidad cinematogr¨¢fica.

'En el mundo, a cada rato' presenta cinco historias de ni?os que viven en condiciones de pobreza extrema

Complet¨® la jornada un filme tan ¨²til como necesario, En el mundo, a cada rato, una iniciativa de Unicef para dar a conocer los problemas de los ni?os en el Tercer Mundo, del que son responsables cinco directores espa?oles.

Segundo largometraje de dos j¨®venes realizadores uruguayos, Whisky caus¨® sensaci¨®n tras su proyecci¨®n en la prestigiosa secci¨®n Un certain r¨¦gard del Festival de Cannes, donde obtuvo dos premios. En esencia, el filme aborda la vida mortecina y sin alicientes de un humilde fabricante textil montevideano, jud¨ªo y solitario, quien ve convulsionada su vida por la visita de su hermano, que vive en Brasil y del que hace tiempo apenas tiene noticias.

Se inventa entonces toda una vida paralela a la suya propia, en la que est¨¢ casado, pero para montarla necesita la colaboraci¨®n de la encargada de su propia f¨¢brica, una mujer que intuimos tan solitaria y extra?a como ¨¦l mismo.

Con una narraci¨®n seca, concisa y, sin embargo, extra?amente penetrada por un negro, sutil¨ªsimo, sentido del humor, Rebella y Stoll cuentan un par de d¨ªas en la vida de ambos hermanos y la peculiar falsa esposa. Y el resultado es un filme que, se apresur¨® a se?alarlo la cr¨ªtica francesa en su momento, parece una rara adaptaci¨®n de los modos de hacer de Aki Kaurism?ki trasplantados al R¨ªo de la Plata. Un filme al que no le sobra ni un solo plano, que asombra por su coherencia estil¨ªstica y que constituye una propuesta de las m¨¢s ins¨®litas, maduras y personales que se han podido ver este a?o en Donostia.

Tambi¨¦n madura a su manera, a pesar de que se trata de una ¨®pera prima absoluta, es A way of life, que compite por el premio al mejor realizador novel. Ambientada en un barrio deprimido de una peque?a localidad del sur de Gales y entre j¨®venes blancos pobres que comparten su espacio con inmigrantes, el filme de la antigua actriz y presentadora televisiva Amma Asante es una ejemplar puesta en im¨¢genes del funcionamiento del racismo rampante. Centrada en una madre tan joven como impulsiva y afectivamente primaria, la pel¨ªcula muestra de qu¨¦ manera se incuban los odios al extranjero en los barrios marginales de la desarrollada Europa; qu¨¦ pocos alicientes tiene determinada juventud sin formaci¨®n en su d¨ªa a d¨ªa, y con qu¨¦ monstruos se las tienen que ver quienes, extranjeros en origen, llevan ya media vida en otro pa¨ªs. Tiene mucha garra y claros deseos de denuncia; es, junto a la sueca D¨ªa y noche y a la suiza Viento del norte, la propuesta m¨¢s s¨®lida vista en Zabaltegi / Nuevos Directores.

En el mundo, a cada rato, una producci¨®n privada con patrocinio de Unicef y Renfe, entre otros muchos, presenta cinco historias que transcurren en India (la dirigida por Patricia Ferreira), en Guinea Ecuatorial (Pere Joan Ventura), en Argentina (Chus Guti¨¦rrez), en Per¨² (Javier Corcuera) y en Senegal (Javier Fesser). Todas est¨¢n protagonizadas por ni?os que viven en condiciones de pobreza extrema, aunque, en el caso de la historia de Fesser, ello no es ¨®bice para construir una brillante, luminosa par¨¢bola en clave de comedia sobre la necesidad de entendimiento vital, econ¨®mico y cultural entre norte y sur. Oscilan desde el tono claramente documental (Corcuera, Ventura) y la utilizaci¨®n de modelos mixtos con la ficci¨®n (Ferreira, Guti¨¦rrez).

Es un filme tan desigual -no podr¨ªa ser de otra manera, toda vez que responde a modos de hacer del todo diferentes- como, en el fondo, necesario: es de desear que consiga hacerse un lugar en las inflacionadas carteleras comerciales de estos d¨ªas.