Cuando las cosas van bien
Nos quejamos constantemente de todas aquellas cosas que nos parecen mal. Ser¨ªa justo hacerlo tambi¨¦n cuando fuesen bien. Y de ah¨ª esta carta. El concepto generalizado que tenemos de la sanidad p¨²blica no es muy favorable (puede que en algunos aspectos tengamos raz¨®n, sin lugar a dudas) pero una reciente intervenci¨®n quir¨²rgica me obliga a escribir este comentario. Ingreso en la planta para card¨ªacos del hospital La Fe de Valencia cuando me diagnosticaron estenosis a¨®rtica severa en v¨¢lvula calcificada, lo que paladinamente significa muerte s¨²bita en cualquier instante. A partir de ese momento te adentras en otro mundo que a los reci¨¦n llegados nos parece ca¨®tico. Te dejas llevar de un lado a otro para hacerte todas la pruebas necesarias, que acaban confirmando el diagn¨®stico. El doctor Palencia me lo comunica sin ning¨²n dramatismo y con una delicadeza extraordinaria, pero mi moral se ve mermada algo m¨¢s de lo mucho que estaba. Miro con ojos desorbitados y escucho las conversaciones entre los que esperamos en las salas de espera y tambi¨¦n entre los propios profesionales realizando las pruebas. Voy comprobando en cada momento el alto grado de humanidad de todos los componentes de esa gran familia que se dedica a cuidar nuestra salud. Admirable como nos tratan a pesar de la inevitable masificaci¨®n.
Quir¨®fano (me opera el magn¨ªfico cirujano doctor Torregrosa Puerta), rehabilitaci¨®n y un mundo contrarreloj. A las pocas horas de abrir los ojos con una visi¨®n perfecta y una claridad de ideas extraordinaria me parece una casa de locos muy cuerdos. Un aut¨¦ntico caos perfectamente controlado con mucha gente que se mueve sin parar como las hormigas en su h¨¢bitat y que nunca se tropiezan. Necesitar¨ªa muchas l¨ªneas para poder poner los nombres de todas aquellas personas con las que tuve alg¨²n contacto y darles las gracias personalmente, no tanto por su profesionalidad (que est¨¢ fuera de toda duda), sino por la gran humanidad con que me envolvieron mientras estuve all¨ª. A fin de cuentas me salvaron la vida y solamente tengo una. Para todos ellos mi agradecimiento debe ser eterno.
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