Aprendiendo de los cl¨¢sicos
Alejandro Valverde descubre en B¨¦lgica que no todo es como se lo hab¨ªan contado
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Cinco kil¨®metros antes del final de la Amstel Gold Race, el domingo pasado, cuando s¨®lo faltaba la ¨²ltima subida al Cauberg, la vida era bella para Alejandro Valverde. Se sent¨ªa fuerte, estaba bien colocado, la primera gran cl¨¢sica en su historial ser¨ªa cuesti¨®n de minutos. Fue entonces cuando sufri¨® un desfallecimiento, cuando se dio cuenta de que no todo en ciclismo era como se lo hab¨ªan contado.
Acostumbrado a carreras m¨¢s cortas, de menos de 200 kil¨®metros; acostumbrado a ganar con una pierna en muchas ocasiones, a apenas tomar el avituallamiento en muchas ocasiones, se encontr¨® Valverde, de 24 a?os, rodeado de expertos en cl¨¢sicas, de veteranos, de conocedores del terreno. Hasta entonces dominaba, derrochaba, generoso, fuerzas, se exhib¨ªa. Despu¨¦s se encontr¨® d¨¦bil y perdido.
En la Flecha Valona, la segunda prueba del tr¨ªptico arden¨¦s que cierra hoy, con la decana, la Lieja-Bastogne-Lieja (LBL), el ciclo de cl¨¢sicas de primavera, Valverde tampoco se encontr¨®.
Las perspectivas para hoy, para la dur¨ªsma LBL, la de la lluvia, el fr¨ªo, los 260 kil¨®metros, las 12 cotas y el regreso a Wanne, Sockeu y Haute Lev¨¦e, tampoco son optimistas. "Ojal¨¢ estuviera al ciento por ciento", dice a su equipo, "porque estas carreras me encantan".
"Tenemos todav¨ªa mucho que aprender de la cultura de las cl¨¢sicas", reconoce Eusebio Unzue, su director en el Illes Balears; "¨¦l, que a¨²n no se ha despojado del todo de la cultura del Kelme, y nosotros, que hasta ahora no les hab¨ªamos dado tanta importancia. Ya le he dicho que se olvide de las vueltas peque?as y empiece a pensar que lo importante es esto".
Valverde, porcentaje graso de sprinter en un corredor al que le gusta escalar, ha chocado con la dureza de las cl¨¢sicas belgas, lo que no le ha hecho perder su proverbial optimismo. Se pasa el d¨ªa gastando bromas a sus compa?eros, sonriendo ante los medios belgas, que, deslumbrados, le buscan todos los d¨ªas. Entren¨¢ndose tranquilo. Pensando que quiz¨¢s este a?o, el de su conocimiento de las cl¨¢sicas, no sea el suyo en B¨¦lgica -los espa?oles con alguna posibilidad hoy de evitar que el italiano Danilo di Luca logre su tercera victoria de la semana se llaman Etxebarria (Liberty), Freire (Rabobank) o Pereiro (Phonak)-, pero que el pr¨®ximo ser¨¢ otro cantar.
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