"Los educadores estamos destrozados"

"El equipo de educadores venimos denunciando esta situaci¨®n desde hace tiempo. Hemos tenido una sensaci¨®n de soledad y de desprotecci¨®n que, al final, ha causado merma en nuestra salud f¨ªsica y psicol¨®gica. Estamos destrozados". As¨ª se expresa Mar¨ªa Galzakorta, una de las monitoras encargadas de atender a los menores extranjeros no acompa?ados que llegan a Guip¨²zcoa.

Galzakorta, al igual que sus 26 compa?eros, est¨¢ contratada por Cruz Roja, pero no duda en asegurar que "las respuestas a esta situaci¨®n las tiene la Diputaci¨®n", que es la responsable del tutelaje de los menores, la que facilita los medios materiales y la que dise?a la pol¨ªtica de atenci¨®n a estos chicos. En este sentido, la educadora mira sobre todo hacia el Departamento de Pol¨ªtica Social. "Derechos Humanos es bastante colaborador, pero Pol¨ªtica Social no colabora en absoluto con nuestras peticiones", apunta.

A fin de lograr la integraci¨®n de los chicos a los que atienden, los monitores reclaman un proyecto educativo que no se rija ¨²nicamente por la etiqueta de "menores extranjeros", sino que tenga en cuenta la edad y los distintos perfiles y problemas de los j¨®venes. "Nosotros atendemos a chicos con consumos elevados de droga que no podemos derivar a centros especiales para ello", detalla.

Tampoco les parece bien mezclar a ni?os de 12 a?os con adolescentes de 17, por lo que piden que la edad m¨ªnima para ingresar en los centros para extranjeros se establezca en 15 a?os. "Tanto nosotros como las ikastolas hemos solicitado que se derive a los m¨¢s peque?os a los recursos normales" para menores no extranjeros, explica. Su solicitud no ha sido atendida. "No queremos guetos", apostilla.