Blair y el terrorismo
El Gobierno laborista brit¨¢nico pretende tener lista el 14 de marzo una nueva ley de prevenci¨®n del terrorismo, firmemente contestada por la oposici¨®n, que aumenta sus poderes en perjuicio de los jueces. Ese d¨ªa expira la normativa excepcional, aprobada con posterioridad al 11-S, que permite en el Reino Unido la detenci¨®n indefinida sin juicio ni acusaci¨®n para extranjeros sospechosos, normativa declarada ilegal y discriminatoria por la C¨¢mara de los Lores el pasado diciembre. El nuevo texto, que se aplicar¨¢ tambi¨¦n a los ciudadanos brit¨¢nicos, otorga al ministro del Interior, a trav¨¦s de las denominadas "¨®rdenes de control", amplios poderes contra sospechosos de terrorismo sin pruebas suficientes para su procesamiento o cuya divulgaci¨®n comprometa a los servicios secretos.
El primer ministro, Tony Blair, dijo ayer en el Parlamento que la seguridad nacional est¨¢ por encima de los derechos civiles, por importantes que ¨¦stos sean. Justificaba as¨ª que su ministro del Interior, sin concurso de los jueces, pueda restringir los derechos de asociaci¨®n de determinados sospechosos, sus movimientos dentro y fuera del pa¨ªs, su lugar de trabajo o residencia, prohibir su contacto con personas concretas o imponer su seguimiento electr¨®nico. El Gobierno, forzado por la revuelta combinada de conservadores y liberales, ha abandonado por el momento su pretensi¨®n de arresto domiciliario indefinido. Y ha concedido que cualquier "orden de control" sea revisada por un juez en el plazo de una semana.
Reino Unido, un paradigm¨¢tico Estado de derecho, ha seguido desde los acontecimientos del 11-S una deriva restrictiva de las libertades, basada en la percepci¨®n gubernamental, enfatizada ayer por Blair, de que la seguridad del pa¨ªs est¨¢ gravemente amenazada por el terrorismo internacional. Aunque as¨ª fuera, la ley sienta el peligros¨ªsimo principio de que las restricciones a derechos b¨¢sicos ciudadanos sean impuestas en una democracia por un pol¨ªtico, no por un juez, pese a su revisi¨®n posterior.
En sus prisas por sacar adelante el proyecto, el ministro del Interior argumenta que si no pasa a tiempo el escrutinio parlamentario deber¨¢ prorrogarse la ilegal legislaci¨®n anterior. El Gobierno tiene el control de los Comunes, donde el lunes pr¨®ximo acaba el debate, pero le ser¨¢ m¨¢s dif¨ªcil hacerlo pasar por la C¨¢mara de los Lores, en la que necesita el apoyo conservador. Es un argumento m¨¢s para que el primer ministro acepte la oferta opositora de prolongar brevemente las leyes de emergencia y permitir un debate en profundidad de un texto demasiado importante para que atraviese el Parlamento brit¨¢nico como un cicl¨®n.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.