Migraciones: pol¨ªticas proactivas en Espa?a
EL CONSEJO NACIONAL de inteligencia de Estados Unidos, un organismo de expertos independientes que asesora al director de la CIA, hizo p¨²blico hace unos d¨ªas un informe sobre las tendencias globales de seguridad y conflictividad en el que se hablaba de un mundo caracterizado por una creciente sensaci¨®n de inseguridad, basada tanto en las percepciones psicol¨®gicas como en amenazas f¨ªsicas; en cuanto a las primeras, hac¨ªa referencia expl¨ªcita a los movimientos migratorios. Poco despu¨¦s, en el acto organizado por el Parlamento de Marruecos, el rey Juan Carlos insisti¨® en la inmigraci¨®n irregular que, a trav¨¦s de las pateras, relaciona a ese pa¨ªs con Espa?a, y dijo que no podemos permitir "que los mares que nos unen se conviertan en fosas comunes de vidas segadas en su plenitud".
Los movimientos de personas forman parte central de las agendas de todos los Gobiernos. Hay que prestar tanta atenci¨®n a los inmigrantes que llegan como integrar a aquellos que han decidido quedarse entre nosotros
Son dos de las ¨²ltimas manifestaciones sobre un asunto, la inmigraci¨®n, que forma parte central de las agendas de los Gobiernos de todo el mundo y, desde luego, del nuestro, sea del signo que sea. ?C¨®mo mejorar las pol¨ªticas migratorias de un fen¨®meno de car¨¢cter ya permanente, no transitorio, teniendo en cuenta que un alto porcentaje de los ciudadanos que emigran no tiene la intenci¨®n de regresar a su pa¨ªs de origen? A estas cuestiones dedica sus p¨¢ginas un trabajo realizado por el Instituto Elcano y el Ortega y Gasset (Inmigraciones: prioridades para una nueva pol¨ªtica espa?ola) y coordinado por Joaqu¨ªn Arango y Rickard Sandell.
En dicho trabajo se parte de la creciente insatisfacci¨®n sobre las pol¨ªticas de inmigraci¨®n practicadas, demostrada en los continuos cambios que de forma irremediable hay que hacer para adaptarse a la realidad. Un modelo como el espa?ol, que tiene como ejes la lucha contra la inmigraci¨®n ilegal (entendida sobre todo como refuerzo de los controles fronterizos y agilizaci¨®n de las expulsiones) y en la primac¨ªa de la contrataci¨®n de origen como v¨ªa preferente, si no ¨²nica, de acceso al mercado de trabajo para los extranjeros, no ha funcionado bien ni se ha revelado realista.
En Espa?a, la inmigraci¨®n se rige sobre todo por los cupos de inmigrantes. Por ello, el hecho de que el contingente anual canalice s¨®lo una peque?a fracci¨®n (compuesta en su mayor¨ªa por trabajadores temporales) de la inmigraci¨®n, constituye un indicio de que los mecanismos que el Estado ha elegido para gestionar la inmigraci¨®n regular no est¨¢n funcionando seg¨²n lo previsto. El informe se pregunta -y la cuesti¨®n permite deducir una respuesta seguramente positiva- si no ser¨ªa posible cambiar las pol¨ªticas hacia un planteamiento proactivo, estableciendo un objetivo anual de inmigraci¨®n que permitir¨ªa trabajar con m¨¢s certidumbre en dos terrenos: una asignaci¨®n de recursos y una planificaci¨®n de actividades de integraci¨®n m¨¢s acertada: se podr¨ªa dimensionar el gasto del Estado con respecto a la inmigraci¨®n, y, segundo, crear¨ªa oportunidades de inmigraci¨®n regular en lugar de la irregular que hoy existe. Para este objetivo habr¨ªa que tener en cuenta aspectos m¨¢s amplios que la mera coyuntura y contemplar las necesidades generales de recursos humanos, considerando puntos como el volumen m¨¢s deseable de poblaci¨®n, las previsiones acerca del crecimiento econ¨®mico de cada ejercicio, el aumento de la poblaci¨®n, las previsiones de desempleo o la capacidad de facilitar los recursos necesarios para atender a la poblaci¨®n inmigrada.
Entre las prioridades que deber¨ªa abordar una pol¨ªtica de inmigraci¨®n m¨¢s realista, el informe del Instituto Elcano destaca la necesidad de prestar tanta atenci¨®n a los que llegan como a los que permanecen en nuestro pa¨ªs. Para ello ser¨ªa preciso promover objetivos de integraci¨®n m¨ªnima, como la inclusi¨®n legal, el conocimiento del castellano, nociones b¨¢sicas relativas a la Constituci¨®n y los derechos constitucionales de los ciudadanos por el hecho de serlo, as¨ª como en lo relativo a educaci¨®n, vivienda o mercado de trabajo. ?sta ser¨ªa una pol¨ªtica activa de inmigraci¨®n.
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