Dos polic¨ªas nacionales en pr¨¢cticas, asesinadas con arma blanca en su piso de L'Hospitalet
El cuerpo de una de las agentes presenta signos de haber sufrido vejaciones sexuales
Dos polic¨ªas nacionales en pr¨¢cticas fueron halladas ayer muertas en el piso en el que viv¨ªan en L'Hospitalet de Llobregat (Barcelona) con signos de haber sido asesinadas con un arma blanca. Las dos polic¨ªas, de 23 y 28 a?os, fueron encontradas tras avisar los vecinos de un incendio, al parecer intencionado, en el piso que compart¨ªan. Los Mossos d'Esquadra, que tienen las competencias policiales en esa ciudad, investigan las circunstancias de las muertes. Seg¨²n fuentes de la polic¨ªa catalana, una de las j¨®venes fue encontrada semidesnuda con signos de violencia sexual.
Las dos agentes en pr¨¢cticas eran Aurora R. y Silvia N., ambas naturales de dos peque?os pueblos de Le¨®n. La m¨¢s joven, que ayer cumpl¨ªa a?os, estaba destinada en el barrio barcelon¨¦s de La Verneda -al parecer hab¨ªa estado de servicio hasta las ocho de la ma?ana- y la otra en Castelldefels, poblaci¨®n situada a 20 kil¨®metros de Barcelona. Ambas viv¨ªan en el s¨¦ptimo piso, puerta segunda, de un bloque situado en el n¨²mero 48 de la Rambla de La Marina, en el populoso barrio de Bellvitge de L'Hospitalet.
A primera hora de la ma?ana, al llegar al lugar de los hechos, los bomberos encontraron los cad¨¢veres de las dos mujeres. Las primeras investigaciones apuntan a que el fuego se produjo de forma intencionada, ya que empez¨® por tres puntos distintos. Los dos cad¨¢veres se encontraban en dos habitaciones diferentes, en medio de grandes charcos de sangre con signos de ensa?amiento. Cuando llegaron los bomberos ya hab¨ªan sido alcanzados por el fuego. Los Mossos d'Esquadra, que se han hecho cargo de la investigaci¨®n, advirtieron muestras de violencia sexual en una de las agentes, aunque queda por confirmar este extremo por la autopsia que se realizar¨¢ a los cad¨¢veres.
El Juzgado de Instrucci¨®n n¨²mero 4 de L'Hospitalet, encargado del caso, ha decretado el secreto del sumario. El mutismo de los investigadores era ayer total. Los mossos desmintieron que en el piso convivieran m¨¢s personas, adem¨¢s de las fallecidas. Aun as¨ª, fuentes policiales dijeron ayer que se debe investigar ahora las amistades de las fallecidas, tanto de su entorno laboral como de otros ¨¢mbitos.
Discusi¨®n entre mujeres
Los vecinos de las fallecidas se mostraron ayer consternados por lo ocurrido. Una vecina de las dos polic¨ªas, Vitalina Ferreira, explic¨® que hacia las 8.30 horas oy¨® en el piso donde ocurri¨® el suceso una discusi¨®n en relaci¨®n con unas llaves, aunque no lleg¨® a ver a las dos agentes. "Eran las voces de dos mujeres y discut¨ªan acerca de si la puerta no se abr¨ªa o no se cerraba bien con esas llaves", explic¨® Ferreira, vecina del octavo segunda.
Los vecinos comentaban tambi¨¦n que el piso que ocupaban las dos j¨®venes cambiaba a menudo de residentes, que sol¨ªan ser agentes de polic¨ªa. Manuel Mena, vecino de la octava planta del bloque de 13 plantas donde resid¨ªan las fallecidas, fue el primero en darse cuenta de que algo no iba nada bien en la planta de abajo. Alertado por una importante columna de humo que se introduc¨ªa por las ventanas de su vivienda, avis¨® al resto de vecinos del inmueble, formado por 28 puertas, de la posibilidad de un incendio, y avis¨® a los bomberos. Buscando la procedencia de la columna de humo, que cada vez se iba haciendo mayor, Manuel fue a parar al piso de abajo, a la puerta segunda de la s¨¦ptima planta. Llam¨®, pero nadie contest¨®.
La sorpresa fue mayor en el caso de los bomberos, que desplazaron cinco dotaciones al lugar de los hechos. Detr¨¢s de la puerta apareci¨® el escenario del crimen, en el que los agentes de la polic¨ªa cient¨ªfica de los Mossos d'Esquadra estuvieron muchas horas. En dos estancias separadas se encontraron los dos cad¨¢veres rodeados de un charco de sangre.
Entre los vecinos agolpados en la calle -sobre todo jubilados, amas de casa con sus beb¨¦s, y con animales de compa?¨ªa incluidos- que esperaban volver a sus casas, la confusi¨®n era evidente. Una vecina del inmueble aseguraba que hac¨ªa a?os que en el edificio viv¨ªan polic¨ªas que se quedaban durante un tiempo y que se iban turnando en la vivienda.
Poco conocidas
Pocos vecinos conoc¨ªan a las v¨ªctimas, que viv¨ªan de alquiler desde hac¨ªa pocos meses. Algunos dijeron haber visto ocasionalmente en la escalera a una tercera persona, un joven de complexi¨®n fuerte, admitieron algunos. Los que se hab¨ªan cruzado con las j¨®venes fallecidas o los visitantes del piso aseguraban que eran personas normales que no hab¨ªan ocasionado ning¨²n problema desde que viv¨ªan en el inmueble, asegur¨® Marga Serrano, vecina del piso 12? del inmueble. "Lo curioso es que casi nadie de los que viven en el bloque las conoc¨ªa", aseguraba otro vecino.
"Desde que lleg¨® la polic¨ªa, est¨¢n rastreando a 100 metros a la redonda parterres, jardines, contenedores y hasta papeleras", explicaba Yolanda Llan?¨¤, otra vecina, quien asegur¨® haber o¨ªdo que la polic¨ªa dec¨ªa que en el interior del piso se hab¨ªan encontrado guantes de l¨¢tex, "de esos que no dejan huellas del crimen", aseguraba.
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