Irresponsable Mancini
El f¨²tbol, como ocurre en otros ¨®rdenes de la vida, da cobijo a un pu?ado de irresponsables que se refugian bajo la bandera del club que les hace millonarios y creen tener barra libre para decir la primera estupidez que se les ocurra. Por supuesto, sin medir el da?o que provocan. Esa menudencia queda para los terrenales, no para las estrellas deslumbradas por los focos y los ahorros, caso de Roberto Mancini, el entrenador del Inter.
El martes, mientras los ultras interistas se dedicaban al vandalismo en San Siro, este ex jugador reci¨¦n llegado a los banquillos, con aire de maniqu¨ª de Armani, se dirigi¨® con grandes aspavientos al ¨¢rbitro Markus Merk, que desde el medio campo asist¨ªa estupefacto a lo que estaba sucediendo. "Se?or Mancini, ?qu¨¦ le dijo al colegiado?", preguntaron al t¨¦cnico en la rueda de prensa posterior al vergonzoso espect¨¢culo. "Que la culpa era suya", espet¨® sin titubear. "?Y qu¨¦ le han parecido los incidentes?". "S¨®lo hablar¨¦ del partido", respondi¨®. Justo el mensaje que los indeseables que incendiaron el derby milan¨¦s quer¨ªan escuchar.
Injustificables en cualquier caso las palabras de Mancini. El pecado de Merk hab¨ªa sido anular un gol a Cambiasso. Fuera o no legal, que no es la cuesti¨®n, de haber sido concedido, el Inter habr¨ªa tenido que marcar otros tres para clasificarse: casi nada para los 20 minutos que quedaban. Mancini, como algunos de sus jugadores -caso de C¨®rdoba, que tambi¨¦n ri?¨® al ¨¢rbitro-, act¨²o con una descarada demagogia para intentar maquillar la derrota de una instituci¨®n que hace tiempo que va a la deriva. Es tal el caldo creado en los estadios italianos que muchos actores del calcio ya ni se inmutan cuando cae una moto desde la grada, las tribunas se decoran con esv¨¢sticas o vuelan bengalas como c¨¢scaras de pipas.
Lo mismo da que haya resultado herido un compa?ero. S¨®lo as¨ª se entiende que, durante la pirotecnia de San Siro, ni Mancini ni sus jugadores se dirigieran hacia la grada para pedir sosiego. Qu¨¦ demonios, tampoco ning¨²n ejecutivo del club dio la orden de emitir un mensaje de concordia por la megafon¨ªa del estadio. Es la ley que impera en el calcio: la que dictan los v¨¢ndalos, con los que el irresponsable Mancini tuvo un gui?o c¨®mplice.
Si la UEFA act¨²a con la contundencia que tanto proclama, con micr¨®fonos por delante, el t¨¦cnico interista debe recibir un duro correctivo. Jos¨¦ Mourinho, por bocazas y bravuc¨®n, se acaba de llevar un severo tir¨®n de orejas. Y bien merecido. Lo de Mancini es a¨²n peor que lo del luso. ?O no se debe reprender a quien se deslengua para culpar a un ¨¢rbitro de una barbarie semejante y, encima, no condena la violencia? Que la UEFA juegue limpio.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.