N¨¦stor Baguer, periodista y esp¨ªa infiltrado en la disidencia cubana

El periodista y esp¨ªa N¨¦stor Baguer, el m¨¢s viejo topo de los ¨®rganos de la Seguridad del Estado de Cuba infiltrado desde hac¨ªa a?os en las filas de la disidencia, fue enterrado el martes en La Habana con honores de h¨¦roe, en una ceremonia en la que se pronunciaron discursos patri¨®ticos, y cont¨® con una ofrenda floral del presidente cubano, Fidel Castro. Baguer muri¨® a los 83 a?os de un paro card¨ªaco mientras se encontraba internado en el hospital Calixto Garc¨ªa de La Habana.

N¨¦stor Everardo Baguer S¨¢nchez-Galarraga lleg¨® a ser miembro correspondiente de la Academia Espa?ola y de n¨²mero de la Academia Cubana de la Lengua, de la que fue expulsado en 1991, cuando aparentemente era miembro activo de la disidencia. En realidad, Baguer trabaj¨® para la Seguridad del Estado desde 1960 y estuvo infiltrado desde principios de los a?os noventa en los grupos de la denominada "prensa independiente" de Cuba.

Su testimonio en los juicios sumar¨ªsimos celebrados en la primavera de 2003 contra 75 disidentes fue clave para condenar a algunos de sus colegas, entre ellos al periodista y poeta Ra¨²l Rivero, sentenciado a 20 a?os de privaci¨®n de libertad por "conspirar" con EE UU para desestabilizar la revoluci¨®n -en la actualidad, preso en la c¨¢rcel de Canaleta, en la provincia de Ciego de ?vila-. En aquel juicio, Baguer consider¨® a Rivero su "amigo" y lo calific¨® como "buen periodista, mejor poeta y un hombre muy inteligente", pero lo implic¨® en diversas "actividades contrarrevolucionarias", negadas siempre por el poeta.

En numerosas ocasiones, el agente Octavio, como fue bautizado por la Seguridad cubana, afirm¨® que se infiltr¨® en la disidencia "para defender Cuba de Estados Unidos", pues, dijo, "la ¨²nica forma de impedirlo es trabajar para la Seguridad". Baguer ten¨ªa un pase permanente de acceso a la Secci¨®n de Intereses de Estados Unidos en La Habana (SINA) y fue uno de los que lider¨®, el 14 de marzo, un encuentro sobre ¨¦tica period¨ªstica en la residencia del jefe de esa Oficina, James Cason, que fue el desencadenante de la detenci¨®n de los 75 opositores en marzo del a?o pasado. "Si a alguien no pueden enga?ar los americanos es a m¨ª, porque me eduqu¨¦ en una universidad norteamericana y los conozco bien", presumi¨® entonces Baguer.

Ayer, en declaraciones a la agencia Efe, la esposa de Rivero, Blanca Reyes, coment¨®: "No lamento su muerte, pero tampoco me alegro, pues era un miserable. Se dedic¨® a tener dinero y no ideales".

"Baguer difam¨® a personas tan sobresalientes del mundo intelectual como Ra¨²l Rivero. No puedo juzgar a los muertos, yo lo juzgu¨¦ de vivo. Para m¨ª, fue una persona baja y tremendamente mentirosa", se?al¨® Marta Beatriz Roque, ¨²nica mujer del grupo de los 75 disidentes encarcelados el a?o pasado y liberada por motivos de salud.

En la despedida del duelo, el presidente de la Uni¨®n de Periodistas de Cuba, T¨²bal P¨¢ez, consider¨® a Baguer un h¨¦roe y destac¨® su aporte a la revoluci¨®n desde los lugares donde trabaj¨®, y sobre todo con su trabajo al servicio de la Seguridad del Estado, "contribuyendo a desarticular los mecanismos del bloqueo criminal contra Cuba" y para "ayudar en el descubrimiento y desarticulaci¨®n de numerosos planes dirigidos a organizar y financiar la actividad mercenaria de los grup¨²sculos de la contrarrevoluci¨®n en el sector period¨ªstico".