Ir¨¢n ofrece a la UE suspender el enriquecimiento de uranio

Ir¨¢n y la Uni¨®n Europea han llegado al acuerdo de que Teher¨¢n suspender¨¢ este mes voluntariamente el enriquecimiento de uranio y actividades relacionadas, y lo har¨¢ de forma total y sostenida. A cambio, los Veinticinco establecer¨¢n nuevos pactos econ¨®micos, comerciales y tecnol¨®gicos con Ir¨¢n que suponen el retorno del r¨¦gimen de los ayatol¨¢s a la comunidad internacional. El convenio est¨¢ pendiente del visto bueno de las autoridades iran¨ªes, pero conocedores del proceso negociador, tanto en Teher¨¢n como en Bruselas, aventuraban que el acuerdo pleno es cuesti¨®n de d¨ªas.

La comunidad internacional lleva dos a?os tratando de convencer a los iran¨ªes de que renuncien a sus planes nucleares, definidos por Teher¨¢n como un simple deseo de dotarse de una nueva fuente de energ¨ªa para producir electricidad. Para Occidente hay algo m¨¢s: el oculto deseo iran¨ª de hacerse con el arma at¨®mica.

La UE pone como prueba de las aviesas intenciones iran¨ªes la laxa interpretaci¨®n que realiz¨® el r¨¦gimen isl¨¢mico del acuerdo alcanzado hace un a?o con los europeos. Los negociadores de Alemania, Francia y Reino Unido cre¨ªan haber pactado el final del proceso de enriquecimiento de uranio, pero Teher¨¢n interpret¨® las "actividades relacionadas" de un modo que le permit¨ªa seguir con sus trabajos.

Ahora, tras las discusiones del pasado fin de semana en Par¨ªs y aclaradas las diferencias sem¨¢nticas, Ir¨¢n declarar¨¢ que suspende el enriquecimiento de uranio y actividades relacionadas, de forma plena y sostenida. Adem¨¢s, lo anunciar¨¢ a la Organizaci¨®n Internacional de la Energ¨ªa At¨®mica (OIEA), a la que pedir¨¢ que verifique el proceso. Queda a¨²n por determinar que la suspensi¨®n cubrir¨¢ tambi¨¦n "todas las actividades de conversi¨®n del uranio" previas al eventual enriquecimiento.

Proceso complejo

"Pr¨¢cticamente hay acuerdo y esperamos que los iran¨ªes respondan en los pr¨®ximos d¨ªas", comentaba una fuente europea. No obstante, la fuente subrayaba la complejidad del proceso. Al acuerdo de renuncia iran¨ª deben seguir la verificaci¨®n por el OIEA, la negociaci¨®n con la UE y la apertura de un proceso de colaboraci¨®n tecnol¨®gica. En consecuencia, el procedimiento queda sometido a las incertidumbres de la pol¨ªtica iran¨ª.

A cambio del s¨ª, la UE propone acuerdos econ¨®micos y comerciales a Ir¨¢n, adem¨¢s de apoyar su candidatura a la Organizaci¨®n Mundial de Comercio y ofrecerle tecnolog¨ªa para el uso civil de la energ¨ªa nuclear. La alternativa a este acuerdo ser¨ªa la constataci¨®n por el OIEA, el d¨ªa 25, de que Ir¨¢n contribuye a la proliferaci¨®n nuclear y su denuncia ante el Consejo de Seguridad. En ese caso, Teher¨¢n se ver¨ªa abocada a sanciones.

Bruselas reconoce que para Ir¨¢n la nuclearizaci¨®n es cuesti¨®n de orgullo, pero cree que la renuncia tiene ventajas. Para los prooccidentales iran¨ªes, el abandono conlleva la apertura hacia Occidente; para los conservadores, la certificaci¨®n de que la sociedad isl¨¢mica es admitida en el club de naciones.