El Ejecutivo del PP ya consider¨® la misma medida en 1997, pero renunci¨® por la dificultad del proceso

No es ¨¦sta la primera vez que un Gobierno espa?ol considera convocar la Comisi¨®n Interministerial de Asilo y Refugio para revisar el estatuto de asilado que Severo Moto obtuvo en 1986. Cuando este opositor guineano fue expulsado de Angola tras haber sido acusado de participar en otra intentona golpista contra Teodoro Obiang, en 1997, el entonces ministro de Exteriores, Abel Matutes, dijo en las Cortes que el Gobierno del PP se hab¨ªa planteado tambi¨¦n suspenderle el estatuto de refugiado, pero que desist¨ªa, porque encontraba, como ahora, que el proceso era demasiado largo y complicado.

El PP mantuvo, al menos formalmente, durante sus dos legislaturas de Gobierno una relaci¨®n dif¨ªcil con este personaje, al que Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar integr¨®, no obstante, en su Internacional de los Dem¨®cratas de Centro (IDC).

M¨¢s all¨¢ de lo que pueda ocurrir con su estatuto, sobre Moto pesa, adem¨¢s, la petici¨®n de extradici¨®n a Guinea por su presunta implicaci¨®n en el golpe fallido del pasado febrero. El Gobierno no contempla, por razones jur¨ªdicas y humanitarias, la posibilidad de atenderla, como tampoco la que pudiera presentar Zimbabue. Otra cosa es que pidiera la extradici¨®n Sur¨¢frica, donde tambi¨¦n hay un proceso abierto por los mismos hechos contra algunos de los mercenarios implicados y contra Mark Thatcher, hijo de la ex primera ministra brit¨¢nica.

Una posibilidad, en el caso de que el opositor guineano persista en violar sus obligaciones como refugiado en Espa?a o incluso en expresar desconfianza hacia la protecci¨®n que se le ofrece, es que se le invite a buscar asilo en cualquier otro pa¨ªs de su elecci¨®n.

"Lo que el se?or Moto debe entender es que ¨¦l no es una excepci¨®n en Espa?a, que la ley es igual para todos y que tiene que cumplirla como todos los espa?oles", comenta Bernardino Le¨®n.

"Lamento tener que hablar de Severo Moto, un personaje pat¨¦tico, que acusa en Croacia, viene aqu¨ª y se desmiente a s¨ª mismo, y que no merece tanta atenci¨®n. Eso es lo que est¨¢ buscando, publicidad", concluye el secretario de Estado, con disgusto.

Le¨®n asegura que desde su regreso de Croacia, el pasado s¨¢bado, e incluso desde que el ministro de Exteriores, Miguel ?ngel Moratinos, estuvo en Guinea, a finales de febrero, nadie de la Administraci¨®n espa?ola se ha puesto en contactado con Severo Moto.