En la distancia corta

A la llamada de un discutible car¨¢cter latino que apela a t¨®picos como del tipo de quienes lo poseen son personas que se toman a broma la puntualidad, adem¨¢s de ser mujeriegos y juerguistas, un buen n¨²mero de invitados se reuni¨® la noche del jueves en Madrid para ver un concierto ofrecido por los muy conocidos y supervendedores Man¨¢.

El cuarteto mexicano de Guadalajara tiene un indudable tir¨®n por estos pagos, que se traduce en que sus seguidores se saben de pe a pa sus canciones y convierten sus conciertos en verdaderos actos cat¨¢rticos donde todos y todas cantan como una sola voz. Un reclamo a?adido anunciaba que Man¨¢ iba a actuar en "ac¨²stico", dudoso concepto tambi¨¦n, que supone ofrecerse tal cual, con la instrumentaci¨®n sin electrificar, como mucho con alg¨²n micro cercano a las guitarras y voces para que el sonido amplificado llegue a toda la sala.

Es decir, una buena oportunidad para disfrutar de la banda alejada de las grandes audiencias y sonido excesivo de las plazas de toros que han abarrotado en los ¨²ltimos a?os.

Sin embargo, el supuesto "ac¨²stico" se traduce en Man¨¢ en que Fher, su carism¨¢tico cantante, guitarra de palo en el regazo, no se levanta de un taburete en todo el recital, igual que el bajista y el otro guitarrista. Era otra forma de apreciar a Man¨¢, pero las canciones que ofrecieron sonaron tal cual las ofrecen de costumbre, acaso m¨¢s accesibles, aunque s¨®lo fuera por la proximidad con el p¨²blico.

Sus mensajes cari?osos que hablan de llevar al cielo a su amor, de cierto muelle de San Blas o de lo dif¨ªcil que es vivir sin aire calaron entre los invitados, que hicieron parecer que en la sala hab¨ªa tantas personas como las que caben en Las Ventas.

Presentaron a una artista desconocida, Shila, para cantar con ellos Te solt¨¦ la rienda, una de las canciones memorables de Jos¨¦ Alfredo Jim¨¦nez, autor mexicano en el que a veces se miran con muchos a?os luz entremedias.

Se despidieron a golpe de reggae con Oye mi amor, para dar paso despu¨¦s a la proyecci¨®n de Acceso total, que era el reclamo del concierto semiclandestino: un DVD documental que acaban de editar con im¨¢genes de la gira Revoluci¨®n de amor, realizada entre 2000 y 2003 en 28 pa¨ªses y con m¨¢s de 100 abarrotados conciertos.