Las tropas de EE UU suman ya 1.500 muertos en Irak

La muerte de un infante de Marina ha elevado a 1.500 el n¨²mero de bajas mortales entre las tropas de Estados Unidos que invadieron Irak hace casi dos a?os, seg¨²n recuentos independientes conocidos ayer. El Pent¨¢gono no ha hecho p¨²blica a¨²n su cuenta oficial, y hasta el mi¨¦rcoles hab¨ªa confirmado que 1.140 soldados han muerto en "acci¨®n hostil" (en combate) y otros 351 en otro tipo de incidentes. El n¨²mero oficial supone nueve menos de las 1.500 bajas mortales, pero las cifras del Departamento de Defensa est¨¢n habitualmente por detr¨¢s de la cifra de muertos confirmados por los militares estadounidenses en Irak porque s¨®lo se publican cuando se completa el tr¨¢mite de notificaci¨®n a los familiares.

Por otro lado, dos coches bomba conducidos por suicidas hicieron explosi¨®n ayer por la ma?ana en un puesto de control que da acceso al Ministerio del Interior iraqu¨ª, lo que provoc¨® la muerte de cinco polic¨ªas y heridas a otros siete. Una de las bombas estall¨® cuando los polic¨ªas disparaban contra el coche, que se dirig¨ªa hacia el cord¨®n de seguridad exterior establecido en torno al edificio. Otro ataque con granadas de mortero se produjo en la capital contra un puesto de control militar, que caus¨® heridas a un n¨²mero no determinado de civiles, mientras que en Baquba, a 60 kil¨®metros al norte de Bagdad, otro suicida vol¨® por los aires en un tercer coche bomba cerca del cuartel general de la Guardia Nacional: un civil muri¨® y 18 personas resultaron heridas.

Los ataques forman parte de una oleada de violencia que tiene como objetivo a las fuerzas de seguridad iraqu¨ªes, y ponen de manifiesto que la insurgencia todav¨ªa tiene fuerza y organizaci¨®n para atacar en buena parte del pa¨ªs, incluso en el coraz¨®n mismo de la capital, y parece contar con un importante suministro de activistas dispuestos suicidarse con sus bombas para sembrar el terror con el objetivo de expulsar a las fuerzas estadounidenses y dejar sin apoyo al Gobierno iraqu¨ª. El mi¨¦rcoles, insurgentes suicidas mataron a 13 soldados iraqu¨ªes en dos ataques.

La persistente violencia amenaza con borrar cualquier resto del optimismo que a¨²n queda en la sociedad iraqu¨ª tras las elecciones del 30 de enero.