"Se puede alimentar a un ni?o por tan s¨®lo 28 euros al a?o"
James Morris (EE UU, 1943) es director del Programa Mundial de Alimentos (PMA) de la ONU, la mayor organizaci¨®n de ayuda alimentaria en el mundo, que el a?o pasado proporcion¨® alimentos a 104 millones de personas en 81 pa¨ªses. "El objetivo final de la ayuda alimentaria debe ser la eliminaci¨®n de su propia necesidad", afirma la declaraci¨®n sobre el cometido del Programa. De momento estamos lejos de ese fin. S¨®lo para este a?o, le faltan todav¨ªa 220 millones de d¨®lares al PMA para alimentar a 11 millones de refugiados y desplazados. "Estoy en ello", dice Morris en Madrid poco antes de entrevistarse con representantes del Gobierno espa?ol.
Pregunta. El primer Objetivo del Milenio [fijado en 2000 por la ONU] es acabar con el hambre en 2015. ?Vamos por el buen camino?
"El n¨²mero de personas que padecen hambre ha aumentado en los ¨²ltimos 10 a?os"
Respuesta. Creo que tenemos que hacer mucho m¨¢s. De hecho, el n¨²mero de personas que padecen hambre en el mundo ha aumentado en los ¨²ltimos 10 a?os. De los 840 millones de personas que padecen hambre en el mundo, 300 millones son ni?os. La mejor forma de alcanzar el Objetivo del Milenio es nutrir a estos 300 millones de ni?os. Se puede alimentar a una ni?a por tan s¨®lo 28 euros al a?o. Si tiene comida mejorar¨¢ su salud, podr¨¢ ir a la escuela y tener educaci¨®n, no tendr¨¢ un ni?o a los 12 a?os sino pasados los 20, ser¨¢ una mejor madre y una mejor ciudadana. Otro objetivo del milenio es la lucha contra el sida, y la mejor forma de combatirlo es a trav¨¦s de la educaci¨®n de los ni?os. Para que vayan a la escuela lo mejor es darles comida en la escuela. Creo que hay que poner un enorme ¨¦nfasis en alimentar a los ni?os.
P. Hoy, ?cu¨¢les son las causas del hambre?
R. Las principales causas son, primero, las condiciones clim¨¢ticas que producen crisis alimentarias. Luego tenemos un grave problema de producci¨®n de alimentos debido al sida: siete millones de campesinos han muerto s¨®lo en ?frica, muchos m¨¢s est¨¢n demasiado enfermos para trabajar. Tambi¨¦n ha habido una fuerte reducci¨®n de la inversi¨®n en infraestructuras agr¨ªcolas b¨¢sicas; el mundo le dedicaba antes un 12% de la ayuda exterior y ahora s¨®lo un 6%. Adem¨¢s, tenemos muchos conflictos que tienen un impacto directo sobre la producci¨®n de alimentos, como por ejemplo de la regi¨®n sudanesa de Darfur, en Uganda, en el oeste de ?frica, la Rep¨²blica Democr¨¢tica del Congo...
P. ?Qu¨¦ responsabilidad tienen los pa¨ªses desarrollados en esta situaci¨®n?
R. Deben hacer m¨¢s. El a?o pasado, los pa¨ªses desarrollados contribuyeron a la lucha contra el hambre con una media de dos d¨®lares por persona y por a?o. Los pa¨ªses en desarrollo deben asumir la responsabilidad primaria. Pero el mundo occidental debe ser m¨¢s generoso.
P. ?Qu¨¦ efecto tienen las subvenciones agr¨ªcolas en los pa¨ªses desarrollados sobre las crisis alimentarias en los pa¨ªses en desarrollo?
R. Los precios se mantienen artificialmente a niveles bajos gracias a las subvenciones, lo que les hace imposible competir a los productores del mundo en desarrollo. Si se dedicara s¨®lo un 3% de lo que el mundo se gasta en subvenciones a la agricultura para combatir el hambre, el problema estar¨ªa resuelto.
P. En los ¨²ltimos a?os, muchas organizaciones humanitarias se han quejado de que en la guerra contra el terrorismo su independencia ya no es respetada...
R. En todos los lugares donde trabajamos existen graves problemas pol¨ªticos, pero nuestra ¨²nica preocupaci¨®n es nutrir a los pobres hambrientos. Nuestro trabajo es arriesgado, Irak y Afganist¨¢n son buenos ejemplos. Luchamos para hacer entender a las partes que los trabajadores humanitarios son independientes, neutros y no interfieren en el proceso pol¨ªtico.
P. ?Es respetada esta independencia?
R. Creo que se respeta menos hoy que hace cinco a?os, y me parece muy triste.
P. ?Qu¨¦ espera del Gobierno espa?ol?
R. Ha sido muy importante el compromiso de aumentar la ayuda humanitaria expresado por el presidente [Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez] Zapatero hace dos semanas ante la Asamblea General de la ONU. Le agradezco su liderazgo en este tema. Espero ahora que la ayuda espa?ola aumente.
P. Da la impresi¨®n de que en el tema de la lucha contra el hambre se oyen muchas ideas bonitas, pero hay pocos actos concretos...
R. Creo que el hecho de que 55 gobernantes se unieran hace dos semanas en Nueva York bajo el liderazgo del presidente Zapatero, el presidente [Jacques] Chirac, el presidente [Ricardo] Lagos y el presidente [Luiz In¨¢cio] Lula es un paso importante. Pero tambi¨¦n creo que el compromiso del presidente [George] Bush de dedicar 15.000 millones de d¨®lares a la lucha contra el sida es otro importante ejemplo de liderazgo. Estamos haciendo peque?os progresos. Pero, adem¨¢s, debe haber un compromiso humanitario individual. Si le pido 28 euros para nutrir a un ni?o y con este don sabe que su salud mejorar¨¢ de forma espectacular, podr¨¢ empezar a estudiar y todo en su vida empezar¨¢ a cambiar, probablemente me dar¨¢ estos 28 euros. Todo el mundo siente lo mismo. Lo ¨²nico que hace falta es encontrar una forma de involucrar a la gente.
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