"Hay que adaptar los ideales europeos a la realidad actual"

El Reino Unido no est¨¢ en el euro ni en el espacio Schengen que elimin¨® las fronteras. Va de "coche escoba" en la UE, como dijo ayer el l¨ªder de los socialistas, el alem¨¢n Martin Shulz. El a?o pasado, Londres impuso sus l¨ªneas rojas para bloquear avances europe¨ªstas en el proyecto constitucional. Una de ellas fue para frenar nuevos pasos a favor de la Europa social. Ayer, sin embargo, Tony Blair se present¨® en la Euroc¨¢mara con dos proyectos reformistas bajo el brazo: la modificaci¨®n del modelo social hacia f¨®rmulas m¨¢s liberales, de un lado, y la mayor cooperaci¨®n contra el crimen organizado y la inmigraci¨®n ilegal, de otro.

"Necesitamos una Europa social, pero que funcione", afirm¨® el primer ministro para explicar as¨ª su tesis: "D¨ªganme qu¨¦ tipo de modelo social es ¨¦se que tiene 20 millones de desempleados en Europa, una tasa de competitividad que sigue perdiendo terreno frente a EE UU, que genera menos cient¨ªficos que India. De las 20 mejores universidades del mundo, s¨®lo dos est¨¢n en Europa. Invertir en conocimiento, en perfeccionamiento, en pol¨ªticas laborales activas, en modernizar las ciudades, en ayudar a las peque?as y medianas empresas... ?so es una pol¨ªtica social moderna, no tanta regulaci¨®n y protecci¨®n al empleo que salve algunos puestos de trabajo a corto plazo a costa de perder muchos en el futuro".

Cr¨ªticas de la izquierda

La explicaci¨®n fue aplaudida desde los bancos del Partido Popular Europeo (PPE), mientras desde los esca?os de la izquierda le recordaban despu¨¦s a Blair que era precisamente la deriva liberal la que hab¨ªa cosechado muchos de los noes en el refer¨¦ndum franc¨¦s sobre la Constituci¨®n, como puso de relieve el socialista espa?ol Enrique Bar¨®n.

"Ha llegado el momento de reformar, de cambiar, pero tampoco hay que llevar a un museo a los que defienden el modelo social europeo. Se necesita m¨¢s competitividad y flexibilidad, pero el crecimiento debe lograrse a la vez que se crean empleos dignos, con sueldos dignos", le dijo Shulz a Blair. Incluso el n¨²mero dos del Ministerio luxemburgu¨¦s de Exteriores, Nicolas Smidt, lo puso de relieve luego en rueda de prensa: "Los europeos desean una Europa fuerte, integrada, pero con una econom¨ªa al servicio de las personas". Blair, sin embargo, insisti¨® m¨¢s tarde: "Se trata de que los ideales europeos se puedan transformar y adaptar a la realidad actual".

El otro campo de reformas es el relativo a la cooperaci¨®n en Justicia e Interior, otro terreno en el que Londres ech¨® el freno en el proyecto constitucional. Al Reino Unido, la delincuencia le cuesta 20.000 millones de libras al a?o, dijo Blair, y ya es hora de que Europa reaccione en su conjunto: "El crimen organizado y el narcotr¨¢fico nos aplasta. Apliquemos el plan europeo. La cosa urge. La ciudadan¨ªa europea nos lo agradecer¨¢".