D¨ªas amargos para Kofi Annan

La luna de miel le ha durado poco al secretario general de Naciones Unidas, Kofi Annan. Lo dec¨ªa su propio jefe de gabinete, Mark Malloch-Brown, un d¨ªa despu¨¦s de que Annan presentara la propuesta de reforma que debe recuperar el prestigio de la instituci¨®n, coincidiendo con la celebraci¨®n de su 60? aniversario. Pero el esc¨¢ndalo en el programa Petr¨®leo por Alimentos para Irak no se lo va a poner f¨¢cil, y amenaza con minar su figura en un momento clave.

La prensa en EE UU est¨¢ filtrando estos d¨ªas los detalles del segundo informe de la investigaci¨®n sobre el presunto fraude en el programa humanitario, que acab¨® facilitando sobornos millonarios a Sadam Husein. Y las conclusiones no son alentadoras: por primera vez se acusa al secretario general de la ONU de haber sido incapaz de atajar los problemas burocr¨¢ticos que llevaron a esta situaci¨®n.

En concreto, seg¨²n revela The Wall Street Journal, el informe acusa a Kofi Annan de descuidar la relaci¨®n de su hijo Kojo con la compa?¨ªa suiza Cotecna Inspections, que se hizo con un contrato valorado en 60 millones de d¨®lares para la inspecci¨®n de los cargamentos hacia Irak durante el embargo.

"Annan es criticado especialmente por no prestar atenci¨®n suficiente al conflicto de intereses que rodeaba a su hijo", afirma el rotativo, citando a fuentes an¨®nimas que han tenido acceso al documento con los resultados preliminares de la investigaci¨®n que dirige Paul Volcker, ex presidente de la Reserva Federal de Estados Unidos y designado por el propio Annan al frente del equipo investigador.

El informe, el segundo de un total de tres, se presentar¨¢ el pr¨®ximo martes y est¨¢ dedicado exclusivamente a aclarar la relaci¨®n entre Kojo Annan y Cotecna, y a analizar el grado de implicaci¨®n del secretario general en este asunto.

The New York Times apoya la misma conclusi¨®n al afirmar que "Annan fall¨® a la hora de percibir el aparente conflicto de inter¨¦s que planteaba el trabajo de su hijo con un contratista del programa". Desde el estallido del esc¨¢ndalo, se especula con que Kojo ayud¨® a Cotecna a colocarse en una posici¨®n ventajosa para ganar el concurso.

El diario neoyorquino explica que el segundo informe de Volcker explora "con todo detalle" la relaci¨®n entre Kofi Annan y su hijo. En este punto, The Wall Street Journal se?ala que el secretario general estaba "cegado" ante lo que pudiera hacer su hijo, al que se acusa de utilizar el nombre y el cargo de su padre en beneficio personal y de Cotecna. De hecho, hace menos de dos meses Annan reconoc¨ªa p¨²blicamente que su hijo no le hab¨ªa informado de nada. "Ser¨¢ una lectura poco placentera", indicaron fuentes consultadas por los dos diarios.

La compa?¨ªa suiza niega cualquier tipo de irregularidad y explica que el trabajo de Kojo se limitaba al negocio que tiene en ?frica, no con la ONU. Kojo dej¨® de trabajar para Cotecna al final de 1998, cuando la compa?¨ªa recibi¨® el contrato de la ONU. Hasta esa fecha, le pag¨® 200.000 d¨®lares. Pero siguieron los pagos, a raz¨®n de 2.500 d¨®lares mensuales entre 1999 y febrero de 2004, como parte de una cl¨¢usula que le imped¨ªa trabajar para la competencia en Nigeria o Ghana.

El montante total pagado por Cotecna al hijo de Annan asciende as¨ª a 365.000 d¨®lares entre 1996 y 2004, una cantidad muy superior a los 175.000 d¨®lares desclasificados hace mes y medio.

La compa?¨ªa suiza insiste en que no hay nada malo en contratar al hijo de Annan y tener negocios con la ONU, adem¨¢s de reiterar que est¨¢n cooperando plenamente con la investigaci¨®n. Es m¨¢s, se asegura que hay en curso una auditor¨ªa interna en la que ha pedido a los bancos suizos que levanten el secreto y faciliten informaci¨®n para aclarar la cifra real de los pagos.

Seg¨²n The Wall Street Journal, los resultados de la investigaci¨®n no muestran evidencias de que Kofi Annan pudiera haber influido en el concurso o recibido beneficios de Cotecna en forma de dinero, pero esto no impedir¨¢ que el informe critique al secretario general por haber mantenido diversos contactos con directivos de la empresa suiza mientras era un alto ejecutivo de Naciones Unidas. Malloch-Brown, sin embargo, conf¨ªa en que al final el secretario general "ser¨¢ exonerado".