"La UE es un matrimonio por inter¨¦s, no por amor"
El presidente checo, V¨¢clav Klaus (Praga, 1941), tiene fama de thatcherista, reputaci¨®n de euroesc¨¦ptico y el sambenito de ser la ant¨ªtesis de su antecesor, el carism¨¢tico V¨¢clav Havel. Frente al atractivo del escritor, un intelectual humanista e informal, bohemio y fumador, Klaus opone una sobria pulcritud, la raz¨®n y el pragmatismo econ¨®mico liberal y un profundo desprecio intelectual por el voluntarismo pol¨ªtico y la ret¨®rica progresista.
Economista, formado en Estados Unidos, Klaus trabaj¨® en el Banco Central de Checoslovaquia entre 1971 y 1986, antes de unirse a H¨¢vel en la llamada revoluci¨®n de terciopelo. Fue ministro de Finanzas en el primer Gobierno democr¨¢tico tras el fin del comunismo, fund¨® en 1991 el Partido Democr¨¢tico C¨ªvico (ODS) y un a?o m¨¢s tarde se convirti¨® en primer ministro. Durante su etapa al frente del Gobierno, Klaus pilot¨® la ruptura con Eslovaquia y el desmantelamiento del sistema econ¨®mico sovi¨¦tico con una agresiva pol¨ªtica de privatizaciones. Consolid¨® la econom¨ªa de mercado en la Rep¨²blica Checa, atrajo a los inversionistas extranjeros -sobre todo alemanes- y convirti¨® en accionistas a seis millones de checos.
"No estoy a favor de una Europa cada vez m¨¢s unida. La Europa unida nunca ha existido y espero que nunca lo haga"
"La crisis iraqu¨ª no dividi¨® a Europa, sino que puso de manifiesto su desuni¨®n. Y demostr¨® lo fuerte que es la relaci¨®n transatl¨¢ntica"
Su buena estrella se eclips¨® en 1997 cuando se vio obligado a dimitir en medio de un torrente de acusaciones de financiaci¨®n ilegal de su partido. En marzo de 2003 fue elegido presidente por el Parlamento con el reto de elaborar una nueva agenda pol¨ªtica para su pa¨ªs tras 15 a?os de reformas y buena parte de los objetivos alcanzados: la Rep¨²blica Checa es ya miembro de la OTAN y, desde el pasado mayo, de la Uni¨®n Europea. Klaus comparte con otros l¨ªderes de los pa¨ªses del antiguo bloque del Este sus simpat¨ªas hacia EE UU -el presidente H¨¢vel fue uno de los firmantes europeos de la famosa Carta de los Ocho de respaldo a Bush en la crisis de Irak- y sus recelos hacia Francia.
El presidente checo, que visita a partir de hoy Espa?a, donde se va entrevistar con los Reyes y el presidente, Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero, desgrana en esta entrevista su visi¨®n euroesc¨¦ptica de la UE, que ¨¦l prefiere calificar de "eurorrealista".
Pregunta. Casi 12 a?os despu¨¦s de separaci¨®n de Eslovaquia, ?cu¨¢l es su balance? ?Se arrepiente de algo?
Respuesta. No es un asunto pol¨¦mico, s¨®lo lo es para algunos extranjeros. No recuerdo que nadie haya sacado el tema en este pa¨ªs en los ¨²ltimos 10 a?os. Creo que la divisi¨®n del pa¨ªs era necesaria e inevitable y que cuanto m¨¢s r¨¢pido lo hici¨¦ramos mejor. Sin duda fue positiva. No obstante, no se la recomiendo a otros pa¨ªses.
P. El presidente H¨¢vel cerr¨® una ¨¦poca, ?cu¨¢l abre el presidente Klaus?
R. No se puede dividir el desarrollo de la Rep¨²blica Checa en los ¨²ltimos 15 a?os en dos ¨¦pocas por muchas razones, entre ellas la de que yo fui parte de la completa transformaci¨®n del pa¨ªs. La transici¨®n desde la ¨¦poca comunista, que empez¨® en noviembre de 1989, est¨¢ ya terminada y no est¨¢ ligada al nombre de un presidente. Completamos nuestras reformas e ingresamos en la UE. La cuesti¨®n ahora es decidir qu¨¦ clase de visi¨®n tenemos para ir hacia delante. Por una parte, ya somos una sociedad normal. Por otra, necesitamos una visi¨®n del futuro sencilla y comprensible. El final de la historia no ha llegado y necesitamos pol¨ªticas claras, ideas transparentes y dinero. Ahora, por primera vez, es el tiempo de hablar de las reformas que deben hacerse en el sistema financiero, el d¨¦ficit p¨²blico, las pensiones... En este sentido, c¨®mo frenar las tendencias centralistas de intervencionismo burocr¨¢tico conectadas estos d¨ªas con la UE es el principal desaf¨ªo de nuestro tiempo.
P. Ha sido calificado de euroesc¨¦ptico. ?Cu¨¢l es su visi¨®n de Europa?
R. No estoy de acuerdo con esa etiqueta de euroesc¨¦ptico. No veo que en Europa estemos divididos en euroesc¨¦pticos y euroentusiastas. Prefiero dos t¨¦rminos diferentes: eurorrealistas y euroingenuos. Estos ¨²ltimos me recuerdan a los ingenuos de la ¨¦poca comunista, tienen la misma mentalidad. Los eurorrealistas pensamos que Europa debe ser m¨¢s libre, m¨¢s democr¨¢tica y m¨¢s eficiente en t¨¦rminos de productividad. Entregar competencias a Bruselas hace a la gente menos libre. No estoy a favor de una Europa cada vez m¨¢s unida. Los pa¨ªses europeos deben ser buenos socios pero sus diferencias no pueden ser liquidadas en el altar de la Europa unida, algo que nunca ha existido y que espero que nunca lo haga.
P. La guerra de Irak dividi¨® a Europa. ?Comparte la idea de que existe una vieja y una nueva Europa?
R. Voy a ser provocador. No existe una identidad europea, Europa es una abstracci¨®n geogr¨¢fica. La crisis iraqu¨ª no dividi¨® a Europa, sino que puso de manifiesto que Europa no est¨¢ unida.
P. No cree entonces que est¨¦ en peligro el v¨ªnculo transatl¨¢ntico...
R. Ese v¨ªnculo es m¨¢s fuerte de lo que dicen los ejercicios de ret¨®rica de algunas personas. Es justo lo contrario. La crisis iraqu¨ª demostr¨® lo fuerte que es la relaci¨®n transatl¨¢ntica.
P. ?C¨®mo explica la escasa participaci¨®n -s¨®lo el 29%- de los checos en las pasadas elecciones al Parlamento Europeo?
R. Hubo dos razones principales. Por una parte, los checos son pragm¨¢ticos y realistas y ven la UE como un matrimonio por inter¨¦s, no por amor. La segunda explicaci¨®n es que estuvimos so?ando con elecciones libres en la ¨¦poca comunista y las tuvimos. Hemos tenido muchas elecciones en los ¨²ltimos a?os y ha ocurrido la ley econ¨®mica de los rendimientos decrecientes. No produce la misma satisfacci¨®n la primera taza de caf¨¦ que la cuarta.
P. Tres debates dominan la UE en los ¨²ltimos meses. El primero, la Constituci¨®n europea. ?Cu¨¢l es su posici¨®n?
R. No estoy a favor de la Constituci¨®n europea. Para m¨ª es un documento radical que tendr¨¢ consecuencias negativas para la libertad, la eficiencia y las naciones-Estado europeas. Sinceramente, no es mi proyecto.
P. ?Y sobre el problema de las deslocalizaciones?
R. La armonizaci¨®n fiscal es un error tr¨¢gico defendida por quienes consideran los monopolios, los privilegios y las rigideces econ¨®micas algo positivo. Algunos pol¨ªticos franceses interpretan las diferencias de impuestos como si fuesen el final de la civilizaci¨®n, cuando la competencia es algo esencial de la naturaleza humana.
P. Y por ¨²ltimo, ?pertenece Turqu¨ªa a Europa?
R. Me resultan extremadamente arrogantes los pol¨ªticos y comentaristas que especulan abiertamente sobre si Turqu¨ªa pertenece o no a Europa. Es un error y una tonter¨ªa. Nadie tiene derecho a creerse el propietario de la marca llamada Europa. Ahora bien, si la discusi¨®n se plantea sobre si Turqu¨ªa pertenece a la UE, la historia es diferente. Esa historia depender¨¢ de hacia d¨®nde vayamos. Si lo hacemos hacia la homogeneizaci¨®n, armonizaci¨®n y estandarizaci¨®n de estructuras, en ese caso, probablemente, Turqu¨ªa no pertenezca a la UE. Pero si vamos hacia una Europa que sea una instituci¨®n flexible, entonces, con Turqu¨ªa como una sociedad abierta, democr¨¢tica, libre, con una relaci¨®n de intercambio de bienes y servicios, ?por qu¨¦ no?
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