La misi¨®n 'reservas de caucho'

EN NOVIEMBRE de 1942, m¨¢s o menos un a?o despu¨¦s de que Estados Unidos entrase en la II Guerra Mundial, el bot¨¢nico norteamericano Richard Schultes fue incorporado al servicio activo por su Gobierno para una tarea singular: encontrar en la selva suramericana reservas de caucho. Por aquel entonces, seg¨²n cuenta Wade Davis en su libro, el 85% del caucho natural se produc¨ªa en las plantaciones de Malasia y las Indias Holandesas, que hab¨ªan sido conquistadas por los japoneses, y las reservas de caucho de Estados Unidos no alcanzaban para m¨¢s all¨¢ de un a?o. La industria b¨¦lica precisaba del caucho casi tanto como del acero (un tanque de aquel tiempo se constru¨ªa con 20 toneladas de acero y media de caucho) y la gravedad de la situaci¨®n era tal que el presidente Roosevelt decret¨® la prohibici¨®n del uso del caucho para cualquier tipo de industria que no fuera la b¨¦lica. Explorando el r¨ªo colombiano Apaporis, Schultes encontr¨® reservas calculadas en m¨¢s de diecis¨¦is millones de ¨¢rboles caucheros.

Durante los siguientes a?os, Estados Unidos financi¨® un programa de plantaciones de caucho en Per¨², Costa Rica y Panam¨¢, encaminado al abandono de la dependencia del caucho asi¨¢tico. Schultes fue uno de los principales cient¨ªficos responsables del programa. El caucho conseguido en esas plantaciones era, adem¨¢s, inmune a las plagas, al contrario que el asi¨¢tico.

Ese programa se abandon¨® en 1953, ante el impulso de la industria del caucho sint¨¦tico creado a partir de los residuos del petr¨®leo. Hoy d¨ªa, sin embargo, el caucho natural ha tomado la delantera al sint¨¦tico. Y los campos de caucho inmunes a las plagas creados por Schultes ya no existen. Dice Wade Davis en su libro: "Un indetectable y ¨²nico acto de terrorismo biol¨®gico, la introducci¨®n de esporas de hongo que se podr¨ªan esconder en un zapato, podr¨ªa arrasar las plantaciones (de Asia), lo que suspender¨ªa la producci¨®n de caucho al menos durante una d¨¦cada. Es dif¨ªcil pensar en otra materia prima tan vital y vulnerable como ¨¦sta".