La nueva imagen de Gamal

Hasta los triunfos deportivos de Egipto en Atenas han servido para intentar catapultar a la fama al hijo del presidente. Hace apenas tres semanas fueron colocados en el centro de El Cairo grandes carteles publicitarios con la imagen del Gamal Mubarak rodeado de los cinco medallistas ol¨ªmpicos. La oposici¨®n y la prensa independiente pusieron el grito en el cielo y los anuncios desaparecieron en pocos d¨ªas.
La campa?a de imagen coincide con la creciente presencia del hijo de Mubarak en la escena pol¨ªtica. Con una desenvoltura algo m¨¢s latina que ¨¢rabe y la contenci¨®n de un antiguo ejecutivo de la City londinense, Gamal se vende como principal alternativa de modernidad y eficacia en un pa¨ªs donde las autopistas sobrevuelan la miseria.
En su calidad de secretario del Comit¨¦ Pol¨ªtico del partido gubernamental, el primog¨¦nito del ra?s egipcio se enfrent¨® a pecho descubierto durante m¨¢s de una hora a las preguntas de diplom¨¢ticos, periodistas e intelectuales occidentales. Con la mirada muchas veces puesta en su madre, la influyente primera dama Susanne Mubarak estuvo presente en el debate, admiti¨® todas las preguntas, incluidas las relativas a los proscritos Hermanos Musulmanes, sin salirse ni un mil¨ªmetro de la l¨ªnea oficial en sus respuestas.
Sin duda se trata de la figura emergente en el poder en Egipto, reforzada tras el reajuste de Gobierno decretado por el presidente Mubarak el pasado julio, nada m¨¢s regresar de Alemania tras su intervenci¨®n quir¨²rgica. Los ministros j¨®venes pr¨®ximos al hijo del presidente, como el titular de Finanzas, Yusef Butros-Ghali, han copado la mitad del Gabinete. En los ¨²ltimos 52 a?os, todos los presidentes de Egipto han salido de las filas del Ej¨¦rcito.
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