Magia y verdad

Iniciaron las Juventudes Musicales de Madrid su nuevo ciclo de conciertos extraordinarios con una espl¨¦ndida sesi¨®n de c¨¢mara, mientras en la sala B del auditorio prosegu¨ªa la reci¨¦n inaugurada XIII temporada de Liceo de C¨¢mara. El romanticismo enriqueci¨® con las sumas tan se?eras y perdurables como las de Schubert y Brahms el mism¨ªsimo ser de la m¨²sica de c¨¢mara en sus varias expresiones. Las de Schubert van desde la intimidad po¨¦tica del lied hasta la ampliaci¨®n sin ret¨®rica de las formas, una magn¨ªfica creaci¨®n terminal como es el Tr¨ªo en mi bemol, escuchado junto a la Sonatina en re mayor, para viol¨ªn y piano, 12 a?os anterior. Legado recogido y progresado por Brahms, presente con cinco lieder que nos hablan sin palabras con tanta afectividad como en su naturaleza vocal y el Tr¨ªo en do mayor, op. 97, estrenado en 1882.

Son tantas las diferencias como las analog¨ªas sustanciales entre el impulso l¨ªrico del vien¨¦s o el hamburgu¨¦s y los int¨¦rpretes, en sus preciosas versiones, les otorgaron el m¨¢ximo relieve. Katia y Marielle Labeque (Bayona, 1950 y 1952) y Renaud y Gautier Capu?on (Chambery, 1976 y 1981) son solistas de ya extensa y justa fama hecha a golpes de dedicaci¨®n, saber y veracidad, y lucen una maestr¨ªa en el g¨¦nero de c¨¢mara que, como recuerda ?lvaro Guibert en sus condensadas notas de programa, supone para Teresa Berganza "la verdad en la m¨²sica". Y nada hay m¨¢s emocionante que la veracidad sustancial, mas a¨²n si aparece ligada, sustanciada, en la perfecta transmisi¨®n de mensajes de alto valor, capaces de explicarse por s¨ª mismos.

La sesi¨®n se torn¨® as¨ª en un fluir de bellezas sensibles decantadas en el ¨¢nimo de los int¨¦rpretes a trav¨¦s de instrumentos de primera categor¨ªa como pueden ser el violonchelo de Matteo Goffiler o el viol¨ªn Stradivarius en el que Fritz Kreisler se dirigiera a sus vastas audiencias. Una jornada inolvidable supervalorada por el fin de estos conciertos extraordinarios gracias a los cuales no pocos valores de nuestra mejor interpretativa perfeccionan en los mejores centros educativos el arte para el que nacieron y al que sirven con vocaci¨®n y empe?o.