Coincidencias y diferencias entre Antoni T¨¤pies y Arnulf Rainer
El museo austriaco de Essl exhibe 90 obras de los dos artistas
El Museo Essl, en Klosterneuburg, junto a Viena, presenta hasta el 29 de enero de 2006 una exposici¨®n con unas 90 obras de Antoni T¨¤pies (Barcelona, 1923) y del austriaco Arnulf Rainer (Baden, 1929), a los que caracteriza como Los portadores del secreto. La muestra busca paralelismos, coincidencias y diferencias entre estas dos figuras clave del arte abstracto, que contribuyeron de forma decisiva a la evoluci¨®n de la pintura.
A los dos creadores les une la amistad, el inter¨¦s por temas parecidos y la inquietante fuerza de su expresi¨®n enigm¨¢tica, asc¨¦tica, que puede parecer herm¨¦tica. Ambos tuvieron que hacer frente en un principio a la reticencia de un entorno adverso: T¨¤pies, en la Espa?a franquista, y Rainer, en la Austria posterior al nazismo. En esta muestra, dise?ada por el comisario y escritor franc¨¦s Jean Fr¨¦mon, no aparecen los nombres y los t¨ªtulos al pie de cada lienzo, para que el visitante agudice su mirada y aprenda a diferenciar entre uno y otro.
Arnulf Rainer comenz¨® acerc¨¢ndose al surrealismo franc¨¦s, jug¨® un papel importante en la reducida repercusi¨®n en Austria de las rebeliones del 68, revent¨® tab¨²es est¨¦ticos trabajando con la fealdad, la enfermedad, la destrucci¨®n y otros lados inquietantes del ser y del cuerpo humano, para llegar, m¨¢s adelante, al llamado tachismo. Sus cuadros, con pinturas y fotograf¨ªas tachadas, repintadas y casi destruidas por ¨¦l mismo, forman parte de su obra m¨¢s caracter¨ªstica, como la impresionante serie realizada en 1975 con fotograf¨ªas de esculturas de Messerchmidt, retocadas con l¨ªneas en negro que dramatizan y destilan la expresi¨®n del individuo.
El comisario de la muestra explica en el cat¨¢logo que Rainer tacha y oculta sus cuadros una y otra vez para mejorar la obra, por amor a la perfecci¨®n, obsesionado con la transformaci¨®n, con un inter¨¦s casi m¨ªstico. Para Rainer, el desaf¨ªo est¨¢, seg¨²n sus propias palabras, en "lo impenetrable, lo fronterizo y la monoton¨ªa" , mientras que T¨¤pies reconoce que lo que a ¨¦l le atrae son "los motivos que tienen relaci¨®n con lo oculto y lo enigm¨¢tico y que resultan dif¨ªciles de captar". Del artista catal¨¢n, la muestra destaca su trayectoria desde el simbolismo a sus lienzos con relieve, concebidos como objetos en tierra, arena, cola y yeso, con composiciones de fuerte contenido espiritual. T¨¤pies es, seg¨²n Fr¨¦mon, "m¨¢s explicativo" que Rainer, ya que presenta temas y formas descifrables, como la silla, la cama, la serpiente, ojos y bocas. La exposici¨®n incluye tambi¨¦n algunas esculturas de T¨¤pies, como Cap embenat II, una gran m¨¢scara acostada, cubierta de vendas, o Banyera II, una ba?era antigua, rota, con un agujero en forma de cruz.
Las obras, todas propiedad del matrimonio Agnes y Karlheinz Essl (due?os de una cadena de supermercados de bricolaje, coleccionistas de arte y fundadores del museo que lleva su nombre), se reparten en varias salas en orden tem¨¢tico.
La cruz
Un sector de la muestra est¨¢ dedicado a la figura de la cruz, sin relaci¨®n con ninguna religi¨®n en concreto. Rainer, representado aqu¨ª por varios lienzos en forma de cruz cubiertos con colores chorreantes, sostiene que la cruz es el resumen del rostro humano: "M¨ªrate al espejo y ver¨¢s la marca de la cruz en todas partes. La cruz es, al mismo tiempo, nuestra historia europea, no importa la posici¨®n que uno tenga ante ella".
De T¨¤pies, en la misma sala, se ven cuadros de grandes dimensiones con varios s¨ªmbolos, en los que tambi¨¦n aparece la cruz. "Cuando hago una marca, una equis, una cruz o una espiral, siento una cierta alegr¨ªa. Veo que con esta marca el cuadro adquiere una fuerza determinada. Y no me explic¨® por qu¨¦..." , dice T¨¤pies.
Las citas de ambos artistas se leen en cada sala, como si fueran necesarias para descifrar la obra. Rainer explica por qu¨¦ se concentra en la clara forma de la cruz y en lo monocrom¨¢tico: " El ruido y el patetismo (de mis anteriores obras) me han llevado al silencio, a lo cubierto, a lo equilibrado". Y T¨¤pies explica su credo: "El fen¨®meno religioso del que hablo tiene muy poco que ver con religiones oficiales. De todas formas, mi dios no se encuentra en el cielo, sino en la sabidur¨ªa del Extremo Oriente, sobre la tierra".
Karlheinz Essl, fundador y due?o del museo, visit¨® al artista catal¨¢n en dos ocasiones en Barcelona. En el cat¨¢logo relata que se vio sorprendido, porque lo primero que vio en la entrada de la casa de T¨¤pies fue un cuadro de Arnulf Rainer, del que luego el artista catal¨¢n le habl¨® con los mayores elogios. Essl, conocedor y gran coleccionista de Rainer, empez¨® a reflexionar sobre los dos personajes hasta que lleg¨® a la conclusi¨®n de que entre ambos hab¨ªa una "familiaridad espiritual siempre presente, aunque se exprese de forma diferente en el arte y la composici¨®n de la imagen". Seg¨²n el coleccionista, un protestante profundamente religioso, "ambos artistas tienen un secreto que, cuyas ¨²ltimas consecuencias, s¨®lo ellos conocen. Cuidan su secreto como un grial y s¨®lo est¨¢n dispuestos a darlo a conocer en clave".
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.