Un constructor romano planea tomar el control del 'Corriere'

El Corriere della Sera, el m¨¢s prestigioso y difundido de los diarios italianos, sufre el asalto de un personaje singular. Stefano Ricucci, un constructor romano de 42 a?os con cabellos largos y novia actriz, ha invertido al menos 600 millones de euros en adquirir el 18,5% de las acciones de RCS Mediagroup, el holding que controla el Corriere y el diario espa?ol El Mundo, y asegura que proseguir¨¢ la escalada hasta hacerse con la mayor¨ªa.

Lo m¨¢s intrigante es que Ricucci es tambi¨¦n uno de los protagonistas de la resistencia al BBVA y a ABN Amro en sus respectivas OPA sobre Banca Nazionale del Lavoro y Banca Antonveneta. Sus fondos parecen inagotables. Se sospecha que tiene detr¨¢s a alguien muy poderoso, pero se ignora qui¨¦n puede ser.

El gran diario milan¨¦s es una de las instituciones m¨¢s respetadas de Italia. En el Consejo de Administraci¨®n figura lo m¨¢s selecto de la aristocracia industrial y financiera del pa¨ªs: Mediobanca, Fiat, Pirelli, Capitalia, Banca Intesa y Generali, entre otros. Ese gotha del dinero asiste con alarma a los embates de Ricucci, y el pasado d¨ªa 5 decidi¨® blindar su mayor¨ªa, del 58%, estableciendo un pacto por el que ninguno de los socios podr¨¢ vender a terceros sin ofrecer previamente la opci¨®n de comprar al resto del pacto de sindicaci¨®n. Aunque el constructor romano se hiciera con el 23% del capital que est¨¢ a¨²n desperdigado en manos de peque?os inversores, quedar¨ªa en minor¨ªa.

Pero el blindaje es relativo. Algunos accionistas en dificultades, como Fiat (10%), podr¨ªan vender a Ricucci si ¨¦ste ofreciera un buen precio. Desde el principio se ha supuesto, adem¨¢s, que dentro del "pacto de la aristocracia" hay un "traidor", alguien que act¨²a de acuerdo con el asaltante. Y en caso de OPA formal, una opci¨®n que Ricucci no descarta, el pacto de sindicaci¨®n carecer¨ªa de validez.

Los periodistas del Corriere temen que el asalto encubra intereses pol¨ªticos. La l¨ªnea editorial es moderada y no especialmente amable con Silvio Berlusconi. Detr¨¢s de Ricucci podr¨ªa estar un grupo conservador. O el propio Berlusconi. La redacci¨®n ya realiz¨® una huelga, el 21 de mayo, y prepara nuevos paros para oponerse a un hipot¨¦tico cambio de orientaci¨®n editorial.