"La m¨²sica es una fuerza conductora"
Favorito en las apuestas de la carrera de los Oscar, con dos candidaturas, como protagonista y secundario, en Ray (que opta a seis galardones) y Collateral, respectivamente, Jamie Foxx (Tejas, 1967) no iba para actor. Su vocaci¨®n inicial era la m¨²sica. Estudi¨® piano en la escuela Julliard y una novia le persuadi¨® para lanzarse a la actuaci¨®n. Algo de todo esto resuena en su interpretaci¨®n del genial m¨²sico y consumado mujeriego Ray Charles (Georgia, 1930-Los ?ngeles, 2004) en Ray, que hoy se estrena en Espa?a y que le ha valido al actor una decena de galardones, como el Premio Nacional de la Cr¨ªtica de EE UU y un Globo de Oro.
"Si sabes tocar el blues, puedes hacerlo todo". Foxx recuerda las palabras que le dirigi¨® el rey del soul en su primer encuentro, en el que no faltaron un par de pianos de por medio. Por un momento, parece que Ray Charles resucitado hablara al otro lado del tel¨¦fono, y no este treinta?ero que responde a una entrevista telef¨®nica desde el set de rodaje de su nueva pel¨ªcula, d¨ªas antes de hacerse p¨²blicas las candidaturas de los Oscar. "Fue incre¨ªble. Nos sentamos y empezamos a tocar un blues una y otra vez. De pronto pas¨® a un tema de Thelonius Monk y me equivoqu¨¦ en una nota. Me dijo: '?Por qu¨¦ demonios has hecho eso?'. Dije que no lo sab¨ªa. Me contest¨® que las notas estaban escritas bajo los dedos y que s¨®lo hab¨ªa que tomarse tiempo para tocar la m¨²sica apropiada. Es una buena met¨¢fora de la vida".
"?l me dijo que las notas est¨¢n escritas bajo los dedos y s¨®lo hab¨ªa que tomarse tiempo para tocar la m¨²sica apropiada"
"Cuando miras la vida de Ray Charles te das cuenta de que para todo tuvo que fiarse de la palabra de otros"
El director Taylor Hackford ha tardado 15 a?os en sacar adelante este proyecto que cont¨® con la ayuda del propio Charles, fallecido el pasado junio cuando Ray ya estaba acabada: "Su muerte bendijo la pel¨ªcula; ahora, cuando la vemos, su esp¨ªritu est¨¢ en la pantalla y la gente lo siente".
Desde su primer viaje a Seattle a los 17 a?os para abrirse camino como pianista y crooner, hasta su ¨¦xito como artista consagrado en los setenta, la pel¨ªcula recorre la vida del m¨²sico, que qued¨® ciego a los siete a?os; su larga adicci¨®n a la hero¨ªna; su lucha por los derechos civiles; sus amor¨ªos y su continua transgresi¨®n de g¨¦neros musicales desde el country al soul, pasando por el gospel o el rock. El actor no vivi¨® la pol¨¦mica que suscit¨® el hurac¨¢n Ray en un principio: "Cuando de peque?o escuch¨¦ su m¨²sica, ya era aceptada y reconocida por todos. Con la pel¨ªcula descubr¨ª la controversia que despert¨® por la mezcla de gospel y R & B. Para los negros, eso era todo lo que ten¨ªamos, crecimos bajo la opresi¨®n, fuimos esclavizados y segregados, y Dios era lo ¨²nico a lo que pod¨ªamos agarrarnos. Dar un paso m¨¢s all¨¢ y que un hombre cambiara esas palabras para hablar de clubes y chicas hizo que muchos se rasgaran las vestiduras. Pero fue una victoria para Ray Charles; derrib¨® las barreras y las ataduras. Dijo: "Dios me ha dado ese talento para conocerme y para hablar de mis mujeres, de mi vida, de mis demonios y de c¨®mo les hago frente".
La lucha de su personaje por los derechos civiles conmueve a este icono de la comunidad negra: "?l no cogi¨® su dinero y se ocult¨® detr¨¢s de una valla sin preocuparse por su gente y su causa. Opt¨® por usar su popularidad de una buena manera. Lo mismo ocurre hoy cuando quieres hablar en contra de la guerra, contra cosas que sabes que est¨¢n mal. Debes hacerlo".
Firme defensor de que la popularidad debe tener un fin, Foxx aclara cu¨¢l es el suyo: "A m¨ª lo que me gustar¨ªa hacer con la fama es luchar por mi gente. Los hermanos negros estamos expuestos a tantas cosas malas que rara vez tenemos la oportunidad de ver historias como la de Ray Charles, que te vuelven positivo. Inspirar¨¢ a mucha gente, pero ser¨¢n los j¨®venes afroamericanos quienes pensar¨¢n: 'T¨ªo, tengo la oportunidad de ser un gran actor', como cuando yo vi a Denzel Washington recoger su Oscar".
Foxx pas¨® durante el rodaje entre 12 y 14 horas diarias de absoluta ceguera, con falsos p¨¢rpados de pl¨¢stico que cubr¨ªan sus ojos. "Se trataba de ser ¨¦l. La manera de hacerlo era volverme ciego. Entonces entiendes verdaderamente su mundo; entiendes que si no puedes ver una puesta de sol, pero quieres escribir una canci¨®n sobre ello, tienes que inspirarte de alguna manera. Todas las cosas que hizo en su vida fueron para obtener esa informaci¨®n". Dice que esta experiencia agudiz¨® su sentido del tacto, del olfato y del o¨ªdo. "Ahora entiendo mejor lo que es la ceguera. Cuando miras la vida de Ray te das cuenta de que para todo tuvo que fiarse de la palabra de otros".
Antes de quedarse temporalmente ciego, Foxx grab¨® en v¨ªdeo al m¨²sico. "Actuando o en una entrevista ves al Ray Charles que est¨¢ frente a la c¨¢mara. El verdadero es el tipo que est¨¢ en su casa sentado en una banqueta hablando con sus hijos, en su vida normal. Conoces de sobra su Oh God, pero son sus momentos de silencio, de tranquilidad del domingo, a lo que tienes que llegar".
Inmerso en Jarhead, la nueva pel¨ªcula de Sam Mendes -"una historia que ser¨¢ pol¨¦mica, que tambi¨¦n habla de ceguera, de lo que no quieren ense?arte, del env¨ªo de tropas a guerras que en realidad pretenden vigilar pozos de petr¨®leo"-, Foxx todav¨ªa encuentra tiempo para sentarse al piano. "La m¨²sica es una fuerza conductora. Anoche estuve tocando una versi¨®n hip hop de I've got a woman".
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