El 'n¨²mero dos' de Karzai sale ileso de un atentado

Ahmad Zia Masud escap¨® ayer ileso de un atentado cuando acud¨ªa a un mitin electoral en Faizabad, 400 kil¨®metros al norte de Kabul. Murieron dos personas y result¨® herido un ex gobernador provincial. Hubiera sido un incidente m¨¢s de la campa?a para las elecciones afganas del pr¨®ximo s¨¢bado si no fuera porque Ahmad Zia es el candidato a primer vicepresidente de Hamid Karzai, el presidente provisional y aspirante favorito en todas las quinielas.

Mientras, prosegu¨ªan los tratos entre bambalinas para aunar apoyos en torno a Karzai. Por la ma?ana se conoci¨® la retirada de dos candidatos a favor del presidente provisional. Uno de ellos, Abdul Hasid Aryan, no era muy conocido, pero Sayed Isaac Gailani es miembro de una destacada familia de dignatarios religiosos del pa¨ªs. Durante la tarde, varios aspirantes a vicepresidentes desertaron de sus cabezas de listas y se pasaron al protegido de Washington. Gailani anunci¨® su decisi¨®n en una conferencia de prensa conjunta con Karzai.

Fuentes del equipo legal que asesora a la comisi¨®n electoral mostraron su preocupaci¨®n por este giro. "La ley electoral establece que el ¨²ltimo plazo para que los candidatos se retiren es 60 d¨ªas antes de la cita con las urnas", explic¨® el experto. A estas alturas no es posible eliminar sus nombres de las papeletas y, con la precariedad de los medios de comunicaci¨®n, no hay forma de que todos se enteren de qui¨¦n se ha retirado. El atentado de ayer -contra Ahmad Zia Masud, hermano de Ahmad Sha Masud, el se?or de la guerra que encabez¨® la Alianza del Norte en la guerra de Afganist¨¢n en 2001-, justo el ¨²ltimo d¨ªa de la campa?a electoral, ha sido el colof¨®n a una semana llena de peque?os incidentes por todo el pa¨ªs. Desde el inicio de la campa?a, diversas organizaciones de derechos humanos vienen denunciando la violencia de distintos grupos armados, presiones sobre los electores, fraudes y escasez de observadores internacionales. Ayer mismo, el m¨¢ximo representante de la ONU para Afganist¨¢n, el franc¨¦s Jean Arnault, reconoci¨® en una conferencia de prensa que "a¨²n se mantiene una cultura de la violencia heredada de la guerra". No obstante, dijo Arnault, "estimamos que el grado de libertad y justicia es suficiente para que la voluntad del conjunto del pueblo afgano se exprese en el escrutinio".

"Hasta ahora el nivel de violencia es muy bajo para lo que es este pa¨ªs", se?al¨® un asesor internacional de la comisi¨®n electoral que lleva nueve meses en Afganist¨¢n. "Si miramos de d¨®nde partimos y vemos d¨®nde hemos llegado, resulta extraordinario", concluy¨®.

Aun as¨ª hay coincidencia en que la principal preocupaci¨®n de aqu¨ª al final del proceso es la seguridad. Y el proceso no acaba el s¨¢bado con la votaci¨®n. La dif¨ªcil orograf¨ªa afgana y la falta de infraestructuras viarias convierte en un reto log¨ªstico la recogida de las 63.000 urnas y su traslado a los ocho principales centros de recuento. Al no haberse logrado el desarme total de las milicias, siempre hay riesgo de que alg¨²n descontento intente interferir por la fuerza. "Si no ganamos, el Gobierno que se forme sin nosotros carecer¨¢ de legitimidad", advirti¨® de forma preocupante el general Rachid Dostum durante su mitin de cierre de campa?a en Kabul.