Por qui¨¦n doblan las campanas

"Cuando doblen las campanas, no preguntes por qui¨¦n doblan; doblan por ti", escribi¨® el poeta John Donne hace varios siglos. El mi¨¦rcoles murieron m¨¢s de treinta personas en un atentado con coche bomba en Irak; veintitr¨¦s de las v¨ªctimas mortales eran ni?os. Las campanas, en lo que respecta a la opini¨®n p¨²blica, sin embargo, doblaron con bastante menos fuerza de lo que lo han hecho estos d¨ªas con motivo de la matanza perpetrada en Londres. ?Se ha producido alguna vez un atentado en que hayan muerto m¨¢s de veinte ni?os? Creo que no. Un hecho sin precedentes al que los medios de comunicaci¨®n, en general, le han concedido much¨ªsima menos importancia que a la cadena de atentados de la capital inglesa -ayer, seis d¨ªas despu¨¦s de la matanza de Londres, la mayor¨ªa de peri¨®dicos dedicaba tres veces m¨¢s espacio a este atentado que al de Irak-. Existen muertos de primera, muertos de segunda... y muertos de octava fila. Veintitr¨¦s ni?os muertos saltaron hechos pedazos cuando iban a recoger los caramelos que les ofrec¨ªan unos soldados norteamericanos.

Las campanas ayer, en Irak, doblaron por todos, aunque muchos, ocupados en escuchar los ecos de las campanas de Londres, no las quisieron escuchar. ?Se convocar¨¢ en los pr¨®ximos d¨ªas un par de minutos -o un minuto, o treinta segundos- de silencio en memoria de las criaturas muertas en Irak.