Amparo Larra?aga y Jorge Sanz protagonizan un juego de titanes

Amparo Larra?aga y Jorge Sanz, dos de los actores espa?oles m¨¢s populares, ser¨¢n los protagonistas de Peque?os cr¨ªmenes conyugales, una obra de Eric-Emmanuel Schmitt que salta de la comedia a la intriga y al drama. La obra, que bucea a trav¨¦s del suspense y la iron¨ªa en las relaciones de la pareja, ser¨¢ dirigida por la brit¨¢nica Tamzin Townsend y se estrenar¨¢ el pr¨®ximo 21 de enero en M¨¢laga.

Tras su estreno en el Festival de Teatro de M¨¢laga, el montaje iniciar¨¢ una larga y apretada gira por numerosas ciudades espa?olas. Su directora, formada teatralmente en la Universidad de Kent, ha realizado numerosos trabajos en Barcelona desde 1992, aunque ahora tiene puesta su mirada sobre Madrid tras la buena acogida que ha tenido su trabajo en El m¨¦todo Gronholm, de Jordi Galcer¨¢n, obra que contin¨²a en cartel en el teatro Marquina de Madrid y que est¨¢ proporcionando al actor Carlos Hip¨®lito uno de los ¨¦xitos de su carrera.

En Peque?os cr¨ªmenes conyugales tambi¨¦n interviene otro miembro de la familia Larra?aga-Merlo: el productor del espect¨¢culo es Pedro Larra?aga, profesional dedicado a estas labores desde hace muchos a?os. ?l, como responsable de la elecci¨®n de la obra, confiesa que su inter¨¦s por el autor viene de atr¨¢s, aunque cuando vio la obra en Par¨ªs le apasion¨®. En contra de otros montajes internacionales de esta obra, en la producci¨®n de Larra?aga se han elegido actores j¨®venes, algo que, tanto ¨¦l como Juan Jos¨¦ Arteche, responsable de la versi¨®n para Espa?a y gran conocedor de la obra de Schmitt, consideran que se acerca m¨¢s a la intenci¨®n original del autor de El evangelio seg¨²n Pilatos, su ¨²ltimo estreno parisiense.

Amparo Larra?aga se neg¨® a ver la obra que ahora tiene que interpretar: "Cuando voy a hacer un trabajo trato de no verlo puesto en escena por otros profesionales, porque siempre podr¨ªa influir en negativo o positivo y prefiero renunciar a esa posibilidad".

Por su parte, Jorge Sanz asegura que est¨¢ en la obra "por error". Lo dice porque va a ser su primer papel importante en teatro, medio en el que debut¨® el a?o pasado con un personaje en Ars¨¦nico, por favor bajo direcci¨®n de Gonzalo Su¨¢rez.

Peque?os cr¨ªmenes conyugales convierte al p¨²blico en testigo de una relaci¨®n conflictiva de pareja. Un tema que hasta podr¨ªa parecer banal, pero eso es algo que Schmitt, el autor vivo m¨¢s representado en Francia, nunca permite en sus textos. En ¨¦ste muestra a un marido, un reconocido escritor, que vuelve a casa tras perder la memoria en un accidente. Tanto ¨¦l como su esposa aprovechan esa amnesia para reconducir su relaci¨®n y sus personalidades y convertirlas en lo que quiz¨¢ nunca fueron. "Esta obra ofrece una mirada distinta, inteligente y divertida sobre la relaci¨®n entre un hombre y una mujer, aunque sin evitar temas cotidianos; lo que nos viene a decir es que para renovar la pareja es bueno volverse a elegir", comentan los protagonistas.

"Las mentiras que ambos se van inventando para forjar un pasado id¨ªlico se convierte en todo un espect¨¢culo muy inquietante para el espectador", apunta Tamzin Townsend, mientras Jorge Sanz piensa que son dos personas limpias y en el fondo buenas. "Me gusta defender a mis personajes, aunque sean malos", dice el actor. Para la directora estamos ante dos personajes morbosos: "No considero que se trate de un matrimonio en crisis; adem¨¢s, ¨¦l es un mentiroso compulsivo y nada claro".

Towsend considera que el principio de la obra es un relato en blanco y negro lleno de suspense: "Pero al tiempo es una comedia inteligente, algo que facilita el hecho de que son dos personajes con un nivel intelectual muy alto". "Posee un suspense que hay que mantener todo el rato y la tensi¨®n no se puede perder hasta el final, queremos jugar con el p¨²blico e incluso en alg¨²n momento hay que tenerle algo enga?ado", a?ade Amparo Larra?aga al tiempo que define lo que pasa con los personajes: "Es un juego de titanes; un juego hermoso con un gran discurso, y sobre todo es una comedia muy divertida tambi¨¦n de representar, porque juegas con el personaje y con el p¨²blico".

Jorge Sanz, que se muestra encantado con su compa?era de reparto, dice que todos los a?os que ella tiene de experiencia en teatro los ha puesto a su servicio: "Pero la realidad es que mi personaje lo hago con mucho miedo porque es un lobo con piel de cordero".