"Se prepara una aut¨¦ntica revoluci¨®n en la justicia"
De ¨¦l dependen los 335 secretarios judiciales repartidos por los juzgados de la Comunidad Valenciana. Ha estrenado un nombramiento por consenso que deja atr¨¢s siglos en los que la edad era el valor seguro para alcanzar poder. La profunda reforma de la Ley Org¨¢nica del Poder Judicial (LOPJ) de 2003 introdujo un mecanismo m¨¢s democr¨¢tico para la designaci¨®n de la que se podr¨ªa considerar tercera autoridad judicial y en el que participan todas las administraciones y ¨®rganos profesionales. Jes¨²s Olarte, nacido en Cuenca, padre de tres hijos, pas¨® 13 a?os en el Juzgado de Primera Instancia 18 de Valencia. Y s¨®lo el reto de la reforma de la oficina judicial que va a otorgar responsabilidades muy amplias a los secretarios judiciales ha sido capaz de arrancarle de la pr¨¢ctica m¨¢s ortodoxa de una vocaci¨®n algo inducida por los antecedentes familiares y comprometida desde la Uni¨®n Progresista de Secretarios Judiciales.
"Es un momento de lealtad institucional para que se haga de la forma m¨¢s tranquila"
"Si aplicamos los recursos de los que disponemos estaremos m¨¢s cerca del usuario"
Pregunta. ?Para qu¨¦ sirve su cargo? ?Cu¨¢les son sus funciones?
Respuesta. Es una responsabilidad muy desconocida. De una parte entran las funciones propias de una cierta intendencia administrativa de la Sala de Gobierno del Tribunal Superior de Justicia. De otra, est¨¢n las que se derivan de las atribuciones que ya ha concretado la reforma de la LOPJ de 2003 y entre las que se encuentra la elaboraci¨®n del acta de reuni¨®n, la solicitud de una convocatoria si entiendo que hay materia para ello, voz y voto en los acuerdos que tengan relaci¨®n directa con las oficinas judiciales o con los secretarios judiciales.
P. ?Eso es sin¨®nimo de mandar mucho?
R. El cuerpo de secretarios judiciales, que tiene que superar unas oposiciones muy duras en las que el programa es muy coincidente con el de jueces y magistrados, pas¨® ¨¦pocas de inquietud. Ahora se abre un periodo apasionante. La reforma de la LOPJ de 2003 ha decidido potenciar esa figura y hacer recaer en ella todo lo que no sea en realidad el hecho estricto de juzgar. Falta que las distintas leyes que describen los procedimientos sean modificadas para conocer el detalle, lo que parece ser que ocurrir¨¢ a mediados del pr¨®ximo a?o. Y eso supondr¨¢ que toda la sucesi¨®n de pasos que se producen desde la entrada de un litigio hasta la celebraci¨®n del juicio ser¨¢n responsabilidad del secretario judicial.
P. ?Qu¨¦ modelo est¨¢ previsto que sustituya al juzgado que hoy conocemos?
R. El juzgado que hasta ahora hemos conocido pasar¨¢ a ser una estructura mucho m¨¢s peque?a, no tendr¨¢ recursos propios exclusivos, estar¨¢ compuesto por el juez y dos o tres personas m¨¢s. Es lo que se denomina Unidad Procesal de Apoyo Directo (UPAD). El conjunto de funcionarios que hemos visto hist¨®ricamente adscritos a un determinado juzgado en ese mapa que tenemos en el que cada oficina judicial es una isla, no se comunica con las dem¨¢s y no comparte recursos, desaparece como tal. Adem¨¢s de que la calificaci¨®n de sus funciones se modifica, el grueso pasar¨¢ a los Servicios Comunes, que tendr¨¢n como responsable de su funcionamiento a secretarios judiciales. Y las tareas de personal y organizaci¨®n del mismo descansar¨¢n en unas unidades administrativas distintas de las que ser¨¢ responsable en dotaciones la Administraci¨®n auton¨®mica. Con ello se prepara una aut¨¦ntica revoluci¨®n en la justicia.
P. ?En qu¨¦ va a notar el usuario toda esa reforma?
R. Se pretende que lo perciba en la eficacia, la comodidad, la rapidez en la resoluci¨®n. El objetivo es que la justicia d¨¦ respuesta a los problemas de la sociedad. Si aplicamos los recursos de que disponemos e incorporamos aquellos que son ya imprescindibles, como los tecnol¨®gicos, necesariamente estaremos m¨¢s cerca del usuario, seremos m¨¢s r¨¢pidos, m¨¢s pr¨¢cticos para ¨¦l.
P. ?Ser¨¢n los secretarios judiciales interlocutores directos con el ciudadano?
R. S¨ª, sin duda. Si se concretan las cosas tal como est¨¢n previstas, el secretario judicial ser¨¢ responsable de servicios comunes y firmar¨¢, por ejemplo, providencias, decretos, diligencias; todas aquellas cosas que no afecten a cuestiones relativas a derechos fundamentales recaer¨¢n sobre el secretario judicial.
P. Eso modificar¨¢ el mapa laboral, ?c¨®mo est¨¢ previsto que se repartan?
R. Cambia todo el mapa; los recursos humanos van a tener otro valor porque se optimizan. El funcionario que antes ten¨ªa repetidas sus funciones de forma id¨¦ntica en cada juzgado pasar¨¢ ahora a atender a dos o a tres o a no tener consciencia de para cu¨¢ntos porque el trabajo es uno. Los secretarios atender¨¢n entre dos y tres juzgados en Social, tres en Contencioso, dos en Penal y se mantendr¨¢ igual que hasta ahora en Instrucci¨®n, uno por juzgado porque el sistema de guardias obliga a ello.
P. ?Qu¨¦ cosas desaparecer¨ªan y cu¨¢les aparecer¨¢n de forma inmediatamente visible?
R. Desaparecer¨¢n los juzgados de ejecutorias porque se crear¨¢ un servicio com¨²n de ejecuciones, por ejemplo los servicios comunes har¨¢n desaparecer la individualizaci¨®n de los servicios esenciales. De esa forma, con una importante capacidad para parcelarlos en funci¨®n de las necesidades, la ley establece servicios comunes de Notificaci¨®n, de Embargo, de Registro y Reparto, de Jurisdicci¨®n Voluntaria, de Dep¨®sito y Archivo, y de Ordenaci¨®n del Procedimiento, que para m¨ª es el m¨¢s delicado.
P. ?Por qu¨¦?
R. Porque es el que definir¨¢ el recorrido de un expediente desde que entra en el juzgado hasta que se celebre el juicio. Se ver¨¢n las tasas, la documentaci¨®n, las diligencias, las pruebas... y eso f¨ªsicamente fuera del lugar en el que entr¨® y al que debe volver. Si ese circuito no est¨¢ perfecto y casi matem¨¢ticamente definido nos podemos caer con todo. Tal vez su puesta en marcha se demore m¨¢s, y a m¨ª no me importar¨ªa, porque es muy delicado y tiene que salir bien.
P. ?Por qu¨¦ si todo va a cambiar se siguen pidiendo juzgados que desaparecer¨¢n con todo su personal asociado, que se incorporar¨¢ a servicios comunes, cuyas dimensiones no est¨¢n a¨²n definidas?
R. Se piden porque son necesarios. Entiendo que se puedan tener dudas sobre ello, pero hay que tener en cuenta que ¨¦sta es una etapa de transici¨®n.
P. La Administraci¨®n auton¨®mica no parece haber previsto en el presupuesto de 2005 partidas espec¨ªficas asociadas a algunas de las necesidades, como las inform¨¢ticas, para ejecutar la reforma.
R. Las comisiones t¨¦cnicas tienen que empezar a trabajar. Yo entiendo que ser¨¢ en 2006 cuando todo esto se vaya concretando y creo que es un momento de lealtad institucional para hacer que se haga de la forma m¨¢s tranquila posible.
P. Hay juzgados sin recursos ofim¨¢ticos muy elementales que dificultar¨¢n la entrada en vigor de servicios comunes de car¨¢cter provincial. ?En qu¨¦ partidos judiciales se estrenar¨¢n?
R. Es cierto que hay servicios comunes, como los de embargos o subastas por ejemplo, que se pretenden con un car¨¢cter al menos de ¨¢rea metropolitana. De hecho, la estructura nuestra de los secretarios judiciales, establece un m¨¢ximo responsable para todo la autonom¨ªa y despu¨¦s un m¨¢ximo responsable por provincia precisamente para extender lo m¨¢s posible los servicios comunes. Pero tal vez no sea tan inmediato. Yo creo que Castell¨®n, Valencia, Alicante, Elche y poco despu¨¦s Benidorm en cuanto tenga jurisdicci¨®n separada, podr¨¢n adoptar el nuevo sistema.
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